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—Supe que por fin le diste el si a YoonGi, felicidades— dijo Jungkook con una sonrisa y Taehyung lo miró mal, antes de golpearlo con uno de sus libros.

—¡Oye! , ¿y eso porque fue?

—Por haberme abandonado.

—¡Pero si te hiciste su novio!

—No gracias a ti.

—De verdad que eres imposible, dime, ¿cómo es que YoonGi Hyung te tolera?

Taehyung sonrió

—Por qué me ama, aparte no me tolera, no tiene que hacerlo, yo lo trató con cariño.

—Que asco Taehyung, sus intimidades no tienes porque venir a estarmelas contando, esas te las puedes guardar para ti...¡Ouch!, ¡oye!, ¡quieres dejar de golpearme!

—¿Quieres dejar de decir estupideces?

—¡Pero si no dije nada!

—Acabas de mencionar que yo hice—Taehyung se sonrojó —cosas...con YoonGi.

—¿Y no es así?

Taehyung negó

—Oh.

—Quiero decir...—continuó Taehyung—claro que quiero hacerlo, pero aún no, más adelante...

—¿Más adelante?

—O no sé...

—Taehyung—Taehyung lo miró —eso va a ocurrir de manera natural, no pienses en ello, tampoco lo planees, sólo disfruta de tu relación con YoonGi, vive el momento, y cuando ocurra... Usa condon.

—Idiota.

—¿Qué?, ¿no piensas usarlo?

Taehyung sonrió en respuesta y Jungkook hizo una mueca

—Que asco.

Y eso fue suficiente para que ambos soltaran una carcajada, sintiéndose livianos y felices.

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—¿YoonGi?—Taehyung abrió la puerta de la habitación de YoonGi muy lentamente, buscando rastro del pálido de su novio dentro de ésta, y no teniendo éxito alguno.

Taehyung hizo un puchero con sus labios y luego se sento en la cama de YoonGi, donde pudo notar que las sábanas se encontraban completamente limpias y ordenadas.
Taehyung sonrió, su YoonGi siempre había sido así, tan limpio y ordenado con sus cosas.

—¿Tae? —Taehyung se giró en dirección a aquella tan conocida voz para el, su rostro iluminando se por completo al ver los hermosos orbes del hombre que amaba, quien lo veía extrañado mientras salía de aquella ducha.

—Yoonie—respondió Taehyung para levantarse y abrazarse a su pareja, importandole poco la semidesnudez del contrario—te extrañe.

YoonGi se sonrojo hasta las orejas y lo apartó un poco, sintiéndose tímido.

—Estoy semidesnudo, Tae.

Taehyung fue ahora consciente de aquello, y un leve rojo carmesí se instaló en sus mejillas antes de volver a abrazarse del contrario, y suspirar en su cuello.

—N-no importa—dejó un beso en su cuello y YoonGi suspiró —eres suave...

—¿Qué haces aquí?, ¿cómo entraste?—dijo esta vez YoonGi, alejándose para verlo a los ojos.

—Me robe tu llave de repuesto—admitió Taehyung avergonzado y YoonGi sonrió, complacido.

—¿Porqué hiciste eso?, bebé, tu solo tendrías que haberla pedido y yo te la habría dado.

—¿De verdad?

YoonGi asintió

—Mis planes a futuro son vivir junto a ti, cuando sea el momento.

—¿Cuándo será eso?

—Cuando tu así lo quieras—respondió, acariciando su rostro con su mano.

Taehyung cerró los ojos por unos momentos y luego los abrió, dedicandole una sonrisa coqueta.

—¿Y si te digo que ya lo quiero?

—¿Quieres vivir conmigo?—YoonGi miró alrededor—acabó de mudarme de con mis padres, no está muy ordenado y... —Taehyung lo calló, juntando sus labios en un suave pero profundo beso, el cual fue correspondido de inmediato por YoonGi, uno que se prolongó entre caricias, las cuales pasaron de ser un simple juego a algo más necesitado y carnal, donde la ropa ya no fue más necesaria, y la unión de ambos cuerpos se volvió una realidad, sellando así, sus palabras y promesas de amor que estaban seguros, cumplirían para siempre.



Tu eres mi destino || YoontaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora