La Italiana Juliantina g!p adapt

Capitulo 23

Narra Valentina

Hoy es el último día de escuela, antes de las vacaciones de navidad... qué emoción!

Cierro mi casillero con un resoplo de querer que se terminen las clases de una vez.

Entro a clases, me siento en el último asiento, pongo mi cabeza contra la mesa y cierro los ojos, abro los ojos cuando siento unas uñas acariciar mi nuca, levanto la cabeza y veo a Juls, con una sonrisa.

-Pero, qué? -hace su sonrisa más grande.

-Los profesores nos han dicho que podemos estar en las clases de los de un año mayor y he venido a esta para estar contigo -sonrió.

Se sienta en mi regazo, abrazando mi cuello y me da un beso de esquimal.

-En la escuela, me mimaras también? -susurro y asiente.

-Te puedo besar, mimar y tocar en todas partes y en donde yo quiera -susurra y se muerde el labio.

-Entonces, era verdad!... -una voz masculina nos interrumpe, miramos y vemos al Sergio -Me dejaste por...esta?... -me señala.

-Tienes algún problema? idiota! -le pregunto molesta y con una mueca de rabia y enfado.

-Calma amor, yo me encargo... -asiento y lo mira- Tienes algún problema idiota? Marisca golpea mujeres... -sonrió.

-No me has podido dejar por ella!... -me vuelve a señalar- Es una mujer! -lo miro.

-Y que, si soy una mujer?! Necesito acaso ser un hombre para recibir el amor de una mujer?! Maldito homófobo de mierda! -lo empujo haciendo que se caiga al suelo, miro a todos que nos miran expectantes y empiezan a aplaudir mi acción.

-Así se dice Valentina! -dice mi amiga Vero entre los aplausos y sonrió.

Sergio se levanta y todos empiezan a abuchearlo fuertemente, me mira con desprecio y sale de la clase junto a sus dos secuaces.

Me siento en mi silla con Juls encima de mí, abraza mi cuello con una sonrisa y besa mi sien.

-Me alteré... -digo y algunos sonríen.

-Se lo tenía merecido -dice una animadora- No sé, cómo pudiste estar con él -dice mirando a Juls la cual se encoge de hombros.

-Estaba cegada, no quería estar soltera y lo acepte pero no sentía nada por él -dice restándole importancia.

Me abraza, besa mi mejilla y sonríe.

-Lo hiciste bien mi amor lo pusiste en su sitio... -me susurra y con su nariz acaricia mi mejilla.

El profesor entra y básicamente nos dice que podemos hacer lo que queramos no hay clases hasta la próxima hora y hasta podemos pasear por la escuela.

-Vayamos a algún lugar... -me susurra Juls en el oído- Secreto... -muerde el lóbulo de mi oreja.

-Vamos, vamos...-tomo su mano y me levanto haciendo que se ría bajito.

Salen todos de la clase y algunos se quedan para dormir.

-A la sala de música? -pregunta coqueta.

-Vamos, vamos -digo y la sigo por los pasillos hasta llegar a la sala, miro por el cristal de la ventana de la puerta, y ya está una pareja besándose- Esta ocupada... -resopla molesta- Todavía nos quedan cuatro o cinco horas aquí, podemos buscar otro lugar -asiente y buscamos algún lugar vació.

Llevamos como unos diez minutos buscando un sitio y no encontramos nada, subimos al segundo piso y Juls aprieta mi mano.

-El cuarto del conserje... -nos acercamos a la puerta.