Capítulo 37: Enfermedad.

1.7K 88 1
                                    

+Días atrás en la escuela de Niiyama+

Maiko: ¿Iras a entrenar hoy capitana? No es necesario ir al gimnasio cuando no toca entrenar.

______: ¿Dije que me convertiría en alguien mejor no? Entonces tengo que exigirme más.

Kanoka: Bokuto nos dijo que te vio corriendo a las 5 de la mañana y yo te vi corriendo otra vez a las 8 de la tarde y todavía quieres entrenar ¿Qué eres? ¿un monstruo?

______: Solo quiero mantenerme ocupada... es decir activa ¿Qué tiene eso de malo?

Maiko: Explotarse de trabajo tiene M U C H O de malo, solo vas a terminar sintiéndote mal, además es peligroso que andes por ahí sola.

______: Ya le pedí a Bokuto que me acompañe a entrenar correr en las mañanas y puedo ir con Kanoka en las noches estaré bien enserio no se preocupen –Comenzó a estirarse-

Maiko: ¿Tu madre está apunto de regresar a Japón cierto? Me gustaría conocerla Bokuto habla maravillas de sus pasteles.

______: Que interesada –Se burló- Pero claro se las presentaré pronto, quiere abrir una cafetería antes de que empiece el verano, ya tienen un lugar para abrir el nuevo negocio, iré a ayudar a acomodar las cosas y trabajaré en el verano.

Kanoka: ¿Atsumu sabe que trabajaras ahí? Casi no tendrás tiempo para verlo.

______: Preferiría no hablar de Atsumu –Volteo la mirada-

Kanoka: Ya han pasado días que no dices nada de él ¿no vas a contarnos? Es extraño que no digas nada sobre tu novio Hori.

______: Sera otro día ¿Está bien? Por lo pronto me enfocaré en el trabajo.

Maiko: Dile que si necesita una mesera puede contar conmigo, los pasteles serían una gran paga para mí. –La castaña le agradeció que cambiara el tema y el ambiente y le sonrió por el gesto-

______: Si te los comes todos no habría ganancia Maiko.

Maiko: ¡Oh vamos! No le cuesta nada darme un par de rebanadas de chocolate, es el salario mínimo –Hizo ojos de cachorrito-

______: Hablare con mi mamá seguro te dan el trabajo, sería divertido verte por ahí en verano.

Kanoka: Prometo visitarlas seguido entonces, iré a probar todos los pastelillos de tu madre.

Al final Kanoka y Maiko comprendieron que no estaba lista para hablar sobre el tema, así que para no abrir viejas heridas decidieron no insistir más hasta que _____ estuviera lista para sacarlo todo por sí mismo.

Eran las 5 de la mañana del otro día y como acordaron Bokuto la estaba esperando sentado en una banca del parque, tenía el cabello revuelto y los ojos cerrados, el pobre chico estaba más dormido que despierto.

_______: Lamento llegar tarde ayer me quedé mucho tiempo practicando y no dormí demasiado –Bostezó- Después de esto vayamos a desayunar algo yo te invito, disculpa por arrastrarte a venir a esta hora.

Bokuto: No seas tonta, sino me gustaras tanto no habría venido ni loco –Imito su bostezo y le sonrió- No me arrastraste a ningún lugar estoy feliz de estar contigo.

_____: Bien –Se sonrojo y rápidamente buscó pensar en otra cosa que no fueran las confesiones tan naturales de Bokuto- las clases son hasta las 8, podríamos correr hasta las 6:10 y después ir a desayunar.

Bokuto: Correr más de una hora, es demasiado para alguien que no ha dormido ni comido absolutamente nada ¿Cuántos días llevas así?

_____: No desayuno en la mañana para estar más ligera al correr, y solo llevo un par de días, no me pasará nada tranquilo ¡Estoy bien! –Comenzó a correr y poco tiempo después el platinado se le junto ninguno dijo ninguna palabra por unos minutos-

Pero Bokuto era un chico bastante alegre así que ese silencio tampoco duro bastante tiempo, siempre había algo de que platicar, y la hacía sonreír de vez en cuando.

Estuvieron corriendo por alrededor de 40 minutos hasta que ____ sintió el pecho bastante pesado, sentía un dolor, pero mejor quiso ignorarlo, después empezó a preocuparse ya que su respiración se hacía cada vez más entre cortada, asustándola lo suficiente para frenar por completo.

Bokuto: Hori ¿estás bien? Paremos ya es suficiente vayamos por algo de desayunar.

______: No te preocupes estoy bien no es nada, solo necesito descansar un momento –Coloco sus manos en sus rodillas como apoyo, no quería decir nada, pero estaba empezando a marearse-

Bokuto: No me gusta nada como te ves ¡Estas pálida! –Tomo su frente y sentía que estaba hirviendo- Y apuesto a que tienes temperatura ¿Cómo pudiste salir así de casa?

Bokuto seguía hablándole un par de cosas, pero _____ se sentía tan mal que no comprendía muchas palabras que salían de su boca, no paso mucho tiempo hasta que sintiera como su cuerpo se desconectara y todo se volviera obscuro.

Se había desmayado, Bokuto entro en pánico, así que como pudo la tomo en brazos y corrió al hospital más cercano, acercaron una camilla para la castaña que rápido entro a revisión, Bokuto estaba bastante preocupado por ella, movía sus manos y sus pies sin parar, esperando noticias.

Los minutos le parecieron horas, nadie le decía nada, estando solo en esa sala de espera solo rogo por su bienestar, porque la ayudarán y porque no pasará nada grave.

Doctor: Tiene bajas las defensas, pero con una buena alimentación, descanso y unas cuantas vitaminas se encontrará bien –Le anuncio tranquilizándolo un poco-

Bokuto: Gracias por salvarla, se lo agradezco mucho –Hizo una reverencia y sintió un poco los ojos humedecer, su amiga se encontraba bien, él la había puesto a salvo- 

El chico sintio en el bolsillo del pantalón como sonaba  varias veces su celular, atendio al contacto ''mamá de Hori'' le comentó lo que había sucedido ya que asustado llamo a varias personas en busqueda de que hacer, la señora agradecio que la mantuviera informada, le pidio que cuidará de su hija y le agradecio estar ahí para ella en ese momento.

Mamá: Espero poder verte pronto, dile a Hori que me marque cuando se sienta un poco mejor.

Bokuto: Eso haré señora lamento preocuparla, nos vemos -Colgo la llamada-

---------------------------------------------------

Espero tengan linda noche:3 

Intermedio (Atsumu Miya y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora