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–      ¿Por qué querías verme ahora? – me sirvió una taza de café. Después de llamarle me recogió para llevarme a su departamento. Nos sentamos en la pequeña mesa de la cocina para charlar.

–      No tengo a nadie con quien hablar – lo miré.

–      ¿De que quieres hablar, cariño? Sabes que no soy bueno dando consejos como mamá – reímos – pero siempre trató de apoyarlos.

–      Lo sé, se que igual tengo a mis amigos, pero en estos momentos no quiero decirles nada – suspiré – mi cabeza está hecha trizas, papá.

–      ¿Es por la escuela? – reí.

–      Ojalá fuera por eso, pero no.

–      ¿Es un tema de chicos? – dijo asustado, reí más fuerte.

–      Si papá es un tema de chicos – el suspiró, aunque se veía asustado.

–      Esta bien, estoy listo. – mi padre se volvió a sentar, como preparándose para la guerra.

–      Ni siquiera es tan grave papá – reímos – no exageras.

–      Dime que pasa. – bebió su café.

–      Antes que eso – suspiré – siento que mi vida esta tan desordenada que he llorado de la frustración papá y sabes que jamás me ha sucedido algo así. Gracias a un chico que creí que valía la pena, le estoy mintiendo de una manera exagerada a mis amigas y ese chico que creí perfecto me decepciono este día una vez más.

–      ¿Cómo conociste a ese chico?

–      En una fiesta, de hecho, Chris me lo presento, ya que van juntos a clases – mojé mis labios – nos besamos y sentí la conexión con el. – mi padre sonríe – Yo creí que iba a tener una historia hermosa como mamá y tu, pero es todo lo contrario.– hice una pausa para respirar – Resulta que a los dos días de prometerme todo, comenzó a salir con otra chica y lo odié mucho papá, porque me daba rabia verlo con esa chica, tanto que hacia cosas malas solo para molestarlos. – suspiré – Me arrepiento mucho, porque fui una inmadura y creo que ahora mismo lo estoy pagando y seguiré así toda mi vida.

–      Hija no seas exagerada. – soltó un par de risas – Te diré una cosa, si tú te sientes traicionada por esa persona, si te decepciono, si ya no te provoca sensaciones extrañas que jamás creíste sentir con alguien, si todo eso termina es porque jamás hubo una conexión, solo una obsesión por creer que algo ahí surgía. – comentó tranquilamente – Cuando sientes una conexión con una persona eso jamás desaparece, esa persona jamás te decepcionará, sentirás hasta malditos fuegos artificiales con tan solo verlo. – recordé a Blake – Si eso dejaste de sentir con Jonathan, entonces el no es el indicado.

–      Tienes razón, pero soy una necia padre y sigo insistiendo que el es el hombre correcto para mí – suspiré – se que soy una estúpida porque todos mis amigos me han dicho que el no me merece y ahora yo les he estado mintiendo durante muchos días que Jonathan no me interesa más y nos vemos a escondidas.

–      Eso es grave hija, porque una amistad también se basa en la confianza ¿Sabes que problemas habrá cuando se enteren? Y más cuando unos son tus amigos de la infancia. – hizo una mueca.

–      Lo sé – hice puchero – se enojarán demasiado conmigo y mas cuando me di cuenta de la clase de hombre que es.

–      ¿Qué te hizo Jonathan? ¿Es necesario desaparecerlo? – reí.

Las cosas cambian (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora