𝙽𝚘 𝚚𝚞𝚒𝚎𝚛𝚘 𝚜𝚎𝚛 𝚘𝚖𝚎𝚐𝚊

capitulo 11

Han pasado algunos días desde que salí con Yoongi, jungkook hizo un montón de preguntas al respecto las cuales ignore.

estoy devuelta en la universidad y como siempre mi amigo hoseok no me dejara en paz hasta saber todos los detalles, por lo que no me queda otra opción.

—fue una experiencia maravillosa hobi, nunca pensé que hacer algo así sería tan irreal.

— estoy tan celoso de que el doctor conozca a tu omega y yo no — reprocha.

—algún día lo harás, lo prometo.

—yupiii — celebra — por cierto, mi primo taehyung esta de vuelta y me ha dicho que quiere verte.

¿Ese alfa quiere verme?

—sabes que tu primó me parece un poco extraño.

—podemos salir todos e invitar a jungkook — insiste.

—que molesto eres — ruedo los ojos.

—ay vamos jimin-ah tú nunca me dedicas tiempo — se queja.

—ya, esta bien, ahora cierra la boca.

— ¡Otra cita con Mimi! — comienza a hacer un exagerado bailé y me es imposible no reír.

—no es una cita si somos cuatro.

—cita doble — levanta los hombros.

—¿y cuando deseas salir?.

—justo ahora, taehyung nos está esperando.

—¿disculpa?.

Mi amigo sale corriendo en dirección a su primo que está recostado sobre la puerta de un coche a color negro, camino hasta ellos y el fuerte olor a chocolate amargo que desprende el alfa me aturde.

—hola jimin, tiempo sin verte — saluda

—hola taehyung.

El peli-azul me mira de una manera que no logro descifrar.

—¿pasamos por Jungkook? — pregunta mi mejor amigo haciendo que el alfa y yo rompamos contacto visual.

— El no sabe nada aún —recalco lo obvio.

—bueno pues ya se va a enterar — taehyung abre la puerta del coche para que entremos.

Sin poder oponerme más ingreso al auto y en el largo trayecto hasta el colegio de mi hermano no me queda más que escuchar a Hoseok y Taehyung hacer todo tipo de bromas. Al quedar frente la escuela me bajo del auto y camino hasta la entrada, buscando rastro del menor.

—Jimini ¿que haces aquí? — su repentina aparición hace que espante y lance un golpe en su dirección — hey, calmado.

—lo siento — sobo su hombro recién golpeado —  es que taehyung a vuelto y quiere salir con nosotros.

—-¿Taehyung? — pregunta de manera muy nerviosa y juraría que algo Emocionado.

—si — respondo ignorando su impresión  — ¿Quieres venir?

—esta bien, no tengo nada más por hacer.

Río internamente ante su fingido desinterés —entonces vamos.

Ambos caminos nuevamente hasta el coche donde Jung y Kim lo reciben emocionados,uno más que otro. Taehyung conduce hasta un centro comercial Mientras conversa animadamente con mi hermano, al llegar subimos a la zona se comida y pedimos algo para los cuatro.

—¿Cuando volviste Hyung? — pregunta kook.

—hace una semana.

—¿Y recién te dignas a decir? —jadea.

—lo siento estuve algo ocupado.

Taehyung al igual que Hoseok es una persona a la que conozco desde hace mucho tiempo, siempre solía ir a casa y comer de las galletas que mi madre hacia, luego de estar satisfecho corría a la habitación de mi hermano para jugar con el, por lo que no me sorprende que sean tan unidos sin embargo hay algo raro, Jungkook no es una persona que suela estar nerviosa ¿pero la presencia de su amigo logra intimidarlo?.

—Jimin, deja de acosarlos — susurra hobi a mi lado.

—no los acoso — giro mi cabeza a él.

—¿acaso quieres un trío con dos alfas?.

—¿que dices hoseok? Uno de ellos es Mi hermano — hago una exagerada mueca.

—entre gustos no hay disgustos — levanta los hombros.

—Dios, estas completamente loco — ruedo los ojos.

—yahh no te enojes mochi, de todas maneras no le entregaré mi esposo a cualquier alfa — me abraza.

—el que necesita un alfa urgente eres tú — trato de zafarme de su agarre pero no me lo permite.

—Yo también te amo.

—¡hey! Hoseok deja a mi hermano — habla Jungkook con diversión

— no seas envidioso — le saca la lengua.

—tu, omega irrespetuoso — señala con fingido enojo haciéndonos reír a todos.

Aquello hace que me de cuenta lo mucho que me he alejado de mis seres queridos, han pasado varios años desde la última vez que viví algo así y sin saberlo lo he extrañado tanto.

—!Hoseok no te robes mis papas!.

—mi madre dice que el que guarda comida guarda pesar.

— ¡para!, ¡para! ¡es mi comida!.

Realmente espero que la situación continúe mejorando y tener encuentros más seguidos Al lado de las personas a las que amo.