Intermedio (Atsumu Miya y tú)

Epilogo 2: Camino a la montaña.

_______: Mi abuela llegaría más rápido que tú y eso que ella está en silla de ruedas.

Atsumu: ¡No te burles! No soy un montañista entiéndeme. –Sus manos estaban recargadas en sus rodillas en busca de un apoyo-

_______: Pero fue tu idea venir aquí y aun no estamos ni en la mitad del camino. –Seguía riéndose tanto que hasta el estómago le dolía-

Atsumu: ¡Hey! la Montaña es un lugar mágico para pasar un aniversario.

_______: Lo es, además también demuestra que tengo más rendimiento que tú ¡Vaya deportista profesional que eres!

Atsumu: Puedes tener todo el rendimiento que quieras cariño, más en la cama lo vas a necesitar –Le dio una nalgada y la chica se sonrojo completamente-

_______: ¡Atsumu! Hay niños que vienen con sus padres a subir la montaña.

Atsumu: Nadie escucho eso cariño no seas exagerada.

Niño: ¡Mamá! ¿Qué significa tener rendimiento?

El alma de la castaña y el rubio abandonó sus cuerpos cuando escucharon aquella voz de un niño con su madre a lo lejos.

Mamá del niño: Cuando puedes pasar mucho tiempo haciendo algo cariño. –Acaricio su cabello-

Niño: ¿Necesitas rendimiento cuando vas a la cama con alguien mamá?

La madre perdió todo color que su cara podía tener, la castaña no dudo de tomarlo de la mano y casi lo arrastro por toda la montaña mientras Atsumu no dejaba de reírse de la situación.

Atsumu: Bueno no era así como imaginaba nuestra cita de aniversario –Seguía sin poder parar de reír-

______: No te dejaré solo con Kenta nunca más ¡Ya me imagino las cosas que le dirás!

Atsumu: Que bueno que se quedó con mi madre, así podremos poner en practica todo tu rendimiento mi amor.

______: ¡Juro que si dices rendimiento de nuevo te tirare por la montaña! –Su cara era completamente roja lo cual le divirtió aún más a Atsumu-

Atsumu: Me gusta que reacciones así, me gusta que a pesar de los años sigues sonrojándote por mí. –Acaricio sus mejillas- Ya casi llegamos al lugar al que quería traerte.

______: ¿Ya habías planeado traerme aquí? –Le miro con curiosidad-

Atsumu: Así es, lo supe cuando vine con Suki.

______: Espera un momento –Sus ojos estaban bien abiertos por la sorpresa- ¡Me estás diciendo que me trajiste al mismo lugar de tu ex novia loca!

Atsumu: No exactamente –Señalo el fin del camino-

La montaña estaba llena de flores que la castaña jamás había visto en su vida, era de todo tipo de colores, jamás había visto un paisaje tan colorido, las luces de la ciudad se hacían notar a lo lejos empezaron a subir cuando era tarde, pero por el tiempo que tardaron el atardecer se hacía presente.

El cielo tenía un color naranja hermoso que combinaba perfecto con todo el lugar, la chica simplemente se quedó sin habla.

Atsumu: Solo llegamos a la mitad de la montaña, a ella jamás la traje aquí, eso me hizo darme cuenta cuantas ganas tenia de que fueras tú la que viera este lugar.

______: ¿Cómo lo descubriste?

Atsumu: Mi padre, Osamu y yo subíamos esta montaña todo el tiempo, un día peleábamos por quien llegaba más lejos y accidentalmente nos encontramos con esto.

______: Es hermoso... No puedo creer que existan lugares como este.

Atsumu: No se compara con la belleza de mi esposa –Comenzó a desempacar todo lo que traía en su mochila- ¿Cenamos?

______: Claro, te ayudaré.

Decidieron acampar en ese lugar, así que cuando terminaron de acomodar todo se sentaron juntos a ver las luces de la ciudad.

Atsumu: Feliz aniversario cariño ¿Te gusto mi sorpresa?

______: Fue increíble, no puedo creer que tengamos 5 años casados, siento como si todo hubiera sido ayer.

Atsumu: Creo que después de tantos años es hora de que Kenta tenga un hermano, el voleibol no se puede jugar solo...

______: Puede que te dé una sorpresa un día de estos –Le sonrió-

Atsumu: Adoro las sorpresas, pero... hay algo que incluso adoro más que nada en el mundo –La miró a los ojos-

______: ¿El voleibol?

Atsumu: Tú eres lo que más adoro –Saco una pequeña cajita de su bolsillo lo cual le sorprendió a la castaña- Amo el voleibol, pero incluso lo dejaría por ti sin dudarlo.

______: Tsumu ya estamos casados, no puedes volver a pedírmelo otra vez. –La castaña lo veía con atención-

Atsumu: Me encanta que seas mi esposa, me casaría muchas veces contigo si pudiera hacerlo –Abrió la caja y vio un collar con una piedra delicada- Quiero que siga pasando el tiempo y seas siempre mía.

______: Este día fue mágico enserio gracias –Le sonrió mientras que el rubio le colocaba el collar-

Atsumu: Se te ve muy bien, tu esposo tiene un gran gusto.

______: Tienes razón y aparte hace todo tipo de locuras, como el día en que casi te mata una jirafa en el zoológico. –Se burló-

Atsumu: ¡De todos los momentos que tenemos juntos tenías que escoger ese! Recuerdo tener saliva de jirafa hasta en las orejas.

______: Aún conservo esa fotografía, Osamu me pago un alto precio por eso...

Atsumu: ¡Le diste esa foto! Con razón mis compañeros me decían jirafa y se burlaban todo el día –Se cruzó de brazos-

______: Pero ahora cuida a su sobrino, cada vez que se lo pedimos, cuando se lo pedimos y es genial.

Atsumu:  ¡Es su tío! ¿Eso es lo que hacen los tíos no?

______: Pero hace un buen trabajo, dale crédito -Sonrió-

Atsumu: Voy a vengarme señorita Miya.

______: ¿Qué vas a hacer al respecto?

Atsumu: Ya lo descubrirás –Empezó a besar su cuello y a bajar un poco la manga de su camisa-

______: ¡No piensas hacer esas cosas aquí! –Quiso alejarlo un poco, pero él seguía repartiéndole besos-

Atsumu: Nadie va a saberlo...

______: ¿Cómo el niño de hace un rato?

Atsumu: Un trauma más, un trauma menos...

_______: Que tonto eres –Le dio un pequeño golpe en el pecho- Aun así, estoy muy enamorada de ti.

Atsumu: Y yo de ti, no tienes una idea-Él la acostó en el césped- Sigamos celebrando aniversarios así, por el resto de nuestras vidas...