☾Capítulo 14☽

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—¿Qué? —le pregunto a Luz sin entender a lo que se refiere.

Ella termina de masticar su porción de pizza y observa para dónde acaba de irse J con la explicación de la presentación que ella acaba de darle. Los últimos quince minutos fueron de Luz explicándonos todo a J y a mí, de un J que para mi sorpresa escuchaba en silencio con mucha atención y bueno, yo estuve un tanto perdida en la galaxia tomando mi juguito en silencio, sintiendo de vez en cuando la mirada de J en mí. 

Cuando Luz terminó de explicarle, J no se despidió, solamente hizo un asentimiento de cabeza y se marchó sin más.

Obviamente que al irse tranquilamente caminando hacia la entrada pude percibir la mirada de todas las chicas del instituto en él. Incluyendo la de Estela.

En ese momento, ella me envió un mensaje preguntándome qué ocurría. Y que quería conocer a J. Yo solamente le respondí con un "luego te cuento" y ya.

—Es la frase de un libro que leí —me aclara—«Ella no sabía que el primer capítulo con él sería el final de la historia».

—Oh, ya veo —digo sin entender mientras tomo mi jugo en cajita y miro hacia otro lado, pensando que tal vez mi compañera está un tanto loca. Pero bueno, es común en mí conocer personas un tanto... peculiares.

Pero no me mal interpreten, lo peculiar es genial.

Lo común sí que es aburrido.

—Es una advertencia Bi. Ví como te trata y por lo que se ve, J es de la clase de gente de la que no hay que fiarse.

Presto atención a las palabras de la morena mientras tanto me sonríe.

—Ojo de lectora no se equivoca —aclara guiñandome un ojo.

Por un momento sopeso sus palabras en mi mente, mientras tanto desvío mí vista a la presentación del proyecto que ella armó para nosotros. Resta que el jueves luego del instituto terminemos de armar las piezas, las cuales debemos armar en la casa de J ya que acordamos que él las llevará temprano cuando vaya a su turno del instituto.

Como J va al turno matutino y es mucho más fuerte que nosotras, él será el encargado de llevar el proyecto el viernes por la mañana. Y como lamentablemente Luz trabaja en la mañana en la tienda de sus padres, ella debe estar en su trabajo y yo soy la única disponible para acompañar a J con el proyecto.

Lo peor de todo no es acompañar a J al instituto.

Sino que me tengo que levantar a las 07:00 am.

¿Quién en su sano juicio se despierta tan temprano?

La mañana está hecha para dormir y yo lo cumplo a rajatabla.

Dios...

¿Por qué a mí?

¿No había otra persona para que un dinosaurio haga pipí encima?

Dios mío, me parece que en la otra vida hice travesuras.

Bueno, ojalá haya robado un banco, si voy a ir al infierno entonces que sea por algo genial.

Si hay que ir al infierno, que sea por una buena travesura.

Por otro lado, Luz que fue la única que habló con J en el almuerzo, yo no pude hacer otra cosa que comer mi pizza dándole vueltas en la cabeza a lo que acaba de decir.

¿Le interesa Estela?

Digo, es genial... ¿Verdad?

Por mí mejor.

Malas IntencionesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora