ONE SHOTS/ANIME

🖤 KALEGO NABERIUS 🖤

Anime: Mairimashita iruma-kun

Amo este personaje de verdad, es tan hermoso

¿Alguien disfruta ver Mairimashita iruma-kun? Por qué yo si 💖

( ꈍᴗꈍ)

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–¡Buenos días delicuentes! –ese hermoso saludo era nadamás y nada menos que de mi profesor favorito, kalego.

–¡Buenas días kalego! –me pare de mi asiento y corrí hacia el para colgarme de su cuello como cada mañana lo hacía.

Mis compañeros comenzaron a hacer burlas al respecto como siempre.

–Te eh dicho que no hagas eso. –kalego me alejo de una manera brusca y con su mano apretó mi rostro, si, era doloroso pero a la vez me encantaba que me tratara así. –si vuelves a hacer lo mismo haré que te echen de la escuela. –sentenció kalego.

–Es.. está bien. –kalego me soltó y me ví obligada a regresar a mi asiento.

–Ya que _____, por fin a entendido que no debe molestarme, continuaré con la clase.

–_____ está enamorada del profesor kalego. –grito clara haciéndome sonrojar y a kalego haciéndolo explotar de coraje. –Y también se quiere...

–¡shhh, clara! –me levanté y corri a cubrirle la boca, por qué ella estaba más que dispuesta a decirle que quería casarme con el. 

–¡Basta ya! –grito histérico kalego. –es mejor que pares con esa tontería de una vez. –me miro furioso y por primera vez puede notar el odio en sus ojos.

Después de ver su reacción comprendí que por más que intentará y que por más que lo amara el no me haría caso. Menos si descubriera mi secreto.

–Comprendo, no volverá a suceder. –le contesté intentando sonar lo más tranquila posible. No quería que por nada del mundo se diera cuenta de lo mal que me hicieron sentir sus palabras. De verdad me dolieron, tanto que quería llorar. Mi amor por kalego era todo menos una tontería.

–Entonces vuelve a tu asiento. –ordenó.

Baje la mirada y descubri la boca de clara. –gracias clara. –le dije al oído y acaricie su cabeza. Después volví a mi lugar.

Clara es mi mejor amiga, siempre queriendo ayudar. Pero a su manera.

Todo siguió con normalidad, kalego continúo la clase, trate de no mirarlo ni de reojo pero fallé. Mi profesor me traía loca.

–¡KALEGO! –la voz grave del profesor baram se hizo presente en la enorme aula. Las puertas enormes se abrieron y el entró dando pasos agigantados. Mis compañeros se levantaron asustados y se arrinconaron en una esquina.

–¿Por qué entras así? –cuestiono kalego.

–Necesito que me prestes a tu alumna. –giro la cabeza como búho y fijo la mirada en mi. –quiero hablar con ella.

–Lo siento baram, tendrá que ser después de clase. –hablo kalego.

–No, necesita ser ahora, no creo aguantar más. –baram expuso esos enormes tentáculos y me atrapó con ellos.