La escasa luz que regalaba el Sol a las cinco de la mañana apenas entraba por la ventana de aquel cuarto cuando YooNa abrió sus ojos y se sentó con rapidez en la cama, logrando despertar y asustar a JungKook.
-¡Es hoy!-exclamó la joven y comenzó a dar pequeños brinquitos que, una vez pasado el susto y aún con algo de sueño encima, hicieron reír al chico a su lado, quien se sentó a su par y la abrazó para mantenerla quieta.
-Calma, amor. Recuerda que no podemos agitar mucho a nuestro pequeño bichito-le sonrió de lado, acariciando su semiabultado vientre de apenas tres meses de gestación.
-Lo sé, niño bonito-rió-¡Pero es hoy!¡Finalmente volveremos a verlo hoy!
-¡Yo sé!-sonrió el chico con emoción-. Pero debes recordar que ahora tienes otro ser creciendo dentro tuyo, así que primero lo primero: desayunar y bañarnos para preparanos e irnos ¿Está bien?
-¡A la orden, mi general amorcito!
Pues sí, el tiempo había pasado y fue bien aprovechado.
Poco tiempo después de la ida de YoonGi, JungKook y YooNa comenzaron a ser acosados por los padres de su amigo en común y cuando los padres del aún pelinegro se enteraron de la relación de su hijo con "una plebeya", les hicieron la guerra, trayendo por consiguiente que ambos jóvenes siguieran los pasos de YoonGi y huyeran.
Se establecieron en Francia, donde lograron cumplir sus sueños, la una siendo una psicóloga profesional y el otro siendo un excelente productor musical. Sin embargo, no mucho antes de ello, habían conseguido trasladar al resto de los Kang hacia donde mismo estaban ellos, unificando de una vez toda la familia.
Con el paso de ocho años desde que iniciaron toda aquella aventura, JungKook y YooNa se comprometieron y compraron una casa justo al lado de donde vivían JiAh, GaeJun y los trillizos, quienes, con sus trece abriles seguían igual de revoltosos que siempre.
Aunque bueno...hasta hacía poco se habían enterado de la llegada de un nuevo miembro de la familia, así que eran tiempos felices.
Mas dichos tiempos se volvieron eufóricos cuando, a través de la dirección se correo de NamJoon (con quien siempre mantuvieron contacto), les llegó un e-mail cuyas palabras textuales fueron: "Día 9 de Julio a las 8:15 de la mañana en el aeropuerto de su ciudad. Espero que vayan, par de bobos, que prometí regresar y espero un recibimiento decente".
Obviamente aquel mensaje pertenecía al mismísimo Min YoonGi y cual de todos en la casa de los Kang o los futuros Jeon estaban más emocionados.
Literalmente no habían sabido nada del muchacho en todos aquellos años, por lo quela euforia era aún más grande.
Gracias a dicha adrenalina, JungKook y YooNa llegaron casi media hora antes de lo acordado al aeropuerto y estaban comiéndose con muchas ansias un paquetes de papitas que se le habían antojado a la embarazada.
Vigilaban los vuelos a cada rato, pero les resultaba inútil ya que no sabían de dónde venía YoonGi...aunque sospechaban que venía de España dado que había enviado un mensaje a través del correo de NamJoon y justamente él seguía viviendo allí.
Cuando los pies de la muchacha no pudieron aguantar más tiempo con el peso de todo su cuerpo, tanto ella como su prometido tomaron asiento.
Allí estuvieron durante un rato más hasta que YooNa, a lo lejos, divisó una cabellera castaña oscura y una sonrisa que conocía a la perfección.
Ni siquiera los gritos de JungKook o su embarazo pudieron evitar que se mandara a correr hacia aquel muchacho que, una vez la vio ir hacia él, sonrió aún más ampliamente.
-¡Min YoonGiiiiiiii!-y como si fuera una koala, se trepó sobre su amigo y lo abrazó con tanta fuerza que él creía que lo ahogaría, mas aún así le correspondió el abrazo.
-¡Kang YooNa!¡Te he extrañado un montón, mocosa!
Bajándose de su encima, la joven se colocó de puntitas y, tomando el rostro de YoonGi entre sus manos, depositó muchos besos sobre su frente, nariz y mejillas.
-¡Aún no me creo que al fin estés aquí!-chilló y le sacó unas risillas, tanto a YoonGi como sus acompañantes, a quienes recién notaba.
-¡Jeon YooNa!¡Por amor a esa criatura que llevas en el vientre, deja de correr así!-exclamaba un agitado JungKook, mas, cuando se percató de quién tenía frente a frente, chilló tanto o más que su novia-¡YoonGi hyung!
Al apartarla de su amigo para abrazarlo él, YooNa se percató de la chica que todo el tiempo se había mantenido cerca de YoonGi y recién le sonreía.
Los ojos de la embarazada se abrieron con amplitud y brillaron tal cual par de luceros.
-¡Tú eres HyeSun!-la otra muchacha no hizo más que asentir y luego reír cuando su contraria la abrazó, gesto el cual correspondió, claro está-¡Por todos los cielos!¡Eres muchísimo más hermosa de lo que esperaba!
Sin embargo, YooNa quedó encantada cuando HyeSun mostró una actitud igual a la suya.
-¡Y tú también!¡No sabes cuán agradecida estoy contigo!¡Definitivamente tú y yo tenemos que ser amigas!
-¡Por supuesto!
Para cuando ambas mujeres se alejaron, se encontraron con JungKook y YoonGi viéndolas con una enorme sonrisa.
Fue este último quien tomó la palabra.
-Jungkookie, YooYoo, quiero presentarles a MiAh-extendió su mano derecha y una niña de oscuros cabellos y gatunos ojos salió de tras HyeSun y corrió a darle la mano al mayor-, y a JoonHee-ahora la acción se repetía con su mano izquierda y un niño de también oscuros cabellos y sus ojos, aunque eran rasgados, se notaban grandes-. Ambos tienen cinco años y son mis tesoros.
Los ojos de la pareja contraria se abrieron con amplitud y, emocionada a niveles máximos, YooNa se arrodilló ante los dos niños y apretó los cachetes de cada uno con una mano, ocasionando sus risas.
-¡Lindos!¡Pero qué sobrinos más hermosos, por todos los cielos!¿Saben quién soy?-los infantes negaron con la cabeza-. Soy su tía YooNa, la más loca que podrán tener nunca ¿Les gusta hacer travesuras?-los menores asintieron con frenesí y la chica se acercó a ellos para "susurrar"-. Entonces tenemos que montar alguna travesura juntos. No se preocupen por sus padres, que la tía YooNa los ayuda con eso.
-¡Yah, mocosa!¡No malcríes a mis niños!-exigió YoonGi, pero sólo obtuvo una mueca por parte de su amiga.
•°¯'•• - ••´¯°•
En la noche, luego de un recibimiento por todo lo alto con una gran cena, mientras los señores Kang y HyeSun fregaban y recogían la mesa y JungKook cuidaba de los trillizos y los mellizos, YooNa y YoonGi se encontraban en la terraza, viendo la Luna cuarto menguante rodeada de varias estrellas.
Habían estado hablando muchísimo y se habían quedando disfrutando de su mutua compañía.
Fue entonces cuando YooNa le habló a YoonGi, logrando llamar su atención.
-Entonces, Min YoonGi. Después de todo ¿Puedes sonreír?
Y como respuesta, obtuvo una amplia sonrisa de pequeños y rectos dientes.
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《Cᴀɴ Yᴏᴜ Sᴍɪʟᴇ?》᯾ Mɪɴ Yᴏᴏɴ Gɪ ᯾✓
Fanfiction-¡Yah! ¡No seas grosero! Al menos, regálame una sonrisa. -No quiero. -¡Ugh! A tí lo de ser hijo del presidente se te ha subido a la cabeza. -Ajá. Como quieras. -¡Yah!¡Deja de ser tan insípido, Min YoonGi! ●Historia dedicada a mi hermosísima MinMin @...