S.O.S. Desappearance: My Best Friend's Ghost #PGP2022 (Complete)

Capítulo XXVIII: La Cabaña del Bosque Desolado

Narra Chad

Estoy regresando de la estación del Sheriff, finalmente llegó la orden de alejamiento, hace una semana y ya la firmé al igual que todo el grupo de la estación y el mismo Sheriff del condado. Se supone que entrará en vigencia la semana que viene, lo cual me alegra mucho. Después de todo ya me quité otro gran peso de encima. Según el Sheriff mañana Bárbara, su padre y el psicólogo deben firmar y si no quieren hacerlo irán directo a la cárcel. Por lo que no se pueden negar.

Sin embargo aún quedan asuntos pendientes con el caso de Becca. Estoy regresando a mi casa, está lloviendo pero antes de dar vuelta, en la calle que se encuentra antes de mi casa, la veo de frente y me detengo en seco. Becca apareció  frente a mi parachoques tal como la vez que la encontré en ese terrible cementerio. Pisé el freno de forma apresurada y me quedé viéndola allí. 

Debo admitir que ella no se ve nada bien, nada, nada bien. Está toda golpeada, el pelo desnivelado, un lado más corto que el otro, su labio está sangrando, sus lágrimas salen de sus ojos y su brazo izquierdo también está cubierto de sangre.

Estoy paralizado, no se que debo hacer pero antes de bajar del auto ella me da la espalda y comienza a correr hacia un bosque totalmente oscuro y desolado. No pierdo el tiempo, tomo la linterna del celular, mi impermeable y me lo coloco mientras que corro tras ella, es evidente que quiere que la siga. Tiempo después llegué al centro de la nada y alumbré todo el sitio. Estoy totalmente asustado, comienzo a susurrar su nombre, no quiero que me oigan. Sin embargo, no recibo ninguna respuesta. Empiezo a alumbrar en todas las partes, no puedo perderla de nuevo, hay algo que no está bien aquí. Otra vez esa sensación de tensión y vacío se apodera de mí, la desolación es muy fuerte. Está oprimiendo mi pecho. Entonces es cuando oigo el crujir de unas ramas. Giro a mi derecha para ver que o quien produjo ese ruido y cuando lo hago, Becca está detrás de mí.

Ella está cerca de unos arbustos, al final de ellos, siguiendo sus indicaciones, es que logro visualizar una pequeña pero muy destruida cabaña de madera, Becca  me señala el sitio con el dedo índice de su otro brazo, el que no está herido. Debo admitirlo que estoy aterrado su piel es más pálida de lo que acostumbra, no hay color rojizo en sus mejillas, algo que la caracterizaba. Y sus labios se había tornado violeta, dejando de lado su color escarlata. No quise opinar y tampoco me podría a debatir si lo que estaba viendo era real o no, solo fui en la dirección en la cual me señaló.

Poco después ambos llegamos a la puerta de la cabaña, me indicó que entrara pero acto seguido colocó su dedo índice bueno sobre sus labios, en señal de que hiciera silencio. Entendí el mensaje y aunque no podía ver su rostro totalmente porque estaba  destruido y golpeado, pude reconocer más o menos sus facciones. Aunque las hermosas facciones de su rostro angelical habían quedado en el olvido seguía siendo ella. Por lo cual solo fui a la cabaña subí las escaleras con mucho cuidado y Becca apareció justo a mi lado pero no hizo ningún ruido.

Estuvimos caminando hasta que llegamos a lo que parecía ser un escaparate o sótano, ella me volvió a señalar el sitio  con su dedo índice. Esto no me estaba gustando para nada. Si Becca intentaba comunicarse de esa forma y haciendo esas señas, no estaba pidiendo ayuda, más bien estaba indicándome, el sitio en el cual, la habían tenido prisionera...Esto no estaba bien.

Apenas entré con cuidado, vi que la puerta estaba medio abierta, eso quería decir que había alguien dentro de este y lo que menos necesitaba es que me escuchara. No sabía que esperar pero ella me tranquilizó con tan solo un seña que los sordomudos utilizan para decir "tu solo confía en mí" "No te pasará nada malo". No tenía muchas opciones, debía entrar para saber que estaba ocurriendo en ese sitio de pesadilla. Apenas lo hice el hedor que recibí, no fue normal. Intenté obviarlo y centrarme en otras cosas. Por lo cual fui bajando las escalera y vi un líquido rojo que recorría cada una de ellas.