𝙽𝚘 𝚚𝚞𝚒𝚎𝚛𝚘 𝚜𝚎𝚛 𝚘𝚖𝚎𝚐𝚊

capitulo 38

El caso del señor park se hizo público en las noticias, los médicos y policías que aceptaron el soborno tuvieron que atenerse a cargos penales.

Podría estar completamente feliz, pero no es así.

Jimin sigue acostado sobre esa cama sin abrir sus hermosos ojitos y sin poder escuchar su melodiosa voz.

—cachorro, te extraño demasiado — tomo su mano y la junto con la mía —por favor despierta.

—Yoongi, deberías volver a casa — dice jungkook— no haz dormido ni comido nada por estar aquí.

—estare a su lado hasta que despierte — lo miró.

—puedo estar aquí— niego con la cabeza.

—dejame jungkook.

—ire a traerte algo de comer entonces — se levanta del asiento y sale de la habitación.

vuelvo mi vista a Jimin observando sus rasgos faciales, un suave apretón en mi mano me hizo mirarla, eran los deditos de Jimin, volví a mirarle y Sus ojos comenzaron a abrirse lentamente

Mi corazón comienza a latir con fuerza, su mirada se encuentra con la mía.

—¿Donde...estoy?— susurra débilmente.

—estas a salvó pequeño — sonrió con los ojos ya cristalizados y me paro rápidamente para llamar a un doctor.

—mira la luz, así perfecto, ahora aquí — el doctor examina el estado de Jimin mientras jungkook y yo observamos desde una esquina. — te duele aquí?

—si, un poco — responde con la voz rota por estar tanto tiempo sin usarla —¿Cuanto tiempo estuve inconsciente?

—tres semanas — responde el doctor y su rostro muestra sorpresa —bueno Jimin estás tiendo una recuperación normal, si no muestras problemas podrías volver a casa Pronto.

Sonrió ante las palabras del doctor.

—gracias doctor — agradezco y el Alfa se marcha dejándome solo con Jimin.

—¿Que sucedió con papá?— pregunta.

—ese asunto ya lo resolvimos, luego te contamos, por ahora debes descansar — responde kook.

—¿Cómo te sientes? —pregunto.

—como si un elefante hubiese pasado por encima de mí— trata de reír pero se ve que le duele.

—no te esfuerces demasiado.

—tengo sed...— asiento y camino hasta la mesita donde hay una botella de agua, la abro y se lo pongo en los labios.

—bebe despacio — ayudó a moviendo un poco la botella para que el beba.

—yoongi...

—¿Si?

—te ves horrible— sonríe con dificultad

—Y tú hermoso.

—No es verdad

Claro que si — Sonrió y con cuidado me acerco para besar su frente.

Me dan diabetes— Jungkook hace una expresión de asco y ruedo los ojos. —¿Cómo estas hermano?

—supongo que peor que Yoongi — Dice y levantó una ceja.

Extrañaba tanto escuchar su voz.

—la verdad si, ahora soy el más guapo — sonríe jungkook con orgullo.

—siempre lo fuiste kookie, ven dame un abrazo — kook se acerca  Y lo abraza con cuidado.

—tenia tanto miedo de perderte — confiesa en sus brazos.

—dicen que la mala hierba nunca muere

—tu no eres malo, quizás la estatura te ayudo a ser fuerte

—kookie~

—¡Jimin! — giro mi rostro y veo al alegré Hoseok correr hacia jimin — te extrañe mocoso.

—tambien yo — sonríe haciendo desaparecer sus ojos.

Amo tanto que haga eso.

Seguido de Hoseok, entra namjoon y el Omega de hombros anchos con un ramo de flores, al parecer es el jefe de Jimin.

El día transcurre con total normalidad y yo paso la noche cuidando de Jimin

—duerme bien pequeño— lo abrigo bien con la sábana y dejó un corto beso en su frente.

Me siento en la silla y observo su rostro dormido.

—no permitiré que te dañen de nuevo — susurro.

Dos días después.

El doctor me dio la buena noticia de llevar a jimin a casa y justo ahora estoy diligenciado los papeles de salida.

—es recomdable que guarde reposo absoluto por los siguiente días — habla el doctor y asiento —su costilla rota aún causará molestias así que le recetare algunos medicamentos.

—de acuerdo, muchas gracias

—su Omega es muy fuerte, los colmillos del lobo que lo atacó estuvieron a centímetros de perforar su pulmon derecho.

—su madre lo cuida desde el cielo — sonrió y el doctor repite mi acción.

Camino hasta la habitación donde la enfermera lo ayuda a sentar en la silla de ruedas.

—¿Listo para ir a casa?— sonrió.

—naci listo — sonríe de vuelta.