Pasado

109 7 14
                                    

×Pov omnisciente×

Lunes
8:46 pm.
Departamento de Gavin.

Los días desde el viernes hasta el Lunes pasaron rápidos, pese a que el androide no estaba todos los días ni todo el día en el departamento del humano se aseguraba de que este tomara sus pastillas a la hora, de que comiera de manera sana e hiciera pequeños ejercicios para recuperar la fuerza que había perdido en ese tiempo sin cuidarse. Se notaba que no eran fechas buenas para el detective, no sonreía, comía por obligación y las ojeras debajo de sus ojos habían disminuido lo mínimo. Si bien esto a Keneth le preocupaba no haría nada más ya que había mejorado considerablemente el estado de Gavin, tanto así que ese día había trabajado, no por muchas horas, pero lo había hecho, y ahora se encontraban en la puerta conversando sobre un idiota que había ido a poner una denuncia haciéndose el chulito.

— Gracias por todo... — dijo Gavin mirando hacia abajo notando que una carta se asomaba por debajo de la puerta — mierda... — desvió la mirada hacia un lado y habló desganado — deberías irte ahora... no me esperes mañana, y tampoco el miércoles... ya hable con Fowler y no hay prob- — se detuvo de hablar al sentir unos brazos rodeándole. El androide le estaba abrazando.

— No estás solo — susurro bajito — no necesitas estarlo — volvió a hablarle apretando su agarre, esas palabras fueron suficientes para que el humano comenzara a llorar, sin decir nada Gavin subió sus brazos hasta la espalda del más alto y apretó sus puños llorando más fuerte haciendo pequeños gemidos. Estuvieron así por algunos minutos más hasta que Keneth dejo de sentir los pequeños quejidos del humano, pero aun así no le soltó hasta que él lo hiciera primero y tuvieron que pasar 7 minutos más para eso.

— Lo siento... — dijo sorbiendo la nariz — ¿por que carajos me dices esas cosas si sabes como me pongo??? — apoyó su cabeza en el pecho del androide y volvió a hablar pero esta vez más bajito — es como si quisieras verme llorar... el morbos eres ahora hehe — rio bajito y espero a que su compañero hablara sin embargo eso nunca pasó, por lo que se alejó y le miro, este estaba mirando el papel que se encontraba escondido entre su pie y la puerta — por eso te pedía que te fueras, ya se lo que es y no quiero que estés aquí para cuando la abra... —

— ¿No quiere contarme lo que es? — preguntó sosteniendo los brazos del humano de forma inconsciente.

— Son cosas feas del pasado... aun no lo supero ni yo así que decirte a ti seria ridículo —

— ¿Me promete que estará bien? —

— No te puedo prometer nada... aun es duro para mi.. es duro incluso el que me sigan enviando la carta así que imagínate abrirla ... no te puedo prometer llegar ileso el jueves —

— Si ya sabe lo que contiene la carta ¿por qué la sigue leyendo si le hace tanto daño? —

— Me sentiría... sucio, por así decirlo —

—No me siento bien dejándole solo después de saber el daño que le puede causar lo que dice dentro —

— Y ¿Qué quieres hacer? —

— Bueno... me gustaría que me diera permiso para quedarme con usted pero lo veo complicado, así que... — realmente no tenía nada planeado así que le dijo lo primero que le venía a la mente — me quedo aquí afuera y si llego a enterarme de que usted corre peligro entrare... —

— Jaja... no lo estarás diciendo en serio... — el silencio otorga, y el androide estaba muy callado — no.. claro que no! no vas a estar afuera como si fueras un perro... además eso de estar atento es muy de psicópata... no... — quitó suavemente las manos del androide y se agacho para recoger la carta del suelo, se giró mirando los ojos del androide — muchas gracias Keneth pero... solo vete y ya está ¿okey? —

Hundido En La Oscuridad De Mi OcéanoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora