– ¿Todo bien? – mi mamá se sentó a mi lado. – ¿Te sientes bien?– Si, todo está perfecto. – Terminé de amamantar a Kayla y dejé la cobija encima de la cama. – ¿Por qué?
– Últimamente estas algo rara y eso lo notamos todos. – quise reírme por su cara de preocupación.
– Estoy bien. – coloqué a mi hija en mi pecho para sacarle el aire – Sabes que esto de ser madre es nuevo para mi y aún me estoy acostumbrando.
– Lo sé, pero yo me refería a que has estado así porque Blake no está contigo. – lo pensé mejor.
– Mamá no exageres. – rodé los ojos – El fortachón está en cosas de negocios. Si, lo extraño y mucho, pero falta poco para que regrese. – No se alteren, Blake lleva un par de semanas fuera de Nueva York junto con Cole y Eddy. – Ha sido difícil, claro está, pero esto es para mejorar nuestro futuro.
– ¿A que te refieres? – preguntó confundida.
– Tengo esta semana para irme a París, mamá. – abrió los ojos sorprendida y sabia que iba a protestar – No me puedes decir nada, porque ese plan ha estado siempre. Blake me dijo que se irá conmigo, pero que antes tiene que resolver varios asuntos y que con eso los dos saldríamos ganando. – sonreí – Nadie dejará sus sueños por nadie.
– Si recuerdo, pero creí que se quedarían.
– No, bueno, al principio queríamos quedarnos, al menos hasta que Kayla cumpliera un año, pero lo descartamos enseguida. – sonreí al ver a mi pequeña. Tiene tan solo siete meses y es mi mayor felicidad. – Aparte de que Athena ha insistido mucho con eso de los cursos y no debo de fallarle. Menos cuando ella me esta dando todo el apoyo del mundo respecto a mi hija.
– ¿Irán Allison y Quinn? – negué con la cabeza.
– No, ellas se quedarán al menos por ahora. Blake y yo tenemos el privilegio de poder congeniar nuestros trabajos, pero no sabría decir de ellos.
– Tienes razón.
Mi amiga Allison ya tiene a su pequeño Owen de tan solo un año y es la más feliz del mundo. Quinn no piensa en bebés, ni tampoco Cole, así que ellos solo disfrutan de su vida y están consientes de que ya llegará su momento. Tal vez no serán los siguientes en tener hijos, pero serán los primeros en casarse y eso es fantástico. Lucy y Eddy son felices y están en las mismas que Chris y Vianey. O sea que solo disfrutan su momento y a pesar de que algunas veces tienen problemas están las ganas y el valor de enfrentar lo que sea.
Si que nuestras vidas han cambiado muchísimo y de eso estamos conscientes.
– Si irán a la boda de Quinn y Cole ¿Cierto? – recosté a Kayla en su sillita mecedora para que se entretenga.
– Si, claro que iremos. – doblaba un par de prendas de mi hija – Por cierto, ¿Ustedes no están pensando en el matrimonio? – casi me atraganto.
– Por favor, ya vivimos juntos y eso es lo que importa. – reí.
– No estaba bromeando, hija. – alzó la ceja.
– Ya se que no lo haces, pero debes de saber que Blake y yo no somos muy comunes. – expliqué – Al inicio si éramos creyentes del matrimonio y de hecho teníamos deseos de casarnos, pero ahora lo único que importa es amarnos y prácticamente parecemos casados. – me encogí de hombros. – Tal vez hagamos una pequeña ceremonia y nada más.
– Ok, con una pequeña ceremonia me conformo. – reímos. – Bien, pues te dejo, porque tu padre se pondrá como loco si no llegó a casa. – rodé los ojos.
ESTÁS LEYENDO
Las cosas cambian (Terminada)
Novela Juvenil- ¿Hay otro chico en mente Peyton? - preguntó curioso. - Porque siento que hay algo que me ocultas. - ¿Qué dices? - reí - No, no hay nadie más... - Peyton... - Ok, si, hay otro hombre - rodé los ojos - yo odio a este sujeto desd...