Capítulo 2. Corre o muere.

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Todas nos ocultábamos y empezamos a caminar lento para no hacer ruido, cualquier contacto con un rebelde era signo de traición, no sé en qué diablos pensaban esos chicos estando allí, pero no quiero quedarme para saber. De pronto escuchamos ese sonido metálico que solamente hacen los drones -MALDICIÓN CORRAN- grito Nury nerviosa haciendo que todas empezáramos a correr, ese sitio no era prohibido, pero si nos atrapaban cerca de un rebelde estábamos muertas, sin importar qué, nos acusarían de rebeldes y nos matarían sin ninguna explicación, vi como los chicos también corrían mientras llegaban más y más drones.

Cuando me percate nos habíamos separado en ese inmenso lugar me altere, mientras buscaba donde esconderme, recorría el lugar con la mirada, no encontraba a mis amigas, si un dron identificaba nuestros rostros estábamos muertas, encontré un hueco entre la chatarra y ahí me oculte. Respire intentando calmarme, tratando de que llegara aire a mis pulmones, escuche las hélices de un dron aéreo muy cerca, la ventaja de este lugar es que por tanto hierro y cobre los sensores no le funcionaban bien, saque mi cabeza lentamente cuando lo escuche alejarse, mire a mí alrededor, vi como los demás drones merodeaban, al parecer aun no encontraban a nadie, en eso vi como Lyra venia directo hacia mí tratando de esconderse, cuando se acercó hice que se ocultara dónde estaba antes -quédate aquí, iré a buscar a las otras- en silencio asintió, tenía que saber si todas estaban bien, vi como uno de los drones le estaba disparando a un chico de los de la mansión, corría al lado de un rebelde, era su fin ya estaba marcado, aproveche que los demás drones lo siguieron y corrí al otro extremo, al girar encontré a las demás chicas junto con ese otro chico rebelde y los demás chicos -¿Qué diablos hacen? vámonos de aquí y aléjense de ellos- susurre a las chicas -tranquilízate y acércate, tengo un plan para que no nos atrapen- lo mire con mala cara -tu cállate, nosotras no nos queremos involucrar con rebeldes- él sonrió de medio lado y señalo algo que de veía a lo lejos -eso que está halla es nuestra salida de escape, esos dos se están haciendo de carnada para que salgamos, si quieren me acompañan, de lo contrario adiós-

No podía creer lo que decía, mire a las chicas y sé que me decían con las miradas que dejara de quejarme y aceptara, odio cuando todas hacían eso, suspire y dije un "bien" con desgana, todos empezaron a seguirlo y yo volví a donde estaba Lyra, debía sacarla de ahí -Lyra vamos, encontramos una salida, hay que darse prisa- la ayude a salir y juntas empezamos a correr, la verdad Lyra se le hacía difícil correr mucho por su peso, intente seguirle el paso para no dejarla atrás, en eso un dron se acercaba.

-Vamos Lyra ya falta poco, debes darte prisa- le dije aún a su lado, por la izquierda vi al dron y me tapé el rostro, Lyra hizo lo mismo, pero igual estaba alcanzándonos, estaba casi tan cerca que iba a poder identificarnos, aunque nos tapáramos la cara. -¡OYE!- ese chico empezó a tirarle piedras al robot y el perdió interés en nosotras -AQUÍ ESTOY OJALATA- el dron sacó un arma y empezó a perseguirlo, estaba sorprendida por su agilidad y casi ni me doy cuenta que había llegado a una especie de escotilla, cuando baje estaban todos incluso los dos chicos que antes habían corrido como cebo -¿Dónde está Mathew?- pregunto uno de los chicos -n...no lo sé, estaba....corriendo- le dije suponiendo que Mathew era ese chico, de pronto escuchamos los disparos acercarse y mire a la escotilla, vi unos pies y sentí el suelo a mi espalda, una voz decir "cierra" y luego oscuridad junto con algo pesado arriba de mí. -¡Maldita sea bájate!- exclame molesta, el peso se fue y sentí alivio, aunque seguíamos a oscuras -esas son palabras muy fuertes para una dama- vi algo de luz, el chico que había preguntado por Mathew, tenía en su mano de esas antiguas linternas conectada a una pequeña batería, el otro tonto sonreía con arrogancia -¿estás bien?- me pregunto tendiendo la mano, la tome y me levante, vi a Agnes acercarse y abrazarme –estaba preocupada- la abrace con cariño suspirando -¿están todas bien, alguna quedo marcada?-

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