Advertencia: Escena de sexo explícito. Si prefieres omitir esta parte, puedes empezar a leer desde esta señal: [ • • • ]
Su susurro sensual agradó al hombre. Bajó la cabeza, exponiendo su rostro. Tenía la piel oscura y rasgos agresivos. Lo que fue aún más interesante fue que había dos colmillos sobresaliendo de su boca, sacando un aire feroz y salvaje. Sin embargo, en ese momento, sus ojos en forma de campana brillaron con lujuria flagrante.
Balnor levantó a Aryan con una mano y lo colocó directamente sobre su brazo. La altura era perfecta para que Balnor lamiera con sed los puntos rosados en el pecho del joven. La gasa húmeda se pegaba con fuerza a su piel, lo que hacía que las protuberancias rosadas fueran aún más llamativas.
Aryan no mostró la menor resistencia. Conocía muy bien las preferencias de la persona frente a él. Gimió levemente mientras sacaba el pecho aún más, acercándolo a los labios de la otra persona.
Balnor lamió más fuerte, más rápido. El deseo en sus ojos marrones se intensificó hasta volverse insoportable. Con impaciencia tiró de la cintura del joven más cerca y forzó sus piernas a separarse, queriendo envolverlas alrededor de su cintura.
Aryan se sorprendió. No esperaba que Balnor fuera tan impulsivo. Su erección lo asustó a muerte, por lo que Aryan trató de detenerlo apresuradamente, ganándose una mirada de insatisfacción del troll que estaba encima de él. De inmediato suavizó su tono, —Sin prisas. Deja que te ayude.
Balnor comprendió de inmediato lo que quería decir, así que aflojó su agarre. Aryan saltó hábilmente y se paró frente a Balnor. Debido a su diferencia de altura, Aryan, que ya estaba de pie, sólo alcanzó la cintura del troll. Sin embargo, esto solo hizo que la escena fuera aún más sensual.
Aryan miró hacia arriba y sonrió dulcemente a Balnor. Comenzó a desabrochar a Balnor por la cintura. La ropa del troll era sencilla. Tan pronto como se desabrochó, surgió algo enorme.
Aunque ya lo había visto muchas veces, aún emitía un fuerte impacto visual. Sus ojos temblaron por un momento antes de tocar suavemente la roca dura y abrasadora. Era un marcado contraste con sus manos rubias y ligeramente frías.
Balnor gruñó cómodamente. Aryan bajó la cabeza, deslizando hábilmente su lengua a lo largo de su contorno. Balnor sintió que las venas de su pene se hinchaban de excitación, como si estuviera a punto de explotar.
Al final, no pudo contenerse, así que agarró la cabeza de Aryan y le metió el pene en la boca. Sin embargo, era realmente demasiado desproporcionado, por lo que sólo cabía la cabeza. La boca de Aryan estaba tensa y estrecha, lo que le hacía querer con locura golpearle con fuerza y correrse dentro de su boca. Sin embargo, también quería retenerlo para disfrutar del éxtasis.
Al momento siguiente, la suave lengua jugueteó con su punta, golpeándola como un tambor, mientras el par de suaves y diminutas manos acariciaban el eje más rápidamente. Cuanto más rápido acariciaba Aryan, más y más alto escalaba. El impulso se hizo cada vez más difícil de soportar hasta que finalmente alcanzó la cima del placer y expulsó por completo su carga caliente.
El semen brotó por toda la piel blanca y tierna de Aryan.
Después de que Balnor se recuperó de su orgasmo, miró a Aryan y vio el líquido blanco que goteaba de la comisura de sus labios rojos. Inmediatamente se sintió angustiado, por lo que sostuvo a Aryan en sus brazos, deseando limpiarlo con torpeza.
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Transmigrado a un videojuego homoerótico
FantasiSuo Fei, un otaku veterano, ha pasado tres días y tres noches seguidas jugando la homoerótica y altamente explícita obra maestra llamada "Yalance". Pero ha valido la pena, ya que pudo conquistar a los nueve pequeños shous de las nueve grandes razas...