𝓓𝓸𝓷𝓬𝓮𝓵 | ɴᴀᴍᴊɪɴ +18

10

A la mañana siguiente Jin se encontraba afuera de su casa esperando a que Namjoon llegara por el.

Mientras sostenía la bolsa de regalo el rugir de aquella motocicleta se escuchaba acercarse. 

— Buenos días guapo.

— Buenos días Joonie.

Namjoon le entregó un casco a su novio y este subió a la moto para así tomar marcha hacia la escuela, no sin antes darle un corto beso en los labios al peli azul.

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En cuanto llegaron a la escuela Namjoon estacionó dónde siempre su motocicleta, se quitó el casco a la par que Jin lo hizo.

— Andando— dijo Namjoon.

Jin y Namjoon caminaron los pocos pasos que quedaban para la puerta de la escuela.

— ¿Y que tal ayer con Hye-jin?.

— Bien, todo tranquilo, tenía un rato que no pasaba tanto tiempo con ella así que nos pusimos al corriente en algunas cosas.

—¿Al corriente?— interrogó Nam.

— Si, uno que otro chisme y cosas de su familia.

— Ah, así que mientras estudiaban se contaron todos los chismes que tenían.

— Si, lo normal.

— ¿Y que más hicieron?

— ¿Por qué tanto interés?.

— No, solo tenía curiosidad.

— ¿Estás seguro?, No irás a tener celos de Hye-jin ¿Verdad?.

— No, no, no, yo sé que ustedes son amigos era mera curiosidad.

— Tranquilo, está bien solo estaba jugando, yo sé que entiendes mi amistad con Hye-jin.

— Si... Entonces la pasaron bien.

— Si.

Namjoon acompañó a Jin a dejar la bolsa de regalo en su casillero y de esta manera esconder la sorpresa de Hye-jin.

— ¿Que clase tienes?

— Matemáticas— contestó el menor.— ¿Y tú?

— Química orgánica dos.

— Suena a qué la vas a pasar algún aburrido.

— Mhe, me gusta la química.

— Ah, si, olvidaba que eres un genio en cualquier materia— dijo algo burlón el menor de los dos.

— Si, así es— Namjoon sonrió y se inclinó para darle un beso a Jin.

— Dime qué no sabes hacer— Jin miro fijamente aquéllos ojos y regreso a los labios de su mayor.

El rubio retomó aquel beso haciéndolo más largo, este recargo su espalda en los casilleros y dejo que Namjoon tomara el control de su cuerpo.

Por su parte Namjoon coloco una de sus manos en la cintura del menor y la otra en su mejilla, aquel ardiente beso le pedía más, pues la calidez de los labios de Jin, su aroma y el calor que emanaba su cuerpo lo hacía necesitar más.

— Jin... — dijo por lo bajo mientras recuperaba el aliento— Estamos en la escuela y falta poco para que más gente entre a la escuela.

— Entonces hay que darnos prisa.

Al escuchar esto, Namjoon tomo la mano de Seokjin y camino por el pasillo hasta llegar a los baños, entro a estos cerró la puerta y puso a Jin sobre los lavabos lo más rápido que pudo.