Coexistence

10 Cursed

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                Logró despertarse con los rayos del sol que se infiltraban por las cortinas de la ventana. Sus ojos, como dos rubíes se enfocaron en la espalda desnuda a su lado.

Piel morena y fina, con su cabellera plateada adornándole su cabeza.

Yuto se acercó, para abrazarle y darle un pequeño beso al hombro de su acompañante. Nunca pensó que esto le sucedería a él, enamorarse de alguien de su mismo sexo y alguien tan cercano como lo era Jiro.

Un Vampiro Bisexual, ¿quién lo diría?

En pleno siglo XXI, su orientación sexual no era bien vista para sus mayores. Su padre incluído.

— Jiro — le dijo, besándole la oreja — Debes levantarte ya.

Sakuma se dio la vuelta, cansado. Habían pasado la noche conversando de varias cosas, para quedarse dormidos en los brazos del otro.

— Dame cinco minutos más.

El heredero Kido sonrió de lado.

— Te daré diéz porque eres lindo. — se levantó de la cama y comenzó a arreglar su traje de gala, para la reunión con los Mayores.

— ¿Debo de ir esta vez o puedo asistir a clases?

— Solo necesitan de nosotros, tú y los guardianes tienen otras órdenes.

Se acercó a su pareja y le besó la frente. El moreno le tomó el rostro para darle un sutíl beso en los labios.

— Te quiero, Yuto.

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             Hiroto se encaminaba al gran salón para reunirse con los Mayores cuando se encontró con ciertos licántropos.

— ¡Kiyama!

El pelirrojo sonrió a las tres personas frente a él, ofreciéndoles caminar con ellos al gran salón donde se llevaría a cabo la reunión.

— ¿Has oído? Midorikawa ha regresado. — dijo Reina, con un leve sonrojo en sus mejillas.

— Sí, son buenas noticias.

— Sé lo cercanos que son.— siguió conversando — Y Genda lo ha extrañado mucho también.

El castaño rodó los ojos. Le parecía patético que la chica bajara la guardia tan fácilmente con el piel pálida que iba junto a ellos.

— Iré a buscar a los Fubuki, ustedes adelántense — les dijo, harto de la actitud de la chica.

— Reina, ¿cómo has estado? — preguntó el pelirrojo, menos tenso. La presencia del otro chico no le gustaba en lo absoluto, pero con la peli-azul era muy diferente se sentía cómodo con ella.