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___________COMENCEMOS___________

-¡Que haces aquí Hijo de Poseidón! - pregunto Zeus. Girando su cuerpo hacia el reconocido intruso que se estaba adentrando a sus aposentos.

-Querrás decir, hijo bastardo de Poseidón, tío- musito Nikolás con sarcasmo. Caminando con calma alrededor de la habitación y observándolo todo. Buscando secretos no contados.

-Independientemente de lo que mi hermano hizo, tu eres el menos culpable de todo- contesto Zeus.

Sentándose en un rincón lleno de esponjosos cojines y costosas telas exóticas. Le miro con ojos calmos.

-Lo sé, yo... lo siento- susurro. Su cabeza gacha en señal de arrepentimiento por su arrebato.

Sintió sus mejillas rojas de vergüenza. Zeus nunca se había portado mal con él, pero tendía a sacar las uñas cada que el nombre de su "papá" salía a colación.

-No pasa nada, yo te aprecio Niko, Jamás haría algo que te lastimarte- explico el dios al rubio. Sus ojos volviéndose cálidos y familiares cuando observaba la figura de Niko.

-Entonces, ¿qué te trae por aquí?

Volvió a preguntar Zeus. Su mirada interrogando silenciosamente al cómplice de su hijo Joaquín.

-Nada, solo pasaba de visita-respondió Mientras caminaba alrededor de la habitación y miraba todo a su paso.

Tratando de no perderse ni un detalle.

-Claro, como si eso fuera cierto-murmuro Zeus, rodando los ojos. Acción bastante fuera de lugar para su persona.

Sonriendo con un poco de picardía, volteo su rostro hacia Zeus y trato de darle la más inocente de sus sonrisas.

Y dándose la vuelta camino hacia su "tío". Sentándose en el piso, frente al dios. Abrazo sus piernas contra su pecho y coloco su mentón sobre sus rodillas. En todo momento mirando a Zeus.

-¿Entonces...?- volvió a insistir Zeus.

-Joaquin ya vuelve hoy- murmuro mirando detenidamente a su tío, para ver si este tenía una reacción a la noticia.

Pero este no movió ni un musculo en señal de incomodidad. En realidad una pequeña sonrisa se asomó por sus delgados labios y sus ojos tomaron una suavidad sorprendente.

-Lo sé, pronto estará aquí- musito Zeus. Su rostro luciendo tranquilo y con un tinte de alivio en sus pupilas.

- Ojalá que el retorno de Joaquin tranquilice a Deméter- volvió a hablar. Arrugando la nariz en señal de desaprobación.

-Ha estado causando estragos, ¿no es así?- Pregunto curioso.

-Si, más o menos-Pero ya hablé con ella. Su imprudencia estaba acabando con la cosecha de los humanos.
Literalmente estaba en una extrema sequía.

-Wow, no pensé que estuviera afectando tanto-dijo sorprendido el rubio.

-Algo así. Su intranquilidad estaba afectando todo tipo de plantío y se perdieron muchas cosechas,espero que ya haya puesto manos a la obra y comenzado a remediar todo lo que causo con su descuido- exclamo Zeus.

Su rostro luciendo cansado y algo fastidiado. Probablemente de tratar con la negligencia de la diosa.

-Bueno, al menos resolverá su desastre- le respondió.

-Sí, algo así, Joaquin servirá para mantenerla en sincronía- susurró Zeus.

-Aunque no entiendo por qué tanto alboroto por la desaparición de Joaquin - replicó el rubio. Inclinando su rostro, en señal de duda.

-Existen cosas que simplemente no pueden ser mencionadas,pero si, Deméter no debió de actuar así. Fue riesgoso e infantil-mascullo el dios.

-Secretos, secretos...- murmuro con diversión. Sus ojos analizando cada gesto de Zeus.

El dios le sonrió de forma divertida. Sus labios formando una sonrisa sarcástica, mientras movía la cabeza con desaprobación.

-La curiosidad mato al gato, sobrino- exclamo Zeus hacia Niko.

-Jajaja... muy gracioso, simplemente me gusta estar al tanto de todo- respondió el rubio con una sonrisa en su boca. Sus hombros encogiéndose de forma inocente. Pero sus ojos brillando en astucia.

Inferno's Garden || EmiliacoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora