Capítulo 15
Ricardo era quien me llamaba cuando Tess me arrastro desde los brazos de Venecia a su lado.
- He visto que quería besarte -me reprochó ella, yo no dije nada, seguí bebiendo de mi cóctel sin alcohol- y tú ibas a dejar que lo hiciera.
- Tess...
- Lupe, amiga... -suspire, ella me leía fácilmente- ya... Lo se. La fueses besado.
- No lo divulgues -acaricie mi cuello, estaba tensa-
- Si no hace algo, yo voy a intervenir... Y eso no te va a gustar.
- No se que hacer... -dije derrotada bebiéndome su trago de ron con vodka y limón de un solo sorbo-
- Por algo todo se empieza. -beso mi mejilla, acarició mi espalda- ¿ves aquel hombre? – visualice al señor y lo detalle, me recordó a mi familia, porte arrogante, bebía whisky en las rocas, típica bebida de las personas así- deja de juzgarlo.
- Lo siento. Es inevitable, es muy parecido a ellos.
- Tal vez, pero maneja algo que puede interesarte. Así que anda. -tess beso mi mejilla y se fue-
- Guadalupe Rilvers qué gusto conocerte por fin -instantáneamente me abordo, extendió su mano para tomar la mía, correspondí el saludo-
- Y ¿usted es? -le dije a ese hombre de perfil arrogante-
- Permite que me presenté
- Adelante -no tenía ganas de hablar con él-
- Ricardo Altuve Parlat. -beso mi mano, sentí grima su saliva quedo en mis nudillos- Soy el dueño de las industrias contAmbiental. -levante una ceja, esa era una empresa en la cual llevaba semanas intentando atraer su atención-
- Oh, que sorpresa. -acote seria-
- Mi secretaria me comentó de sus proyectos e insistencia. Reciba mis disculpas. Me encontraba en África y no pude responder antes.
- -volví a levantar una ceja, mientras mi visión periférica se desviaba instintivamente a Venezuela y Venecia. -
- ¿Le molesta si vamos a caminar mientras me explica sus teorías?
- De acuerdo. Le mostraré el lugar.
Los juegos seguían. El ambiente era alegre y alocado. Había animales encantadores como los elefantes que se paseaban por los alrededores. Ricardo me veía intensamente, no como Venecia lo hacía. Él tenía deseo en su mirada. Y eso, jamás lo había notado en la gandolera.
- ¿Cuéntame más de ti? -dijo él después de unas horas-
- ¿Mi información personal que caso tiene en este momento?
- No me malinterpretes Guadalupe -dijo bebiendo de su whisky- me interesas, y claro con gusto deseo apoyarlos y apoyarte. -me miro profundamente mientras tomaba mi mano- eres hermosa.
- Ricardo verás que sí te malinterpreto, ya que a mí no me interesas. Solo deseo apoyes basado en nuestras bases a la organización. Tenemos buenas ideas.
- Y lo sé. Sé que tienes excelente visión. -sonrió apretando un poco mi mano, estaba controlando mi ansiedad, me estaba invadiendo, me sentía nerviosa y ansiosa, recitaba de manera mental la tabla de los elementos para no terminar golpeando su tabique-
- Suéltame por favor. -intente zafarme, sin perder la sonrisa. -
- Me interesas Guadalupe.
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Nunca más estarás sola
De TodoEstar sola no está mal, es un campo de defensa que crean personas lastimadas para evitar un dolor nuevamente... Pero no todo es lo que parece. Una neurótica y prepotente profesora de literatura entenderá la vida desde otro punto de vista al que jamá...