Capítulo 29: Pelea de amor

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Llegó el momento de la presentación de Yang Zi como líder de la Secta de la Luna, quienes ahora se habían establecido en las llanuras centrales como una secta de sanadores. Se escucharon muchas voces, algunas desaprobatorias y otras que la miraban con codicia. Para nadie era un secreto que una secta de médicos era débil en artes marciales; pero un aliado importante, en especial porque en estos pocos meses las noticias de que una joven brillante y sus seguidores eran capaces de curar muchas enfermedades. Solo comparada con el misterioso Gran Chamán.

El monje shaolin intervino "se dice que la secta de la luna es una secta demoniaca. Dime pequeña cómo calificas esos comentarios"

"Somos una secta sagrada, que estamos cerca de los dioses. Que otras sectas no lograrán unirse y encontrar la esencia del universo, no es nuestro problema".

"Entonces no niegas que utilizas hechizos" gritó otra voz

"Nunca renegamos de nuestras raíces, la magia está en todos nosotros. Nuestro núcleo es uno con la naturaleza. Mis artes las utilizo para salvar vida". Y caminando cerca a los líderes ser acercó uno por uno, mientras que señalaba cada una de sus dolencias y cual sería la mejor medicina para recuperar su salud.

Todos quedaron impresionados, pero nunca lo admitirían. Uno de ellos pregunto. "Eres todavía muy joven, no conoces la vida. ¿Dónde están tus padres? ¿Cómo lograste ser líder de secta?"

"Mis padres fallecieron, soy la última descendiente. Solo quedamos mis hermanos de secta y unos pocos discípulos".

El líder Tian de la secta del Monte Heng intervino "Jovencita, necesitas una secta justa a tu lado, una que sea el abrigo protector y te enseñe el camino del bien. Todavía no es tarde para cambiar. Así tu secta de la Luna podrá ser la más grande secta de sanadores".

Exacto gritaron varios líderes. El líder de Wudang prosiguió "Necesitas un guía. Pequeña Yang Zi, ser líder de una secta es una tarea muy complicada para alguien tan joven como tú. Pero esta conferencia es una excelente oportunidad, ahora los jóvenes talentos de todo el país están presentes. Podrás conseguir un excelente matrimonio y un esposo amoroso que pueda compartir tu carga".

Chengling había estado atento a todo el debate; pero cuando escuchó que Yang Zi podría escoger un esposo, su corazón se estremeció. Desde que la conoció intentó acercarse a ella; pero cada vez le parecía más inalcanzable. Y nunca le expresó sus sentimientos, no esperaba que ahora aparecieran varios pretendientes.

"Agradecemos, las buenas intenciones de los líderes. Pero nuestro líder es muy joven". Mencionó Wu Xi que desde regresó a las llanuras estaba disfrazado para no ser reconocido.

"¿Por qué interfieres? Solo eres su hermano de secta. Porque eres egoísta, mientras más joven sea podrá conseguir un buen marido".

Poco a poco algunos líderes llamaban a sus discípulos solteros para que sean presentados. Yang Zi suspiró, nunca imaginó que la quisiera casar por ambición.

Lord Séptimo que estuvo escuchando con una sonrisa sugirió "Nuestra líder es única en las artes médicas es capaz de curar cualquier enfermedad. No esperamos un esposo de menor gracia. Propongo una competencia. El ganador podrá enfrentarse con mi hermano Da Xi y si logra vencerlo obtendrá el matrimonio".

Todos se miraron, pero fue el líder de la secta de los mendigos quien intervino "¿nos quieres engañar? ¿Cómo quieres que un joven se enfrente a un mayor, acaso quieres dejar viuda a tu líder. Todos estos jóvenes talentos no tienen más de 18 años". Todos secundaron a las palabras de Wei Jia.

Pero fueron silenciados por Yang Zi "Los líderes tienen razón, lo justo es que cada cultivador luche con su generación; pero podrán utilizar cualquier arma. Entonces el ganador de la competencia luchará contra mí y si logra vencerme me casaré con él".

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