DESTINO O CASUALIDAD

OFICIAL Y VIRAL

Hora de la muerte 5:45 de la madrugada.

Todavía se me caían las lágrimas al escribir el parte de decesos.
Llevábamos unas semanas tratando a una mujer de 95 años de edad con una infección respiratoria, lo que se hizo especial en ella fue que durante todo el tiempo que permaneció ingresada su marido no se separó de ella ni por un segundo. Nos parecía tan tierno, tan admirable, ellos tienen un amor de esos que ya no existen. La cuidaba, la mimaba, le leía sus libros favoritos, hasta cuando tuvimos que sedarla, seguía hablándole y leyendo. Se nos partió el corazón cuando se despedía de su mujer. Lo primero que nos enseñan es a no empatizar con los pacientes, pero está situación nos ganó a todos.

Recogí mis cosas para salir mientras hablo con una de mis compañeras sobre lo que había pasado en el turno, la verdad nos afectó a todos, seguimos nuestra conversación mientras nos dirigimos a la salida.

Llegamos a la puerta dimos unos pasos y vi al pequeño Donut saltando en mis piernas con su collar puesto y la correa arrastrándola por el suelo.

-Donut!!!

-Es tuyo? _Pregunto mi compañera_

-Es custodia compartida.

Michele venía andando tranquilamente hacia nosotras, cuando llegó hasta mi me cogió por la cintura y me dió un beso y me susurró en el oído.

-Hola Cenicienta, que tal el turno?

-Hola amor. Ha sido una noche dura _ y le devolví el beso y mi compañera asintió_ Ella es Samantha, una compañera es enfermera también.

-Encantado Samantha, soy Michele, el novio de Edda. _buaaa!! queeeee! Se ha presentado como mi novio???_ Veo que estáis agotadas.

-Si, sé quién es Señor Morrone soy gran fan de sus series y su música. Además hoy el agotamiento aparte de físico también mental, verdad Edda?

-Muchas gracias, pero llámame Michele. Os ha pasado algo?

-Si. Pero te lo cuento en casa vale, quiero irme de aquí por favor. Nos vemos Sam.

-Descansa, ten claro que hemos echo todo lo posible.

-Si eso es verdad. Descansa tú también.

Creo que Michele sabía que no estaba bien y me dio un poco de espacio mientras conducía a casa.

Entramos en casa y todo estaba en silencio. Vera estaría durmiendo a pierna suelta ausente del mundo. Hasta que escuché un gemido masculino.

-No me jodas! Vera no está sola...

-Y yo creo que se quién es...

-Lucca?

-Si. Venga vamos a tu habitación y mientras yo preparo la camita de Donut tu te das una ducha vale amor.

-Si, creo que eso me relajará un poco, gracias amor.

Le di un beso y fuimos a mi habitación, Michele se quedó con Donut y yo entre al baño. Unos minutos después salí envuelta por la toalla para sacar mi pijama de super héroes del armario. Me fijé que Michele se había cambiado por un pantalón de pijama corto y no llevaba camiseta.
Me quedé mirándolo sin acordarme de lo que iba hacer.

-Muñeca! Qué haces ahí parada?

-Aaa... Emmm. No se qué iba hacer.... _Me puse colorada_

-Te he puesto nerviosa?

-Si! _ le sonreí y me agache para abrir el cajón del armario donde estaba mi ropa interior y me queje por el dolor_ Auchh! Me duele la espalda...