[4] ILLICIT AFFAIRS, wizarding world

12 | la peste del perdedor

XII. LOOSERS LURGY

El tiempo no pasó rápido los siguientes días en la enfermería, pero el sábado que iba a tener lugar el partido Gryffindor contra Hufflepuff llegó por fin.

Antes de bajar al campo de quidditch, Harry se pasó por la enfermería. Por mucho que Allison había insistido, madame Pomfrey no les había permitido ir a verlo, y eso que ella era muy persuasiva.

—¿Qué tal va McLaggen? —repitió Ron por tercera vez.

De tantos nervios acabaría explotando.

—Ya te lo he dicho —respondió Harry, sin perder la paciencia—, no querría quedármelo aunque fuera un jugador de talla mundial. No para de decirle a todo el mundo lo que tiene que hacer y se cree que jugaría mejor que los demás en cualquier posición. Estoy deseando librarme de él. Y hablando de librarse de pesados —añadió mientras se ponía en pie y cogía su Saeta de Fuego—, ¿quieres hacer el favor de no hacerte el dormido cuando Lavender viene a verte? Me está volviendo loco a mí también.

—¡Ves! Lo que yo te decía —saltó Allison, cruzándose de brazos.

—Oh. Sí, vale.

—Si ya no quieres salir con ella, díselo.

—Ya... Es que... no es tan fácil, ¿sabes?

—Eres un idiota —repuso Allison con una sonrisa sarcástica—. Y un cobarde. Oh, oh, Harry, ¿crees que podrás robar un bate y golpearle a McLaggen una bludger en la cabeza? Me harías muy feliz.

—Ojalá pudiera —suspiró Harry, y se echó la escoba al hombro—. Volveré después del partido.

Ron y Allison se dedicaron a escuchar los comentarios, tumbados en la misma camilla. Mientras esperaban a que comenzara, Allison trataba de acercarle el pie a la cara a Ron, porque se aburría, pero él siempre se apartaba a tiempo y después le ponía el suyo encima.

En medio de la batalla de patadas, una dulce y amplificada voz se escuchó:

—Allá va Smith, de Hufflepuff, con la quaffle. Smith hizo de comentarista en el último partido y Ginny Weasley chocó contra él, yo diría que a propósito, o al menos eso pareció. Smith se despachó a gusto con Gryffindor; espero que lo lamente ahora que tiene que jugar contra ellos... ¡Oh, mirad, ha perdido la quaffle! Se la ha arrebatado Ginny. Esta chica me cae bien, es muy simpática...

—¿Esa es Luna? —dijo Allison, extrañada de que la hubieran elegido como comentarista.

Ron asintió y se sentó, apartando al fin su maloliente calcetín de la nariz de la chica.