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-VAMOS QUE ME VOY SOLA!- desde la entrada Ochako les grito a sus esparcidas hijas para que vayan donde ella y sus maridos estaban.

Se iban a juntar con Sero para ver el partido y jugar un poco de fútbol, ciertamente para todos fue una sorpresa que a sus hijas también les gustara.

A Eijiro y Katsuki nunca les gusto, y en más de una ocasión alegaron que el boxeo era mejor que ver personas corriendo detrás de una pelota, Ochako se burlaba y no les tomaba importancia.

Sus hijas Kia y Lin, eran las fanaticas al igual que su madre, por mas que Kia no compartía genes con ellos, los tres se encargaron de darle una calida bienvenida y enseñarle todo lo que debe saber.

-vamos!- una copia igual que Katsuki físicamente pero con un dulce y amable caracter llegó con una sonrisa en la cara y sando saltitos, Kia venia caminando tranquila.

-bien, saluden a sus padres y vayan al auto- las niñas gritaron con emoción, saludaron rápidamente y salieron de la casa.

-seguros que estarán bien? Aiko sale en tres horas, Annei tiene leche en el refrigerador, solo tienen que ponerlo en el microondas, los pañales estan en su habitación y- un beso de Katsuki hizo que dejara de hablar.

-ya sabemos todo mejillas, pasamos por esto otras dos veces, recuerdas? Y no nos olvidaremos de nuestra otra hija- la chica rió y asintió, luego fue a molestar un poco a la bebé en brazos del pelirrojo.

-lo se... solo que sigue siendo como la primera vez... pero bueno en fin, pórtate bien loquita, mami se va a jugar a la pelota- la bebé le dio una sonrisa y aplaudió, Ochako beso a Eijiro, una vez más a Katsuki y se fue.

-bien, ya estamos solos bebita, quieres ver acción de verdad?- si no pudieron convertir a sus otras hijas, por lo menos se asegurarían que la última si sea de las suyas.

Mientras tanto, Ochako conducia a la casa de los Sero, Mina estaba en una misión y también debían cuidar del hijo que ellos tenían, el cuál era de la misma edad que Kia.

Llegarian una hora después, ya que la pareja se habia mudado a un pueblo cercano y no tardaban tanto que cuando iban a la ciudad.

-Kia por favor, con mi celular mándale un mensaje al tío Hanta diciendole que ya estamos yendo- la niña asintió e hizo lo que le pidio su madre.

-dice que nos espera y que solo falta comprar la bebida- la castaña asintió y cuando llegaron al pueblo hicieron una rápida parada para comprarla.

Al llegar a la casa de los Sero, ya las estaban esperando, era primavera por lo que podían disfrutar el aire libre. Las niñas apenas se estaciono el auto corrieron a saludar a los hombres, antes de bajar Ochako les mando un rápido audio a Eijiro y Katsuki de que ya habian llegado, aunque no le respondieron.

Habian llegado para la hora del armuerzo, mientras comian veían el partido en vivo de Francia vs. Alemania, en más de una ocasión se atragantaron casi que gritando los goles.

-NO LOS CANTEN ANTES DE TIEMPO QUE FALLAN

-CALLATE Y MIRA EL PARTIDO

-PERO CALLGOOOL

-NOOOO

-GOOOOOOLLLLL

-HANTA QUIERO MI DINERO JAJA GOOOOLLL

y así los gritos en el armuerzo seguían, finalmente ganó Alemania, haciendo que Hanta perdiera la apuesta y deba pagarle a Ochako, mientras que la castaña mayor y el menor de los Sero festejaban que ganaron.

Luego de eso, lavaron y guardaron rápidamente todo, cuando los adultos terminaron los niños ya estaban jugando en el jardín.

Hanta fue a buscar la pelota de fútbol y las remeras para dividir los equipos, Ochako saco una selfie y la mando directamente al grupo de la ex clase A.

Sin más, dividieron los equipos, Lin quedo como árbitro, tanto Hanta como Ochako quedaron de arqueros, mientras que los menores jugaban.

Cuando ya iba la tercera vuelta que los mayores lograron que la pelota no impactara contra un vidrio, decidieron ir a la calle, aprovechando que era poco transitada y que habian más niños en el barrio.

La idea funcionó de maravilla, ya que no tardaron más niños en sumarse a jugar y hacer el juego más entretenido. Aunque luego de media hora habian sacado a los héroes del juego.

Al ver que no podian jugar, decidieron ir a preparar bebidas para todos, cuando volvieron las bebidas fueron un éxito. Algunas personas los reconocieron y les pidieron fotos y autógrafos.

Alrededor de las cinco de la tarde las mujeres ya se estaban yendo, las niñas estaban dormidas, con ayuda de Hanta, las subieron al auto cuidadosamente.

-gracias por invitarnos hoy Han- se abrazaron y ya se estaban despidiendo.

-gracias a ustedes por venir Ocha, la verdad que nos la pasamos muy bien cuando vienen a jugar, la próxima vamos a tu casa nosotros, de paso molestamos a Eijiro y Katsuki- se rieron ante eso.

-es bueno escuchar gritos que no sean sobre la rutina- ambos sonrieron y el niño menor vino corriendo.

-tía Chako! Las voy a extrañar- la castaña abrazó una vez mas al pequeño y termino de despedirse, prometiendo que para el próximo partido se juntarian en su casa.

Mientras manejaba en la ruta, llamó a Eijiro y puso el celular en alta voz.

-hola?

-hola amor, están bien en casa? Las niñas están durmiendo

-si, estamos bien por aquí, ya buscamos a Aiko y esta jugando con Katsuki en el jardín, yo recién termino de dormir a la bebé- la chica sonrió ante la imagen mental.

-okey, ahora dentro de un rato llegaría por allí- escuchó como la puerta del patio se abria y como alguien corría.

-de acuerdo, nos vemos 'Chako- luego de eso colgaron y la chica puso música a bajo volúmen mientras conducía.

Cuarenta minutos más tarde estaban llegando, las niña no habian despertado en todo el viaje, al terminar de estacionar Ochako las alzó a las dos en sus brazos.

Cuando entró a la casa no vio a nadie, aunque escuchó risas desde el patio. Subió en silencio y acostó a cada una en su habitación, luego fue a ver a Annei, también estaba durmiendo, la bebé era su viva copia, hasta había salido con ojos castaños, le acarició la cabeza y fue a buscar al resto de su familia.

Fue hasta el jardín, allí estaban jugando a los pases ante su hija y sus maridos, las perras estaban en el medio intentando agarrar la pelota, cuando vió como en un momento la pelota venía hacia la casa, corrió y la atajó lanzandola de nuevo a su hija.

-la mamá se puede sumar?- Aiko rió y comenzaron a jugar entre todos.

One-shots Star ✯Donde viven las historias. Descúbrelo ahora