Entrelazados

Una condición

⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀𝗣𝗢𝗩 𝗩𝗶𝗼𝗹𝗲𝘁

Durante estos días y noches no he tenido tiempo para sentir que estoy, supuestamente, en otro mundo. Creo que tampoco he querido hacerlo
¿Ver tres soles brillar en el cielo es impresionante? Lo es, así como ver personas con orejas y cola de lobos, conejos, ardillas...
Mirando a lo lejos por la ventana de esta nueva habitación, soy capaz de distinguir la espuma del mar. Su sonido me tranquiliza. Todo está oscuro.

No he llorado en más de cinco días. Eso sí es impresionante.

Duermo sabiendo que nadie va a venir a cortarme el cabello mientras duermo o a obligarme a beber tinta porque "es divertido". He tomado duchas largas, sin miedo a que alguien apague el agua fría, quemándome.
Impresionante.

Es duro sentir nuevamente miedo, pero no lo puedo evitar. Por más que pienso, sé que lo único que deseo es no regresar.

Y sé que Hayate cree que lo hace por mi bien.
Como todos en el mundo del cual provengo, debe pensar que mi familia es amorosa. Dos padres juntos, una hermana tan cándida. Fotografías hermosas de vacaciones y eventos en redes sociales.
Me rio por lo bajo. A veces olvido que aquí no existen.

Paseo la mano por el edredón. Desconozco el material del que está hecho, pero es grueso y cálido. Pesado. Debería dormir, pero parece que ya olvidé cómo se puede dormir con miedo.

Sé que debo contarle a Hayate. Confiar en él, porque es la única forma en que entendería mis motivos para quedarme.
Sin embargo la sola idea de que no me crea, me destruye. No entiendo porqué.

Quizá se deba a que nunca conté la verdad a nadie.

—Verás—dije, mirándome reflejada en la ventana—. Es cierto que tengo familia, Hayate. Una hermana y mis padres—necesitaba practicar el discurso, pero incluso a mí misma no sabía cómo decírmelo—. Algunas veces, estando a solas, mi hermana Rose, ella...—Ella... ¿Qué? ¿Me golpeaba? "Todos los hermanos se golpean" ¿Me empujaba para que cayera? "Todos los hermanos juegan brusco" ¿Me lastimaba? "Todos tienen accidentes"

Hayate no me iba a creer. Ni yo misma lo hacía.

Terminé recostándome en la cama, pero entre esas sábanas pude percibir la misma sensación temerosa de antes de venir aquí.

Escapar y tratar de vivir en este mundo por mi cuenta quizá fuera la única opción para quedarme, pero ¿cómo? ¿Y si el collar dejaba de funcionar? ¿Cómo sobreviviría sin poder comunicarme?
Lo único que sabía de supervivencia era por los reality show y había visto apenas un par de capítulos.

Y tal cual como dormí, desperté horas más tarde.
Envuelta en miedo.

Fin POV

⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⋆⋅☆⋅⋆

—¡Arimi!

Hayate había llegado hasta la casa de su amiga y golpeaba la puerta. Cualquiera hubiese pensado que en vez de esperar que le abriesen, quería derribarla.

La exploradora dio un brinco en la cama. Se puso un calzado liviano y un chal sobre los hombros. Miró por la ventana antes de abrir la puerta.

—¿Le ha sucedido algo a Feng?—preguntó, asustada por su prisa, pero él pasó de largo entrando a la casa—¡Hayate!

Lo siguió, subiendo al segundo piso tras él. Abrió de golpe la puerta de la habitación de Violet, pero ella no estaba dentro.

—¿Dónde fue?—Hayate se volteó hacia Arimi, que parecía tan sorprendida como él—¡¿Dónde está?!