# O7 ¡!

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Tras el incidente Seungmin no tuvo más que llamar a su madre, que claro, estaba exaltada pero en cuanto llegó para llevarse a su hijo se sintió aliviada de saber que el más joven lo había hecho para ayudar a otra persona. La mujer se debatía entre preocuparse o felicitar al chico, aunque finalmente optó por castigarlo; claro que eso no hacía gran diferencia en la vida de Seungmin ya que no solía salir mucho, tal vez lo único que le pesó fue que su madre no lo dejara desayunar sus cereales con malvaviscos todo un mes como parte del castigo.

Habían pasado cinco meses desde aquella noche donde ambos presenciaron un intento de secuestro, ocho meses desde la muerte de Minho. Bang Chan le había dado su número celular a Seungmin ya que tenía una deuda pendiente que no tendría problemas en saldar luego, si bien Seungmin no tenía la intención de cobrar el favor estaba feliz pues tras enviarle un mensaje al chico indicando cuál era su número, el rubio había entablado una conversación que poco a poco se atrevería a decir podía volverse una amistad. No tenían muchas cosas en común, para nada, pero eso era lo de menos ya que sus conversaciones se centraban en otras cosas, desde un "¿Qué tal estuvo tu día?" hasta un "Ten una noche linda y buenos sueños" que llegaban hasta un "Ten cuidado, con esa sonrisa el secuestrado podrías ser tú" por parte de Bang Chan.





- Creo que quiere ligarte.




La voz de Minho interrumpió la atenta mirada que Seungmin mantenía en su celular mientras con su mano derecha sostenía la cuchara todavía con arroz que no consumía por estar conversando con Bang Chan, un sábado en la mañana, demasiado temprano para el gusto de Lee.





- No lo creo, solo está siendo amable. —Respondió el menor mientras apagaba la pantalla del celular para poder desayunar en calma.

- ¿Crees? Se nota, no cualquiera te dice eso de tu sonrisa, es más, ¿Qué sabe él de tu sonrisa? —El pelinegro hizo una mueca mientras apoyaba sus manos en la mesa, aunque claro, no ponía fuerza o acabaría cayendo—. La sonrisa de tu foto de perfil en whatsapp no se compara a la real.



Seungmin no pudo evitar reír ante la escena que montaba su compañero, Minho pareció mostrarse más tranquilo e incluso imitó la sonrisa del chico, aunque era verdad que estaba un tanto celoso con ver como empezaban a llevarse ambos y no temía aceptarlo en voz alta. Era un egoísta por temer perder a la única persona que podía verlo tanto como Seungmin lo era por temer perder al único con quien podía hablar, tal vez ambos no eran del todo diferentes.

Las vacaciones eran el periodo favorito del año para el más joven, evitaba el contacto con otras personas. No es que Seungmin fuera del típico chico que quería a todos lejos para verse misterioso, ¡Al contrario! Él daría lo que fuera por salir en las tardes con un grupo de amigos a la plaza simplemente a tontear, pero no podía, había crecido apartado de los niños por ser señalado como "el hijo de la bruja", lo que le causó el rechazo a donde iba y posteriormente, una horrible fobia social. Si bien ahora ya no lo llamaban así, estaba aterrado con la sola idea de salir de casa, por eso apreciaba tanto la compañía de Minho y no estaba dispuesto a perderla.



Rubatosis ᵏⁿᵒʷᵐⁱⁿDonde viven las historias. Descúbrelo ahora