Blitzø sintió honestamente que había retrocedido en el tiempo.
Aquí estaba, sosteniendo de la mano a su sonriente hija de siete años de la mano y se dirigía a un parque de diversiones en el que no había estado en mucho tiempo. Solo fue tres veces en su vida que habían estado en Hellotopia, y la última fue cuando Loona tenía catorce años... Regresar aquí se sintió nostálgico al recordar todos los momentos felices que tuvieron los dos y se preguntó si algo así podría repetirse nuevamente.
Como era de esperarse Stolas pagó las entradas, y pagaría todo lo demás según lo acordado, antes de que los seis entraran al lugar; para asombro de quienes no habían estado aquí antes, pues a diferencia de su experiencia anterior en Loo Loo Land, las callecitas estaban limpias y había todo tipo de demonios en lugar de solo puros diablillos, todos caminando felices. Los vendedores de comida y recuerditos eran amables y serviciales con quienes se acercaron a sus puestos mientras pequeñas mascotas peludas corrían por allí interactuaban con los niños. Hellotopia, a través de un marketing innovador, logró obtener derechos para usar muchas mascotas infantiles con las que los niños en el infierno crecieron durante años. Uno de ellos era Lappy El Lobo Lunar, un aventurero y suertudo perro infernal que siempre se las arreglaba para burlar a su archienemigo Micky el Arcángel en sus interminables intentos de matarlo. Muchos Pecadores a menudo los comparaban con una caricatura terrícola llamada "Tom y Jerry".
Loona jadeó y lo señaló. ― ¡Papá! ¿Podemos tomarnos una foto con Lappy? ¡Es mi favorito!
― ¡Seguro! De hecho me gusta un poco ese pequeño cabrón. ―replicó Blitzø mientras el feliz dúo padre/hija se acercaba.
Millie se volvió hacia un nervioso Moxxie, que parecía listo para tener un ataque de pánico. ― ¿Todavía le tienes miedo de las mascotas, cariño?
―S-sí...―murmuró Moxxie mientras miraba a una ardilla de aspecto demoníaco con una sonrisa dentuda que se tomaba selfies junto a tres niños cabra. ― . Quiero decir, por supuesto, este lugar parece mucho menos sombrío que Loo Loo Land, pero todavía no... quiero...
― ¿Moxxie? ―Millie preguntó al ver que su marido se quedó mirando algo con los ojos muy abiertos. Ella volvió su atención a lo que él estaba viendo y vio una botarga en forma de dinosaurio-dragón de color púrpura y naranja armado con un escudo y una lanza, posando para los niños.
―Oh... por... Satán... ―susurró Moxxie antes de jadear de alegría. ―. ¡Es Sire Gallantflame! ¡Solía verlo todo el tiempo en la tele cuando era un pequeño diablillo! ¡Siempre luchando para rescatar a la princesa Demina del malvado mago Gorebones! ¡Yo solía hacer siempre una versión de cartón de su armadura y espada mientras salía a matar al mal! ¡Todavía puedo recordar su grito de batalla! ―Luego colocó una mano sobre su corazón y señaló al cielo: ―"¡No importa la tarea, lucharé hasta el final!" ―...Luego abrió los ojos al ver a Millie sonriéndole con ternura y Stolas y Octavia con los ojos muy abiertos. Ruborizándose, bajó lentamente la mano y se frotó la nuca. ―. Um... ¿Millie, c-crees que podríamos...?
―Vamos, Sire Moxxie. ―dijo Millie con una risita mientras lo tomaba de la mano. ―. Vamos a tomarnos una foto.
Los dos demonios Goetia vieron a la pareja alejarse antes de que Stolas mirara a su hija, y ella lo mirara a él. Este abrió la boca para decir algo, pero Octavia entrecerró los ojos y lo calló diciendo: ―. Joder, no...
― ¡Awww...! ―gimió Stolas mientras señalaba a un trío de ardillas rayadas de aspecto idéntico con cortes de pelo punk y chaquetas, todas en diferentes colores. ―. ¡Pero ahí están Alvin y las Punketas del Limbo! ¡Solías amarlos cuando eras pequeña!
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Regresando en el tiempo (Traducción)
HumorBlitzo a veces se preguntaba qué pasó con esa dulce cachorrita que crio durante todos esos años como su hija. Loona solía irrespetarlo tanto que se preguntaba si ella todavía lo amaba como su papá. Cuando intentó ayudar a Loona con el libro mágico q...