Insane ×Louis Tomlinson×

Capítulo dieciocho. Luciérnagas.

- Tranquila, Teph. Tienes que confiar en mí. - rió como si no fuera cierto, se burlaba de mí en mi cara. - No sé por qué eres tan paranóica.

Por fin aparcó detrás de un árbol y bajó.

- Ven, vamos. - invitó.

Bajé temerosa del auto y lo seguí entre el bosque. En sus manos llevaba algo, pero no lo distinguí bien. Estaba empezando a oscurecer.

- ¿Es- Estamos en el río?

El lugar era incluso mágico, había una pequeña cabaña aparentemente abandonada, pero sus colores pastel aún resaltaban entre la vieja y rajada madera.

- Efectivamente, es el Susquehanna river. Ven, hace frío.

Llevaba un cobertor y dos jugos... me enternecí un poco a ver las molestias que se había tomado. Y yo imaginándome alguna escena de terror.

Desconfío de todos, pero el quizás me ha dado razones para tenerle miedo.

¡Qué imaginación la mía!

- Ésto es muy lindo Louis, de verdad lo es. No me esperaba que fueras tan... empalagoso. - el rió y hasta se sonrojó levemente.

Nos sentamos a observar perfectamente la puesta del sol, justo como en esas películas idiotas que no me gustan.

Seguíamos platicando, le conté ciertas cosas de mí que no esperaba decirle a nadie que no fuera Harry, sinceramente. Y él finalmente habló de su familia.

- Tengo muchas hermanas. - dijo temeroso. - Y un hermano.

Fué todo lo que conseguí. También le conté de la forma en la que mis padres me han limitado toda mi vida.

Éstos días me he convertido en una persona abierta. Odio eso, pero se siente bien hablar de ésos temas con alguien que esté de tu lado.

Mi celular sonó interrumpiendo.

Numero desconocido.

- ¿Hola?

- Espero que no te espantes, bonita, Julissa me dió tu número.

- Liam, no, no te preocupes, ya me he acostumbrado a que ella haga pública mi vida. - Rodé los ojos y me encontré con el ceño fruncido de Louis.

- ¿Qué demonios quiere ese inepto? - alegó. Por lo que me levanté a hablar lejos de él.

- Escucha, voy a ir al grano, eres muy buena en la clase psicología y me pareces una persona muy agradable, no quiero ser molesto, pero ¿podrías ayudarme para el examen de la próxima semana? A demás, no quisiera que mi hermana causara problemas entre nosotros. ¿Podemos ser amigos, no?

Yo hacía todo lo posible por concentrarme en lo que Liam me decía, pero tenía a Louis detrás mía intentando escuchar mi conversación.

- Emm... Liam, no lo sé... yo... - dudé y recibi una última mirada molesta de Louis, antes de que se voleara y se parara frente a un árbol con sus brazos cruzados, desde allí tenia una vista perfecta de mí.

No quería rechazar a Liam porque no quería que pensara que yo traía algo en contra de él por la forma en la que su hermana me trataba. Decidí aceptar, de todas formas Louis y yo aún no somos nada. ¿O si?

- Está bien, el miércoles, supongo que podemos jutarnos.

Louis me vió una vez más sorprendido. Ahora tenía miedo de su reacción.

Qué perfecto momento para llamarme, Liam.

El castaño me agradeció mucho y luego se despidió.