Capítulo 《22》

196 21 9
                                    

Prem POV

Un mes. Un maldito ms buscando a mi compañero en este bello lugar que me parece tan desolado sin su presencia. Por alguna razón Boun decidió dejarme tras la muerte de Dour, miles, millones de ideas chocan contra mis neuronas buscando una respuesta certera, pero parece que ninguna quiere convencerme. Es como si estuviese esperando a que la excusa salga de su propia boca.

Hace medio mes decidí venir a su tierra natal, Islandia. solo había leído de este lugar en folletos de turismo e internet cuando me dijeron dónde estaba su antigua manada. Antes de eso, ni siquiera sabía que este lugar era real, siempre pensé que era cosa de cuentos de hadas o parques de diversiones. Es más que eso, este lugar es imponente en todo, más en el norte donde ahora cae la nieve sin parar, todo el lugar está cubierto con una gruesa capa de blanco que encandila por el beso del Sol o la luna.

Aun así ¿por qué sigo pensando que es solitario?

Lo bueno de todo es que al menos solo no estoy en realidad. Kayn, a quien conocí cuando apareció Devon a sacarnos de esa habitación, parece ser un cambiaformas zorro blanco también. Tiene un olor característico de la especie, aunque no me parece tan fresco y delicioso como el de mi compañero. El suyo es más húmedo, es pino y nieve en la mañana. Prefiero el de Boun.

Demonios. No lo encuentro por ningún lado. Kayn se ha pegado a mí como una nana aún antes de saber que estoy llevando a su supuesto sobrino. Me trata como si fuese la chica más delicada de la faz de la tierra, creo que siente miedo hasta cuando respiro. Mi apetito no aumentó, no tengo antojos ni nauseas. No me canso ni tengo cambios grandes de humor. solo estoy triste, añorando, esperando a que ese mal nacido vuelva a mí.

Cada día si falta vamos a buscar en los lugares que Kayn conoce, preguntamos a las personas, pero nada nos dice dónde está. Es agotador caminar con estas capas de ropa e incluso siento que pierdo las esperanzas. Está claro que él se está ocultando de mí. Pero ¿por qué?

Kayn me recuerda a él un poco. Inexpresivo, y terriblemente racional cuando me regaña. Este extraño chico que Devon aseguró es de confianza, aún me parece raro. Es como si hubiese vivido en esta casa porque sabe moverse por todos lados, sabe dónde está todo, pero el dormitorio principal no es suyo. Huele a vacío y a veces a Boun.

Desde que llegué siento que mi cerebro se está volviendo realmente loco. A veces siento el olor de Boun, pero miro alrededor y no está. Otras veces pienso que está cerca, pero ocurre lo mismo.

Íbamos entrando a la casa donde nos quedamos, la nieve acumulada en la entrada fue quitada por alguien, pero aún quedó resbaloso y casi caigo. Su olor pateó mi nariz y sus manos en mi brazo y cintura me sostuvieron fuerte. Lo miré, pensando que nuevamente mi mente me estaba engañando, pero no. Quedé atónito.

-¡¿No te dije que debías cuidarlo con tu vida?!- Regañó volteando a ver a Kayn detrás de mí. -Ve con Molwa, luego hablaremos.

Ordenó y Kayn hizo una reverencia antes de irse en silencio. Sí que es extraño este chico. A Veros le gustará tenerlo cuando regrese. Ellos hicieron una especie de clic mutuo cuando se vieron por primera vez, pero en eso pensaré luego. Ahora solo me concentro en este hombre que reaparece como si nada ocurriera.

Abrió la puerta con una llave. Pero Kayn no le dio la suya ¿de dónde...? Mis ojos sorprendidos me delataban. Todo el tiempo estuve mirándolo, viendo sus acciones sin decir una palabra.

Cerró la puerta luego de ayudarme a entrar. Sí, ayudarme. Como si fuese niño. Me quitó el abrigo externo y me sentó en el sofá. Buscó la manta gruesa que está en la habitación principal donde duermo y me envolvió en ella. Luego volvió de la cocina con el chocolate caliente justo como Kayn me lo prepara. Es como si siempre me hubiese estado vigilando de lejos... Pero antes de tomarlo en mi mano me levanté.

Posesión EternaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora