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Todavía estaba intentando procesar lo que había pasado, se abrazaba a sí mismo buscando algún tipo de consuelo, sollozando en voz baja, reteniendo difícilmente su aroma, no podía creer lo que esos dos desgraciados le habían hecho.

— No... No les voy a dar la satisfacción... De verme derrotado... – intentó animarse mientras se secaba las lágrimas, pero, para su mala suerte, su movilidad se encontraba ciertamente limitada por el dolor que generaba cada mínimo movimiento. — Maldita sea...

Murmura a varias maldiciones mientras se intentaba mover, reteniendo algunos gritos de dolor, hasta finalmente rendirse y quedarse recostado en la cama.

— Puta vida de mierda... – mantuvo un brazo por encima de sus ojos, el cual fue removido con cuidado por alguien más, un Alfa, pero agradecía que no fuera ninguno de los dos depravados que lo habían dejado en ese estado, era un aroma distinto.

Cuando abrió los ojos, se encontró con un curioso castaño, con unos hermosos ojos azul hielo, observandolo directamente de manera curiosa, haciendo que, al darse cuenta de lo extraña que era la situación se asustara un poco y soltara de manera brusca el agarre para gruñir.

— ¿Y tú quién carajos eres? – bramo de manera algo paranoica, notando que el castaño ya se había enderezado por completo y le estaba dedicando una sonrisa.

— Un gusto, soy Bucky Barnes, perdón sí lo asusté Superior Tony Stark. – se presentó de manera cordial y respetuosa, sin abandonar esa sonrisa que se había firmado en sus labios.

— ¿Cómo mierda sabes quien soy?

— ¿Cómo no saber quién es? – a la vista de Tony, parecía encantador incluso un Omega, pero su olor y el hecho de que se encontrará allí, descartaba esa posibilidad, aunque sabía que ni debía dejarse llevar por las apariencias, bien podría ser otra trampa por parte del Capitán. — ¿Me puedo sentar?

Ante aquella pregunta, Tony fruncio levemente el ceño para luego levantar una ceja y asentir con cuidado, observando cómo Bucky se sentaba a los pies de la cama en el borde de esta. — ¿Qué haces aquí? ¿Te envió el Capitán?

— Uhm... Esto es vergonzoso... – la actitud de aquel Alfa era ciertamente sospechosa, pues se veía bastante calmado y un poco nervioso. — No me envió... Me citó aquí para... Asuntos personales...

— ¡Carajo! ¿¡Entonces los rumores de que el Capitán se acostaba con otro Alfa eran ciertos!?

— ¡SHHH! Baja la voz, aunque no lo creas te pueden escuchar... – el rostro del mayor tomó una tonalidad ciertamente rojiza mientras extendía un brazo haciéndole señales a Tony para que se callara o bajara la voz. — Y... No soy un Alfa cómo tal... Soy un Delta. – una mueca se formó en su rostros mientras pasaba una mano por su nuca nuevamente.

Toda esa situación tenía completamente confundido a Tony ¿un Delta? ¿No que ya estaban extintos?

— Sé lo que te estarás preguntando. – ¿Acaso también leía mentes? Vaya, por lo visto ser Delta tenía muchas ventajas. — No soy un Delta puro, soy un Delta sometido, es decir... Solía ser un Alfa, pero... Una cosa llevó a la otra y, cómo dice mi propia casta, fui "sometido" ehm... Es una larga historia.

Aquella tonalidad rojiza sé le hizo ciertamente tierna a Tony, lo cual logró que este esbozara una sonrisa. — Así que... Un Delta sometido ¿eh? – recibió un suave asentimiento por parte del castaño en frente suyo. — Espera... ¿Ustedes también pueden quedar marcados Y embarazadas, verdad?

— Uhm... Primero debemos quedar marcados y... Sinceramente, no entiendo como carajos funciona eso. – no pudo evitar soltar una risa ante su desconocimiento sobre su "propia casta" y, a decir verdad, su risa era bastante contagiosa, al menos para Tony. — ¿De verdad habían esos rumores? – Tony asintió de manera suave con una sonrisa.

— Debió haber sido raro y complicado para tí, ya sabes ese proceso... Antes que nada, una pregunta ¿siempre tuviste ese fuerte aroma a cítricos?

Bucky negó suavemente con la cabeza. — Antes olía a lmadre húmeda o quemada, dependía de mis emociones... Supongo que siempre estuve destinado a ser un Delta sometido... No lo sé.

Nuevamente, una mueca sé formó en aquel hermoso rostro, porque sí, era jodidamente hermoso, al menos a la vista de Tony, además, era el primero que no parecía querer someterlo o hacerlo menos, aunque, claro, él había pasado por eso.

— Hey... ¿Te puedo pedir un favor? – esta vez, fue Tony quien hizo una pequeña mueca avergonzado, pero fue interrumpido por el mayor

— Déjame adivinar, tienes una tina aquí y necesitas ayuda para que te lleve porque te duele moverte.

— Pero qué-

— Fui "el juguete" del capitán cuando estaba en Celo... Al día siguiente era muy doloroso y, como tal, era jodidamente doloroso en ese momento, en especial sus putas mordidas... – parecía que Bucky sé estaba hundiendo en su propio vacío, hasta que levantó la cabeza encontrándose con la triste mirada de Tony, quien aparentemente había pasado lo mismo el día anterior. — Perdón por eso... – aclaró su garganta y sé puso de pié al lado del menor. — ¿Tiene ropa debajo, Superior?

— Llámame Tony, y, no, pero puedo quedarme con las sabanas hasta llegar allí... – le dedicó una leve sonrisa al contrario, quien la correspondió.

— Primero dime donde está el baño, es mejor una tina de agua caliente.

Tony le dio las indicaciones necesarias para que el mayor pudiera llenar la tina de agua caliente, dejando a Tony completamente solo en aquella habitación, dejándolo sólo con sus pensamientos, dudas y sus ideas.

~ Fui "el juguete" del Capitán ~

Para ser sinceros, le daba algo de pena aquel chico, pues sabía lo Bestia qué era el capitán, y por el dolor que tenía, imaginaba que era aún más bestia cuando follaba y peor en su celo.

— Listo. – aquella voz sacó a Tony de sus pensamientos, haciendo que volviera a observar a aquel jóven de ojos azules, quién lo cargó a manera de princesa con mucho cuidado, depositandolo suavemente en la tina sin quitarle las sábanas, a pesar de todo, no quería irrespetarlo. — Tendrás que cambiar tus cobijas ¿tienes algunas por aquí?

En toda su vida, nunca se había sentido tan especial, tan querido, tan importante por más que hubiera vivido rodeado de lujos y privilegios, era una vida ciertamente vacía, pero ese momento había sido especial, por más que fuera un desconocido, nunca nadie ni nada lo había hecho sentir así, nadie lo había tratado tan bien. Por primera vez, sentía que alguien lo entendía, alguien lo comprendía, en especial desde que descubrió su casta, pues, claramente, aquel Delta sabía cual era, y no había hecho nada para burlarse o hacerlo menos.

— Ehm... ¿Tony?

En un arrebató por el remolino de emociones que aquel jóven había provocado en él, aprovechó la cercanía que tenían para poner una mano detrás de su nuca y atraerlo hacia él para besarlo, o más bien, chocar sus labios, hasta que, de una forma u otra, el chico correspondió, empezando un beso que expresaba lo comprendidos que se sentían.

Omega Dominante // Stony [Pausada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora