Salí del baño con paso rápido cuando me di cuenta de que estaba en el aseo de hombres, pero antes volví a entrar, esta vez al de mujeres, para vaciar la vejiga.
Lo necesitaba más que nunca y supuse que había sido por el tamaño de...
—¿Todo bien, preciosa? —Ian me habló cuando salí a encontrarme con él en el pasillo de los aseos.
—Perfectamente. —Suspiré con alivio.
—Llegas un poco tarde. —Eso me confundió y me enseñó el reloj en su muñeca mientras se levantaba la manga de la chaqueta.
—¿¡Cómo son las cuatro y media ya!? —Exclamé. —Mierda, Abby me va a matar. —Me quejé mirando al techo y cerrando los ojos momentáneamente.
—Siempre me puedes echar la culpa a mí. —Comenzamos a caminar.
—No te preocupes, al menos estas consecuencias sí que las asumiré. —Suspiré. —Por cierto... —Murmuré.
—¿Te preocupa algo? —Asentí y agarró mi mano.
—Bueno... —Miré sus dedos entrelazados con los míos y me sentí reconfortada. —Se lo tendremos que decir también a Eleanor. —Detuvo su paso y se quedó mirándome.
—¿Por qué? —Levantó una ceja y lo imité atónita.
—¿Porque es tu esposa, tal vez? —Dije con ironía y él asintió como entendiendo a la vez que volvíamos a caminar, esta vez sin darnos la mano.
—Claro es que no lo sabes porque Blake tampoco lo sabe... —Murmuró para sí y me miró. —Ellie y yo nos separamos hace años. —Debido al shock detuve mi paso, él siguió un poco más, pero también se detuvo cuando vio que no lo seguía.
—¿Qué? —Asintió y me hizo un gesto con la mano para apurar el paso. Lo hice recordando que ya iba tarde a trabajar.
—Hace unos años, como 4 ó 5. Blake estaba empezando con todo el tema de la banda, estaba muy emocionado y estaba planeando irse con sus amigos, como ya sabes, así que no le dijimos nada para no desanimarlo. Quedamos en buenos términos como buenos amigos y decidimos seguir viviendo juntos, pero cada uno con su vida, ni siquiera dormimos en la misma habitación. —Me explicó.
—¿Y por qué no se lo han dicho aún? —Se encogió de hombros.
—Creemos, y sabemos, que no tiene la madurez suficiente para aceptarlo, da igual la edad que tenga. —Asentí sabiendo que tenía razón.
—¿Crees que lo sospecha y por eso trata a Eleanor de esa manera? —Negó.
—No, eso viene de siempre, de la adolescencia. Antes solía meterme en las discusiones, pero Ellie me echó la bronca y me dijo que no lo hiciera más, que ella podía defenderse sola y, aunque no me gusta nada la manera en la que Blake le habla, tengo que admitir que ella no se acobarda. —Me siguió explicando.
—Entiendo... —Aún así, miré sus dedos buscando una alianza, pero no tenía. No me había dado cuenta de eso. —Bueno, es una carga que me quito de encima. —Miré el anillo en mi mano derecha.
—Lo compró para ti. —Le miré. —Te lo quiso dar en la cena pero, con la discusión que tuvo con Blake, se le olvidó. —Sonrió con sinceridad.
—Lo acepté por la manera en la que me lo pidió... —Suspiré recordando. —No sé, fue algo como... ¿Maternal? —Dije con duda.
—¿Me preguntas a mí? —Reímos por lo bajo.
—Es que no recordaba lo que se sentía, pero ella revivió algo, me hizo sentir algo. No sé cómo explicarlo, fue una sensación cálida. —Hice una pequeña pausa rememorando. —Me recordó todas las veces en las que necesité a una madre y no la tuve. —Volví a mirar el anillo.
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El padre de mi novio. [Versión 2022] ✅
Chick-LitKatie, una joven de muchas deudas, mantiene una bonita relación duradera con Blake, quien es de alta clase. Tal vez el hecho de que su relación sea a distancia, que él haya cambiado su manera de tratarla o que su suegro tiene complejo de héroe es l...