Naruto x Shisune

CAP 4

Hola, estoy de regreso después de haber desaparecido casi o más de un año, pero para ser sincero no hay excusas......

Pushalee play y que se encienda está miarda!!!

Otro mes a pasado y los problemas que ha tenido que pasar Shizune han sido muchos, primero que nada regreso a vivir con Tsunade para no estar sola por las noches, igual los mareos y malestares continuaron, Tsunade tuvo algo que decir al respecto ya que le daba gracia el rostro de Shizune por las mañanas. Shizune se encontraba de un humor cambiante pero entre todas esas emociones la que más abundaba era la felicidad, esa felicidad y alegría de ser madre primeriza, pero en segundo nivel eran los nervios e incertidumbre de que pasaría con su hijo o hija, Naruto lo ¿aceptaría? ¿Lo negaría? ¿O se desmayara de la impresión?.

Fue sacada de sus pensamientos al oír a Tsunade en la entrada.

Tsunade: ¿Shizune?.. ¿Está todo bien ahí?

Shizune solo sonríe y se levanta de la cama recordando como todo cambio de un momento para otro, y solo miro a la ventana para ver el sol en sus primeros rayos de luz y esbozar una gran sonrisa pensando en el rubio cabeza hueca, cuando escucha otro golpe en la puerta.

Shizune: ya voy Tsunade-sama.

En un bosque muy lejano al pueblo de Konoha se puede ver a un peliblanco agitado con tierra en su vestimenta y rostro mientras un rubio de marcas como bigotes en el rostro tirado en el suelo tratando de recuperar el aliento por un combate de práctica, pero eso no era lo inusual, lo inusual eran los 20 rubios de mejillas marcadas leyendo y estudiando muchos pergaminos y otros 10 rubios practican con unas armas, hasta que todos rubios le gritan al peliblanco.

Rubios: ¡EROSENNIN, TENEMOS HAMBRE!

Jiraiya: maldito gaki, disipa tus clones, no los voy a volver a alimentar a todos, a ese paso nos quedaremos sin fondos.

Naruto: No, nos quedaremos sin fondos por tus constantes visitas a los barrios rojos.

Jiraiya: ya guarda silencio y ya te dije que con mi investigación no te involucres.

Jiraiya sonaba cansado y fastidiado que su alumno no entendiera el punto de su investigación.

Naruto: TSK... Lo que digas viejo pervertido.

Naruto al terminar de hablar levanta el signo del carnero, pero Jiraiya al ver esto trato de detenerlo pero fue demasiado tarde Naruto disipó todos los clones lo cual tuvo el resultado esperado, un Naruto desmayado por la influencia de memorias masivas. Jiraiya se palmea la frente negando con la cabeza ante la estupidez de su pupilo.

Jiraiya: pensé que ya habíamos frenado su estupidez, pero eso está arraigado hasta el hueso, impulsivo cómo su madre, kushina se parece tanto a ti que no es gracioso.

Pensó el sannin con cierta alegría en el corazón al pensar en la difunta esposa de su alumno.

De regreso a la aldea.

Ha pasado otra semana y en la oficina de la Hokage se encontraban la Quinta Hokage y su secretaria leyendo el papeleo y cuando de la nada en medio de la sala aparece una pequeña nube de humo que al disiparce se ve un pequeño sapo naranja con azul y chaleco.

Tsunade: Hola pequeño, ¿que me traes?.

Sapo: Hola Hokage sama, mi nombre es Gamakishi, y el hermano Naruto me pidió que entregará el reporte y una carta, igual comento que usted tendría unos dulces para mí.

Tsunade suspira con molestia los sapos eran codiciosos, no como la dulce Katsuyu que no pedía nada y siempre estaba gustosa de ayudar.

Tsunade: Bien, veré qué tengo aquí dame los recados.