ᴍʏ ᴡᴏʟғ |
Otra Cullen llegó a Forks, más bien, Hale.
Alaia Elizabeth Hale, es hija adoptiva de Rosalie y Emmet Cullen.
Debido a los problemas que cierta humana trajo a su familia, Alaia decide regresar a Forks para ayudarlos con la cacería de una...
La manada al enterarse que la Impronta de Paul iba mejorando, se alegraron he insistieron al moreno para que la lleve a la reserva, pero este se negó diciendo que tenían que seguir haciéndole análisis y que prefería dejarla descansar.
En estos momentos se encontraban en el hospital, Alaia estaba sobre una camilla junto a Paul, que tomaba su mano. Sus padres y Carlisle conversaban fuera. Hace dos días la castaña tuvo un mareo muy fuerte y se desmayo, desde entonces se encuentra en el hospital siendo vigilada.
— No entiendo porque nunca me dicen nada.— Alaia soltó un suspiro mirando hacia el techo.
— Tranquila amor, ellos...— antes de que Paul continúe hablando, la puerta se abrió dejando ver al Doctor Cullen junto a Rosalie y Emmett, los tres tenían una sonrisa en su rostro mirando a la castaña.
— ¿Qué ocurre? ¿Estoy bien?— pregunto de inmediato Alaia y Rosalie la abrazo.
— Esto es sorprendente Alaia, mejoraste rápidamente.— dijo Carlisle.
— Pero, ¿Cómo? Hace unos días tenia temblores y mareos.
— Aún no lo sabemos, solo mejoraste y es algo bueno pero seguirás tomando los medicamentos. No hay que arriesgarnos.— Alaia sonrió mirando a Paul y esté beso su mejilla también con una sonrisa.
— Hey, sin muestras de afecto, estoy presente.— gruño Emmett.
—¿Entonces ya puedo irme? — habló la menor ignorando el comentario de su padre.
— Si, pero nada de hacer fuerza.— Carlisle miro a Rosalie y a Emmett, ambos asintieron aunque este ultimo algo dudoso.— Seria bueno que salgas un poco, a caminar y tomar un poco de aire fresco, Alice dijo que estos días estarán mas nublado de lo usual así que no habrá problema.
— Aunque debes llevar la capa, solo por si acaso.— agregó Emmett mirando fijamente a Paul, quien asintió.
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—¿Estas segura? Si no te sentís bien podemos cancelar todo y nos quedamos aquí.— Paul pregunto por cuarta vez mientras Alaia se cambiaba en el baño.
Desde lo ocurrido con Paul y el Neófito, de alguna forma, Leah consiguió el numero de Alaia y se estuvieron comunicando, — todo esto a escondidas del moreno por el accidente en la playa—, se dieron cuenta que tienen muchas cosas en común y se volvieron amigas rápidamente.
Pasaron dos días desde que le dieron el alta a la castaña y Leah al enterarse inmediatamente la invito, por petición de Emily, para que valla a la reserva y encantada, Alaia acepto. Raro, según ella, sus padres aceptaron sin protestar.
— Amor, ya te dije que iremos, además extraño a Leah.
— Aún no entiendo, cuando se hicieron tan amigas ustedes dos.— pregunto confundido y desde el baño se escucho la risa de Alaia, segundos después se abrió la puerta y mientras ella acomodaba su peinado, Paul la examino con la mirada.—Wow... Hermosa, como siempre.—dijo para acercarse y besarla.
