Capítulo 59

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-¿Qué quieres decir con que lo sientes?- le miro confundida

-Quiero decir que lo siento, por todo lo que he hecho, todo lo malo que has tenido que pasar por mi culpa, por lo que le he hecho a tu madre, pero principalmente a ti- baja la cabeza con tristeza

-Creo que es demasiado tarde para pedir disculpas, el daño ya está hecho y tuviste tiempo de arreglar las cosas conmigo, pero lo desaprovechaste y ahora no puedes hacer nada, ya he aprendido a seguir a delante con todo esto, sabiendo que ya no ibas a estar más en casa y que no ibas a estar más conmigo y estar con otras personas, a pesar del dolor he aprendido a seguir a delante, ¿que en un momento llegué a odiarte?, pues si te soy sincera, si, lo he llegado a sentir, pero después enfado, decepción, tristeza, hasta que me dio igual ya que tú estás viviendo tu vida y no debo entorpecer las cosas y ya me da igual, pero quiero que me dejes a mi y a mi madre que también nos dejes hacer nuestras vidas tranquilas, así que ahora te tengo como alguien que estuvo por varios años en mi vida, pero que por circunstancias de la vida se ha marchado y no le guardo ningún rencor, salvo cuando has hecho cosas que me han molestado, como por ejemplo la última vez que me pusiste la mano encima, por culpa de según tú, tu "mujer", por yo haber dicho lo que pensaba, pero ya me da igual, pero el daño ya está hecho- digo lo que siento y lo que sentía en otros momentos, al igual que le dejaba las cosas claras

-Soy consciente de lo que he hecho, y que he llegado tarde, pero me gustaría que al menos me escuches  después si quieres puedo desaparecer de tu vida, salvo para lo que necesites, tanto académico y demás, solo pido que me escuches- me ruega con la voz un poco apagada

-Está bien, te escucho-

-Vale, sé que te he hecho mucho daño desde que me fui de casa, estaba ciego por lo que supuestamente era amor por ella, le digo así por que seguro que no quieres que le nombre, yo supuestamente era feliz y estaba enamorado de ella, compartíamos todo, cuentas, casa, contactos y demás, yo le hacía caso y hacía lo que decía por que pensé que eso le hacía feliz, pero no era consciente de lo que me rodeaba, si, mi carácter cambió y mi forma de hablar y actuar, era más agresivo y fuiste testigo de ello y tuviste marcas por mi culpa, y así por todo este tiempo, hice mal al dejarte de lado y haberle hecho todo eso a tu madre, no me había dado cuenta de todo hasta que hace un tiempo estaba con ella y su familia y escuché cosas que no me gustaron, cosas sobre ti y sobre tu madre y dijeron que siguiese buscando problemas con tu madre para que siga pagando cosas de abogados y demás para que después no pueda pagar tus estudios y lo que necesiten las dos, sí, me he dado cuenta muy tarde, lo sé y no merezco perdón, cuando volvimos a la casa discutí con ella y me di cuenta de lo que había hecho y decidí irme de allí, es por eso que me vine aquí, quería ponerme en contacto contigo mediante tu madre pero ella me lo negó y fue pura casualidad el encontrarte aquí y no podía dejar pasar una oportunidad como esta, sé que debes de estar enfadada y demás y me hago responsable de ello, pero solo quiero que sepas que estoy arrepentido y que si pudiese volver atrás en el tiempo lo haría y cambiaría las cosas para que sufrieses como lo has hecho y te he perjudicado mucho en tus estudios, y aunque no quieras volver a verme, voy a tratar de compensar de cualquier forma todo lo que he hecho y a pagar cualquier cosa, y ya está, lo he dicho todo, así que puedo irme y dejarte tranquila, pero al menos sé que he podido hablar contigo- yo mientras hablaba él estaba callada y seria, pero por dentro estaba que no creía lo que mis oídos escuchan y puedo ver por su manera de expresarse y por su mirada que es verdad y está siendo sincero, se mueve en dirección a la habitación para irse, pero en un movimiento rápido le tomo la mano impidiendo que se mueva

-No te vayas, me alegro que por fin hayas abierto los ojos, algo tarde, pero lo has hecho, quiero que no te vayas, pero no te pienses que va a ser como antes, aún estoy dolida por todo, pero voy a darte una oportunidad, iremos poco a poco, has de ser muy paciente conmigo, y lo sabes perfectamente, te agradezco que te hayas disculpado,  va a costar perdonarte, pero todo puede cambiar según lo que hagas por que sabes que yo valoro los hechos, tienes que hablar con mi madre y explicarle las cosas, pero ten por seguro que con ella va a ser demasiado difícil arreglar las cosas, y ten por seguro que no vas a volver con ella, ella está bien como está y no quiero que vuelva a pasarlo mal, aprovecha esta oportunidad que tienes, es la única que vas a tener-le miro algo seria aún con los brazos cruzados

-Está bien, gracias por la oportunidad, te prometo que no voy a malgastarla, y daré lo mejor de mi para volver a estar bien contigo y por cierto- busca algo en sus bolsillos- sé que es algo tarde, pero cuando ayer me dijo tu profesora lo del acto aproveché para traerte una cosa, sé que es algo tarde, pero feliz cumpleaños pequeña- me da una pequeña caja azul 

-Gracias, no pensé que te ibas a acordar- tomo su obsequio y lo abro con cuidado, dentro me encuentro con un anillo de color negro con lo que parece un grabado de unas alas de ángel en color blanco- es hermoso, me encanta-le miro sorprendida

-Tiene otra cosa especial, prueba a ponértelo- lo señala con una sonrisa, yo lo hago y de repente el color del anillo cambia a blanco y las alas de ángel cambian a unas de un demonio- cuando lo vi pensé que era ideal para ti, ¿te gusta?-

-Gustarme es poco decir, me encanta, gracias de verdad- le miro con una sonrisa de oreja a oreja

-Me alegra saberlo, ya es muy tarde y seguro que debes estar cansada, así que mejor que me vaya, cuando quieras puedes hablar conmigo- vuelve a dirigirse hacia la puerta y yo esta vez le acompaño hasta la puerta de la habitación

-¿Vas a ir a verme pasado mañana ?-

-Por supuesto, no me lo perderé por nada del mundo-él abre la puerta y yo me quedo en el marco

-Espera, una cosa antes de irte-no dejo que hable ya que me acerco rápido y le abrazo, él me corresponde y siento que de cierta forma estoy completa, me hacía falta uno de sus abrazos, estamos unos pocos minutos abrazados y luego nos separamos-mucho mejor-

-Cuando quieras estoy para lo que sea, que descanses y nos vemos pasado mañana pequeña- me da un beso en la cabeza y se va

-Adiós- es lo último que le digo antes de perderle de vista y quedarme con una sonrisa en el rostro, poco rato después vuelvo al interior del cuarto y me encuentro con Vane sonriendo y sentada en la cama

-¿Y bien?, ¿cómo ha ido?- se hace a un lado para que yo me siente y apoye mi cabeza en su regazo

-Ha ido bastante bien, tengo el presentimiento de que con él las cosas van a cambiar para bien-

-Ya verás que si.....- 

Quiero que confíes en mi y me dejes conocerteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora