Inmortalidad

Capítulo 21: Reencuentro

 "Su discípulo no filial Wu Xi, presenta sus saludos al ilustre ex gobernante de Nanjiang"

"Ohh me honra el gran chamán. ¿Por qué me pediste regresar de mi viaje? Sabes que ya estoy retirado"

"Maestro, vengo a suplicarle que me ayude a gobernar nuestro pueblo por un periodo de tiempo".

Y como hace años atrás el ex gobernante puso su pipa en los labios y la arrastró en silencio y dándole una mirada profunda le preguntó "quiero escuchar tu razonamiento"

"Maestro nuestro pueblo vive años de paz gracias a nuestros tratados con los demás reinos; pero no siempre será así, debemos conocer mejor a nuestros enemigos. Quiero fundar una secta en Jianghu que nos permita tener alianzas con las sectas principales y conocer las acciones de los reinos. Además Lu Ta necesita aprender sobre el mundo y no crecer solo en nuestro pueblo, él es un niño inteligente y ya tiene una edad suficiente para aprender artes marciales, pienso pedirle al inmortal Ye que sea su maestro. Sabe que por fin logramos vencer al clan de los hechiceros negros, pero el costo fue muy alto más de la mitad de los miembros de la secta de la Luna fueron asesinados y su líder desea viajar a las llanuras Centrales, usted sabe que mi obligación es protegerla. Por favor, maestro ayúdenos".

El ex gobernante lo evaluó por un minuto y luego sonrió "Bien, con el pasar del tiempo te vuelves más sabio. Llama al príncipe Qi y Yang Zi". Al escuchar que su maestro aceptó su solicitud Inmediatamente Wu Xi los mandó llamar.

"Presentamos nuestros respectos al ilustre gobernante" Saludaron el príncipe Qi y Yang Zi".

"Yang Zi siempre sé orgullosa de tu origen. Sabes tu abuelo y yo fuimos amigos. Y sabíamos que ibas a partir de nuestras tierras, por eso te enseñamos todo lo que pudimos. Ahora es tiempo que sigas tu destino".

"Maestro gracias por tus palabras".

"Beiyuan, te seguiré encargando a mi tonto discípulo, sigue enseñándole, que no sea terco. Y cuida de Lu Ta".

"Maestro gracias por sus enseñanzas"

"Este viejo hará todo lo posible por cuidar a nuestro pueblo. Alístense para su viaje". Después de ello, todos iniciaron los preparativos para la vuelta a las Llanuras Centrales.

Lu Ta estaba emocionado con el viaje, nunca había salido fuera de los límite de Nanjiang "¿Shifu, iremos a las Llanuras Centrales?"

"Sí, alístate. Lleva todo lo que necesites. Partiremos en tres días". Después mandó un mensaje a Ping An para que tenga lista la nueva mansión.

Los días siguientes fueron muy difíciles para todos, ya que un viaje de ese tipo debió planificarse con anticipación. Sin embargo, todos estaban muy ansiosos por el nuevo cambio en sus vidas.

El Mayor Ye era el más emocionado de todos, porque los dos días siguientes salía a pasear con Xie y compraba todo lo que deseaba su amado. Habían pasado tantos años que no sabía que se sentía tener una familia y ahora que tenía la oportunidad no escatimaba en detalles. El que estaba nervioso era Xie, no recordaba que se sentía tener una familia, sus padres fueron muy pobres y murieron cuando empezó la guerra, sentía miedo en no saber cómo criar a un niño. Pero en esos últimos días estuvo acompañado del Príncipe Qi quien desde los últimos incidentes se había hecho su amigo y lo aconsejaba en esta nueva etapa.

"Mi pequeño veneno ¿Aceptarás a Yang Zi? Ya vamos a partir y aún no conversas con ella".

"No sé si seré un buen maestro, sabes que es igual a ti, parece un anciano que sabe todo. No sé qué más podría enseñarle"

"Ella siempre te admiró, ahora tiene la oportunidad de aprender del mejor sanador... lo que sabe solo es el legado de su secta, quiere ser sanadora, dale esa oportunidad, puede ser cómo una hija más para nosotros. Además sabes que ella era la partera en su secta, nos será de mucha ayuda cuando tengamos nuestros propios hijos..."

Wu Xi, vio a su esposo sonrojarse con sus últimas palabras, sabía muy bien que él era bondadoso y le gustaban los niños, siempre intentó salvar a todos. Así que se acercó a él y le dio un abrazo en señal de asentimiento. Después invitó a todos al salón principal para reconocer a su nueva discípula.

Cuando todos estaban presentes Yang Zi se arrodilló en señal de respeto y exclamó "Yang Zi, desea tomar al gran chamán como su maestro y jura lealtad".

"Sabes que seré muy exigente contigo, no me contendré porque eres mujer".

"No espero menos, desde niña siempre lo admiré. Me esforzaré para no defraudarlo. Sé que el maestro es un hombre sabio que ha sabido gobernar y dar paz a nuestro reino". Y finalmente hizo tres reverencias.

Esa noche fue una celebración ya tenía una nueva discípula; pero Wu Xi no había olvidado sus primeras intenciones. Sabía que el reino estaría en manos de Lu Ta y este necesitaba entrenamiento. Entonces le hizo una señal a Lu Ta para que se arrodille frente al Mayor Ye. Este fue tomado de sorpresa, no había empezado hablar cuando fue interrumpido por el futuro chamán.

"Inmortal Ye, Lu Ta será el próximo shamamet, pero es inexperto. Le pido su guía y que me acepte como su humilde discípulo".

Este iba a rechazarlo, pero Xie tomó su mano y le hizo una señal para que acepte. No sabía qué hacer, muchas emociones vinieron a su mente; pero no podía dejar que el pasado siguiera en su vida. "Si no eres un buen aprendiz te romperé las piernas. No seré complaciente".

"Maestro acepte la reverencia de su discípulo Lu Ta. Trabajaré arduamente para estar a la altura y juro lealtad hacia usted y el maestro Xie".

Al escuchar que esa lealtad también sería para su amado todas las dudas que tenía desaparecieron y aceptó de buena gana. Porque para nadie era un secreto que si necesitaban pedir un favor al inmortal la única persona que podría conversarlo era su Xie.

Los 3 días pasaron rápidamente y todos partieron a las planicies centrales. Para todos miembros de la Secta fue su primer viaje fuera de Nanjiang. Tenían mucho recelo porque siempre se escucharon historias que veían de manera diferente. Después de 4 días de viaje por fin llegaron a la nueva mansión y fueron recibidos por A Qin Lai. Rápidamente Wu Xi organizó a todos los miembros y empezaron a desempacar todos sus objetos.

Al día siguiente Wu Xi, Lord Séptimo, el Mayor Ye y Xie se dirigieron al nuevo Pabellón LongYe que fue construido en las montañas que resguardaban la Mansión Siji. Chengling los estaba esperando para darles a bienvenida y dirigirlos a las habitaciones de Zhou Zishu quien estuvo viviendo en el pabellón durante todos los meses que duró su embarazo.

Cuando ingresaron a la habitación pudieron ver a un nervioso Wen KeXing que no sabía cómo ayudar a su esposo a sentarse. No podían creer que en pocos días iba a nacer el bebé. Después de unos cortos saludos; los seis se acomodaron y conversaron todas las novedades que ocurrieron esos meses.

Todos estaban muy atentos a los comentarios de Wen KeXing, quien en forma dramática contaba todas las aventuras que tuvo por los antojos de su esposo. Zhou Zishu ya había perdido la cara, porque su amado lo hizo ver como una mujer. Sin embargo, le pareció extraño que todos estén tan pendientes de su embarazo. Hasta que querían cambiar de tema preguntó "¿No pueden preguntar otra cosa? ¿Por qué tan interesados? Como si fueron a tener un hijo".

Los recién llegados quedaron en silencio; pero Wen KeXing se dio cuenta que las orejas del Mayor Ye estaban rojas queriendo molestarlo pregunto "Viejo monstruo no me digas que también tendrás un hijo. Si es así te esperan 9 meses sin dormir".

Zhou Zishu no aguantó más y le tiró el abanico para que se calle. Y le preguntó a Xie "¿También estás embarazado?". El nombrado movió su cabeza en señal afirmación.

"Me alegra no ser el único, ahora me siento más tranquilo que nuestros hijos podrán crecer juntos". Mencionó Zhou Zishu.

Después conversaron sobre la Secta de la Luna que estaría asentada en la nueva mansión. Además Wu Xi aprovechó para contarles sobre su nueva discípula y que ella podría ayudarles durante el parto.