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— ¿Qué haces aquí, Jungkook?— Preguntó Yoongi todavía sorprendido por la presencia del pelinegro.

— Te dije que si me aburría de la cena, vendría a buscarte. Pues aquí estoy— Explicó con orgullo.

— P-pensé que lo decías de broma, tonto— Dijo golpeando su hombro.

— ¿Bueno, me vas a dejar pasar o me muero de frío aquí afuera?

— Oh, si, si, pasa— Yoongi se hizo a un lado para que el contrario pudiera pasar.

Por suerte su hermana había subido a su habitación, por lo que podrían estar a solas, más tranquilos.

— Cuéntame, ¿Qué tal la cena de ayer?— Preguntó Yoongi regresando al sofá. Jungkook se ubicó a su lado.

— Uhm... Si me das algo de comer, te lo cuento— Propuso con una pizca de gracia.

— ¿Has venido a mi casa solo para comer?— Respondió atónito. Jungkook asintió— Ush, eres increíble, Jeon.

— Lo sé— Contestó estirando sus brazos, apoyándolos sobre el respaldo del sofá.

Yoongi rodó sus ojos— Solo porque ha sobrado mucha comida te doy. Ahora regreso.

El pálido se levantó y se encaminó hacia la cocina. De reojo pudo ver como Jungkook lo seguía.

— Ahora...— Empezó a hablar mientras colocaba un poco de comida sobre un plato— ¿... Me vas a contar que tal la cena de ayer ?

Hubo un silencio por parte de Jeon, recordó lo que había sucedido y... Ugh.

— Vamos, hombre, no tengo todo el día— Dijo el rubio poniendo el plato en el microondas.

— Todo fue una mentira— Masculló en voz baja.

— ¿Qué?

— La cena. Todo fue una jodida mentira— Dijo cruzándose de brazos y suspirando— Mi padre no quería firmar ese estúpido contrato, de hecho ya lo había hecho la semana pasada, solo quería que vaya para ver como le pedía matrimonio a su novia, ugh.

— Oh... Entonces fue un desastre, ¿verdad?

— ¡Claro que lo fue!— Exclamó— Esa mujer es lo peor, solo quiere dinero y dinero, no le importa en absoluto mi padre. El problema es que él no se da cuenta de eso, está tan cegado de "amor"... Ugh, la odio.

Jungkook realmente se veía entristecido, decepcionado por aquello, y Yoongi por alguna razón, tuvo el impulso de consolarlo, decirle que todo estaría bien, que no se preocupara... Sin embargo no lo hizo, el ruido del microondas indicando que la comida ya estaba lista lo interrumpió.
Con cuidado, y sin quemarse, sacó el plato de ahí, entregándolo a Jungkook.

— P-puedes sentarte e-en el sofá, si quieres— Habló volviendo al salón.

— ¡Mmm! ¡Esto está delicioso, Yoongi!— Dijo Jungkook llevándose una cucharada a la boca. Podría jurar que era la comida más deliciosa que había probado en su vida.

— ¿Enserio? Oh... Gracias— Contestó con un ligero sonrojo en sus mejillas.

— Dime, ¿Cómo puedes cocinar tan bien?— Preguntó torpemente al estar comiendo.

— No lo sé... Uh, Jihyo, mi hermana, me enseñó, ella también cocina muy bien— Yoongi quiso decir que su madre era la que le había enseñado casi todo lo que sabía, pero sintió que no debía decirlo.

Mientras Jungkook degustaba la comida tan cómodamente, Yoongi aprovechó y continuó con la película que estaba viendo antes de que el pelinegro viniese. Obviamente, y como era de esperar, Jungkook rió al ver aquella película, insinuó que era para niños pequeños, cosa que enfureció a Yoongi y le quitó su plato de comida. Segundos después, Jungkook le estaba pidiendo perdón por aquello.

Enemigos|| KookGi (Pausada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora