Mi Alfa? (Rusmex)

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Ambos ya estando en la habitación no perdieron tiempo y se besaron con suavidad y necesidad buscando algo, Rusia buscaba algo de amor de aquéllos suaves labios, mientras que México realmente no sabía que buscaba.

Rusia paso sus manos por la cadera del mexicano buscando sacar toda aquélla ropa que ahora simplemente empezaba a estorbar más de lo que quisiera.

México solo se dejó hacer hasta que de un momento a otro ambos ya se concentran desnudos uno frente al otro nuevamente fundiéndose en los labios del otro, acariciándose.

Rusia se separó y le miró con atención, México solo cerró los ojos sintiendo poco después como Rusia restregó con suavidad su mejilla contra la suya en un pequeño acto de cariño.

Poco después de aquello Rusia empezó a repartir le besos hasta su pecho sintiendo como México pasaba sus manos por su espalda y cuello, realmente sentía un sentimiento muy confuso, realmente amaba a México, pero si el estar con el era obligarlo, no lo quería, era lo último que querría, así que solo calló aquél sentimiento aún cuándo sentía que moría muy por dentro.

Acarició la mejilla de México y le volvió a besar con aquélla necesidad mientras sus manos acariciaban y apretaban el cuerpo del Omega buscando marcarlo aunque fuera con sus manos, dejar una marca aunque pequeña fuera.

México solo gimió entré aquéllos besós sintiéndose raro, no esperaba aquél trató por el Ruso, no era malo, solo era distinto, se sentía bien, pero también, había algo que simplemente lo hacía sentirse mal.

Cómo pudo tomo a Rusia y le hizo mirarle, lo besó y apretó un poco aquéllos suaves cabellos sintiéndose por un momento en el paraíso, sintiendo a su Omega sollozar.

Rusia lo tomó de la cadera y cabellos buscando intensificar aquel beso metiendo su lengua saboreandolo.

No iba a negar que su Alfa se sentía terrible, aunque en un momento se sintió en la Gloria.

Al separarse México sólo jadeó y lo abrazó atacando con suavidad su cuello dándole pequeños besos y restregando su mejilla en el pecho del Ruso quién disfrutaba aquello en un cierto punto.

Lo tiro nuevamente a la cama y mordió uno de sus costados sacándole un gemido adolorido y exitado.

De cierta manera ambos buscaban amarse y dejarse en claro el dolor que se habían echó mutuamente, pero no se culpaban, ya no, ya todo estaba arreglado, o por lo menos estaba intentando arreglarlo.

Rusia~ ya~

Sollozo y cerró los ojos abrazándolo con piernas y brazos, Rusia solo soltó un pequeño gruñido y lamió su cuello, se acomodó y empezó a moverse escuchando al menor gemir y suspirar bajó suyo.

Ahh~ Rusia~

Esté sólo cerró los ojos buscando recordar algún otro momento con el menor, uno que no doliera tanto, sintió las manos de México en su mejilla, se obligó a mirarlo y soltó unas pequeñas lágrimas al verlo igual que el.

Su Alfa se sentía tan mal, aquéllo era una despedida? Por cuánto tiempo? Regresaría?

México cerró los ojos y lo abrazó buscando juntar sus labios en un suave besó el cuál subió de intensidad poco a poco al igual que las embestidas haciendo al Omega gemir y soltar pequeños suspiró mezclados con sollozos juntó a los del Ruso quién simplemente no lograba calmar a su Alfa quién no quería aceptar que el Omega o bueno, México, no se sentía cómodo.

Tenía su cariño, pero no su amor, pero no por eso se iba a rendir, no, el buscaría algo, pero por ahora, no veía solución alguna.

Salió de sus pensamientos al sentir los arañazos del mexicano en su espalda junto a un suave gemido entrecortado, había dado justo en aquél lugar.

México sólo busco dónde aferrarse, trataba de no pensar en nada, realmente quería disfrutar estar con el Ruso.

Unos minutos después Rusia besaba al mexicano mientras lo embestia con suavidad buscando retardar un poco aquél orgasmo que tanto estaba haciendo delirar al mexicano, metió su lengua en la boca ajena sintiendo la del menor hacerle pelea, al separarse bajó los besós a su cuello y pecho buscando distraerse para no querer marcarlo.
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Un tiempo después Rusia se mantenía acostado de lado abrazando a México mientras que esté escondía su cara en su pecho dándole pequeños besitos.

Rusia no se quejaba, era lindo, era algo que le hacía sentir menos mal.

Miró al mexicano y bajó una de sus manos para acariciar su mejilla, México le miró y sin pensarlo mucho lo beso.

Se estuvieron dando mimos y caricias llenas de cariño y amor durante todo el tiempo qué se mantuvieron despiertos hasta que México empezó a quedar dormido.

Duerme mi amor

No, aún no

Habló bajito mientras soltaba un pequeño bostezó y se abrazaba al pecho del Ruso quién solo sonreía de lado acariciando su espalda para arrullarlo.

No pasa nada si duermes

Si pasa, por eso no quiero

Que pasa si duermes?

México se quedó callado y se acurrucó más en el pecho del ruso, México no le quería decir, no lo iba a obligar así que solo se mantuvo acariciándolo y mimandolo hasta que ambos por fin quedaron dormidos.
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Al día siguiente Rusia despertó primero, miró a México y lo abrazo más, realmente tenía que dejarlo intentar hacer una vida?

Aquélla pregunta sonaba tan egoísta, pero es que encerio no podía imaginar a alguien más con al quién alguna vez pensó que podría tener una linda vida.

México poco a poco despertó, lo soltó con suavidad y se levantó para ir a bañarse, México despertó algo confuso, miró la puerta del baño abierta, era más que obvió que el ruso estaría haya, se levantó y se vistió para bajar y ver qué podía hacer de desayunar para ambos, todo se sentía raro.

Rusos salió de bañarse y vió la cama acomodada, suspiró y se sentó pensando en que hacer, se vistió, buscó algunas cosas, hizo unas llamadas y mandó algunos mensajes, estarían una semana más ahí, ya vería que podía hacer, tal vez, podría dejar a México salir a conocer gente.

Llevarlo a esos sitios raros dónde alguna vez lo quisieron llevar para que conociera gente y consiguiera una pareja, tal vez, no lo sabía, aún estaban intentando aceptar todo aquéllo.

México terminó de preparar el desayuno y subió mirando a Rusia boca abajo en la cama.

Rusia, ya está la comida

Ya voy

México solo soltó un pequeño "ajá" y se fue al comedor a esperarlo, lo miró bajar después de unos minutos y ambos empezaron a desayunar en silencio, que se podían decir? Realmente nada, por ahora, nada.