Era la primera vez que tenían un día libre tras haberse mudado para recobrar fuerzas antes de ir preparando el nuevo comeback junto al disco.
Hanna no sabía qué hacer. Todos sus amigos estaban ocupados trabajando, así que pensó en hacer algo con los miembros. Sabía que Chan y compañía estarían durmiendo o en el gimnasio, como siempre, así que buscaría a sus compañeros de departamento.
Fue en busca del menor, pero Seungmin la interceptó por el camino.
— ¿Sabes dónde está Innie?
— Salió hace un rato —contestó—, dijo que había quedado con Hyunjin y han ido a comprar ropa.
— Ah... —su primera opción quedaba descartada— ¿Quieres hacer algo? Podemos ir al cine.
— Lo siento, he quedado con alguien -le dijo poniéndose uno de los auriculares.
— ¿Con quién? —preguntó con el ceño fruncido.
— Con un ser humano —bromeó antes de salir de la casa.
Ella bufó, yendo en busca de Felix. Tocó un par de veces y luego entró al escuchar unos gritos furiosos.
Lo miró preocupada, pero después su mirada se suavizó al ver que estaba jugando a videojuegos en su ordenador. Llevaba los casos puestos y estaba jugando online con otras personas.
— ¡NOOOOOOO! —gritó despavorido— ¡AHHH! —gritó nuevamente al asustarse por otra presencia en la habitación— Hanna, que susto me has dado.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
— Parecía que te estaban matando.
— Lo estaban haciendo, ¿vale? No, no te hablo a ti, Chenle, es Nannie. Espera. Sí, ahora me uno a la partida —silenció el micrófono y se dirigió a ella—. ¿Querías algo?
— No, no. Que va.
Salió de la habitación soltando un suspiro. Le quedaba una última opción: Minho.
