prólogo. Bienvenidos al 3190

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Hay cosas que debes saber de este mundo, para empezar, al momento que se escuche la sirena debes saber que esa es la hora de estar en pie listos para trabajar o estudiar, al menos a los jóvenes se les permiten estudiar, pero no son carreras como las de antaño, esas cosas como médico, abogados, diseño o administración no existen, en este mundo debes aprender a ser operador de mecanismos robóticos, robótica de salud, robótica constructora, robótica ama de casa y esas cosas. Los que no estudian para operar y dar mantenimiento a robots trabajan en la gran industria, La fábrica gigante que crea los robots, los mismos con los que debemos vivir y al mismo tiempo los que nos vigilan.

Los niños que no tienen la suerte de haber nacido en las familias ricas y no pueden ser criados por sus padres debido al trabajo eterno en la fábrica viven en un orfanato. Estos sitios son mantenidos por los decretos del régimen, preparando a tantos empleados para ellos como sean posibles, están ubicados en una de esas casas antiguas algo lejos de la ciudad, según el anciano que cuida la casa esto era llamado mansión, aunque hoy en día solo son casas viejas.

La ciudad está más al norte, llena de grandes edificios de apartamentos completamente robotizados, luego está la fábrica y arriba de ésta, flotando en el cielo se encuentra el palacio Belmont, halla en ese lugar se encuentra la familia Belmont, una familia que ha heredado y mantenido la dictadura desde el primer Belmont en el 3104, se dice que el primer Belmont llego a este país como un vendedor, empezó a mostrar y vender sus inventos, su fama se extendió por todas las 5 islas y se convirtió en el hombre más rico de todo este continente que las conforman, era un hombre respetable, se estableció en la isla principal Core y formo una familia. Pero un día, empezó a comportarse de manera extraña, creo cientos y cientos de inventos, lentamente los vendía como ayudantes en la limpieza, luego empezó a crearlos más autónomos y humanoides, hasta abarcar todo, las personas empezaron a depender de estos para todo, hasta que fue muy tarde, creo un ejército de droides derrotando fácilmente a los militares. Los Belmont se convirtieron en los gobernantes supremos y desde entonces la fábrica abrió sus puertas, una vez que empiezas a trabajar ahí, tu vida termina, eres un instrumento más para la familia Belmont, siempre trabajando apenas con tiempo suficiente para dormir y comer, no puedes faltar ni un día sin excepciones o serás encarcelado, aunque estés enfermo, viejo o embarazada, todos deben trabajar, hasta la muerte.

Esta es la maldición de este mundo.

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