𝙽𝚘 𝚚𝚞𝚒𝚎𝚛𝚘 𝚜𝚎𝚛 𝚘𝚖𝚎𝚐𝚊

epílogo.

—Minie, quédate quieto

Asiento lentamente mientras Jin se encarga de organizar mi cabello, miro mi reflejo en el gran espejo y acomodo el traje a colores blancos que adorna mi cuerpo.

—Te ves hermoso  — giro mi rostro para ver a Hoseok entrar en la habitación

—Gracias Hobi

—no puedo creer que ya no serás más mis esposo — pucherea — pero estoy seguro de que tu alfa te cuidará mucho mejor.

—siempre seré tu esposo Hobi — sonrió haciendo que el repita mi gesto y con cuidado me extiende el pequeño ramo de rosas.

—el momento ha llegado Minnie.

Asiento sintiendo los nervios de Yoongi y los propios a flor de piel, tomo la mano de kook esperando que la melodía del piano comience a sonar, mi corazón late con fuerza cuando la escucho, a pasos lentos salgo de la habitación siendo guiado por mí hermano.

—tranquilizate, este es tu día.

Un camino de velo blanco me recibe, mis amigos y compañeros de trabajo están ahí presentes, al otro lado los amigos y parientes de Yoongi, mi vista se fija en el quién me mira con ese brillo en sus ojos y aquella sonrisa que da vida a mí corazón, llegamos hasta el y Jungkook le susurra algunas palabras que no logro oír, posteriormente deposita en beso en mi frente y se aleja.

—eres el novio más hermoso del mundo — alaga Yoongi sujetandome ambas manos.

—y tú el Futuro esposo más genial del planeta.

Ambos reímos bajo y centramos nuestra atención al cura quién comienza a dar algunas palabras, la mano de Yoongi sujeta la mía y me lanza discretas miradas largas haciendo que un tenue rubor tiña mis mejillas.

—puede dar sus votos nupciales.

Yoongi se gira hacia mí y comienza a hablar.

—Yo Min Yoongi te quiero a tí Park Jimin  como esposo y me entrego a ti, y prometo serte fiel en las alegrías y en las penas, en la salud y la enfermedad, todos los días de mi vida.

Sonrió y repito las mismas palabras al mayor, haciendo que el sonrisa de vuelta cuanto termino.

Un chica de cabello largo entra a sala y comienza a cantar con su melodiosa voz una hermosa canción para nosotros. La letra de la misma me hace darme cuenta de lo afortunado que soy por tener a Yoongi a mí lado, mejor dicho, por haber conocido a esa persona tan maravillosa.

Una vez terminado la canción el sacerdote nos brinda su bendición y otro par de palabras.

—por el poder que me da la iglesia, Min Yoongi, park Jimin los declaró esposos a partir de este momento, para que se cuiden y respeten mutuamente por el resto de sus vidas— sonríe — Min puedes  besar al novio.

El asiente y con una de sus manos toma la mía y la otra la lleva a mi rostro acariciando suavemente, sus labios se posan sobre los míos con total delicadeza mando un cosquilleo por toda la zona, le sigo el ritmo permitiéndome saborear el dulce néctar de sus labios y escuchar su agitado corazón.

—te amo Yoongi.

—yo te amo aún más Park.

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Luego de que la ceremonia terminará la fiesta comenzó, nuestros amigos bebieron sin control y termine lidiando con un muy borracho y emocional Hoseok a quien tuve que acostar en una de las habitaciones del lugar.

—que haces, para— susurro.

— quiero mi noche de bodas

—aún no partiremos al viaje — reprochó pero las manos del mayor pareciesen no querer quedarse quietas — min...

Sus labios paseándose por todo mi cuello y pecho acompañado del toque de sus dedos hacen que involuntarios jadeos salgan de mi y que la creciente erección comience a doler.

—si es lo que quieres, está bien — se aleja de mi mirando con diversión mi aspecto — dulces sueños querido.

—¡Hey! ¿Como puedes hacerme esto?

—yo solo sigo tus órdenes — sonríe de lado.

—solo callate y ven acá.

—esa boca— ríe y rápidamente se acerca hasta mi — debería castigarte.

—hm, entonces hazlo.

¿Quién podría recistirse a los encantos de este hombre? Mi hombre.