[4] ILLICIT AFFAIRS, wizarding world

06 | sí, gilipollas

VI. YES, ASSHOLE

La situación entre Ron y Hermione se había vuelto tan tensa desde el día del partido, que ni Harry ni Allison soportaban estar en la misma habitación con ambos al mismo tiempo. Y ojalá las cosas hubieran quedado ahí, pero Allison debía convivir todas las noches con las miradas asesinas de Hermione y Lavender, los cuchicheos mal hablados y alguna que otra puya. Sin ir más lejos, los primeros días, Hermione se marchó a dormir a la habitación de Ginny.

Cuando Ron y Lavender hicieron oficial su relación, fue de mal en peor. Hermione se derrumbó una tarde en el mismo baño donde las habían encerrado con el troll en primero, trayéndole a Allison una sensación de déjà vu.

Las continuas muestras de afecto públicas del par de pulpos melosos no ayudaban nada. Las bocas de Ron y Lavender parecían dos ventosas que solo se separaban para coger aire y volver a pegarse, por no hablar de que traumatizaban a los niños de primero con algunos besos subidos de tono.

—¡Buscaos una habitación libre, por Merlín! —les gritó Allison, exasperada.

Era inútil intentar intentar hacer la tarea con esos dos en el sillón de al lado. Lavender se había sentado en el regazo de Ron y le besaba con tanto ímpetu que parecía que succionaría su boca en cualquier momento.

No le hicieron ni caso, como era de esperar, así que Allison subió a su cuarto, resignada. Dejó de malas maneras el libro de Encantamientos, tirándolo en la cama, y se dio cuenta de que se había dejado fuera el Mapa del Merodeador.

—Juro solemnemente que mis intenciones no son buenas.

En el pergamino comenzaron a aparecer todas las líneas que se unían, formando un mapa de los pasillos y las aulas del colegio. Las etiquetas con los nombres de todos los alumnos se iban haciendo legibles, y Allison.  Se recolocó el puente de las gafas de forma innecesaria, pues no se le habían bajado, y pasó el dedo por encima de los nombres. Vio a Harry en la biblioteca, con Hermione, y a un burruño de etiquetas, todas apelotonadas, en las cuales reconoció el nombre de Romilda Vane. Debían de ser las admiradoras de su hermano.

También vio el nombre de Lizzy caminando por el pasillo del tercer piso junto al de Cameron Nott, algo que le extrañó puesto que no se hablaba ya con el que fue su mejor amigo. De hecho, a Cameron últimamente solo se le veía con los Slytherin, por ejemplo, con Malfoy. La etiqueta del rubio estaba en el séptimo piso, junto a la de Crabbe y la de Goyle. Pero las dos últimas pronto abandonaron a la otra, marchándose en dirección a las mazmorras.

Allison frunció el ceño. Malfoy se había quedado solo, quieto, en medio del pasillo. No era un sitio muy concurrido, sobre todo a aquellas horas después de la cena.

No le dio tiempo a pensar antes de que sus impulsos le mandasen guardar el mapa, murmurando «Travesura realizada».

¿Qué se supone que voy a hacer? ¿Tropezarme con él y caer sobre su boca?