Brothers

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Kakucho está agradecido con cualquier deidad que decidió regresar a Hanagaki Takemichi a su vida. Ahora no puede imaginarse una vida en donde ninguno de los tres se conocieran, desde un inicio, tampoco quiere imaginarla. No sabe que hubiera hecho él solo con Izana con todo lo que ha sucedido, realmente no cree que hubiera podido sacar a Izana del pozo del dolor que es después de la muerte de Shinichiro. Es duro porque Izana no quiere ir al funeral, no quiere ver a los restantes de la familia Sano y en definitiva no quiere ver al otro hermano de Shinichiro, no cuando fue la pandilla del mismo Sano quien fue la responsable de la muerte del hermano de Izana.


Takemichi es quien se encarga de que Izana no haga una locura. Como ir y moler a golpes a Sano Manjirou.


Van al cementerio tres días después cuando Hanagaki-san comienza a cuestionarlos, ni él ni Takemichi saben que decir o qué hacer con las flores, hasta que Hanagaki-san es la que comienza a orar. El cementerio es terrorífico y Kakucho lo odia con todas sus fuerzas, después de todo tuvo que ver a sus padres ser enterrados después de que fallecieron.


Él está preocupado porque conoce las tendencias destructivas que puede tomar Izana en cualquier momento, sabe que todo lo que está pasando es un golpe duro a la cordura de su hermano, Izana está comenzando a llegar tarde a casa y eso solo hace sonar aún más las alarmas en su cabeza y por la expresión cautelosa y preocupada que tiene Takemichi en sus ojos sabe que no es el único que está ideando planes de la A a la Z.


De una milagrosa llegan a diciembre antes de que Izana cometa una locura, bueno fue algo suave en comparación a lo que pudo haber pasado, Izana está rodeado de cuerpos, vivos porque si no Takemichi ya hubiera puesto el grito en el cielo, todos están vivos quizás algo rotos de alguna parte pero nada que pueda regresar a Izana a la correccional, por lo cual él está muy agradecido ya que la palabra moderación no está en el vocabulario de Izana.


Es devuelta en casa en su habitación cuando Takemichi comienza a curar las heridas de Izana, no es de sorprenderse que con la facilidad de problemas en los que se mete Takemichi y en las peleas que Izana busca su botiquín siempre esta surtido, él tiene que ser valiente cuando comienza hablar, porque sabe que Takemichi está pensando en mil y un maneras de cómo sacar el tema pero él sabe que es mejor decirle las cosas a Izana de golpe y de frente, simples y claras.


"Lo estás haciendo de nuevo" Izana está de regreso a su modo destructivo, y todos en la habitación saben que si sigue recorriendo ese camino no habrá manera de traerlo de regreso de nuevo.

Izana al menos tiene la decencia de parecer algo avergonzado "Lo sé" junta sus rodillas y esconde su cabeza en ellas "Pero realmente es tan fácil dejarme llevar, yo no busco los problemas, ellos fueron los que llegaron, estaban molestos por algo que no recuerdo"


Takemichi es quien se levanta y llama la atención de ambos, su habitación es grande, sabe por Takemichi que esta casa la compro cuando llego de Hokkaido en busca de su nieto, y que cuando a Takemichi se le ocurrió la maravillosa idea de que todos vivieran bajo de mismo reino hubo ciertas modificaciones en la casa dando como resultado que pudieran tener una habitación lo suficientemente grande para tres adolescentes y sus cosas, siguen teniendo literas con la alteración de que la parte libre es el espacio para guardar alguna de sus cosas, el diseño es genial, fue Hanagaki-san quien diseño todo así que no puede esperar que algo que ella haga salga mal, por lo que cuando Takemichi regresa a su pequeño rincón de curación con una diminuta mesa plegable, hojas y pintura tanto el cómo Izana parpadean sorprendidos.

He looks like better in whiteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora