𝓢𝓮𝓲𝓼

1.4K 155 35
                                    




Los tres omegas habían llegado a la casa de el pecoso sin previo aviso, Jisung preguntó por su pequeño y terminó encerrándose en la habitación con él, Seungmin tocaba levemente la puerta esperando que este la abriese mientras el menor de todos se encontraba tomando asiento en el sofá del mayor.

—¿Qué fue lo que pasó?

Sus ojos se posaron en el castaño que salía de su cocina con una taza caliente de café brindándosela al pelirrojo.

—Seung, ahí hay una taza para ti y Jisung...—el omega asintió mientras seguía tocando—. ¿Podrías contarme?

JeongIn tomó la taza mientras daba un pequeño sorbo dejando que el líquido quemé su lengua, paladar y garganta al tenerlo en su boca, se quejó.

—Hubieras esperado a que se enfríe un poco...—regañó el de pecas.

—Da igual...—susurró—. ¿Quieres saber que paso? —asintió—. Nos encontramos con tu jefe y su amigo el idiota.

Félix arrugó el ceño.

—¿Mi jefe? —el menor asintió—. ¿Quién es mi jefe?

—Hwang Hyunjin.

El castaño pestañeo rápidamente y negó ante la idea de Hyunjin como su jefe, es decir, ante los demás parecía ser así pero aquel alfa alto y rubio actuaba como todo menos como uno.

—Bueno ese y el idiota de su amigo...—dio otro sorbo a su café.

—¿El idiota de...?

Sus ojos se abrieron en grande y volteó justo cuando la puerta de la habitación donde había ingresado el de cabellos naranja fue abierta, se levantó de golpe y corrió hacía su amigo empujando al más alto.

—Dios Sunggie...

Sintió las lágrimas del chico bañar su bata y empezó a dejar pequeñas caricias en la espalda de este.

—Sung, trata de calmarte, Jungwon puede sentir que estas mal y levantarse...—susurró el primo dejando caricias en su cabello—. Sabes que ese pequeño alfa se preocupa mucho por ti.

Jisung levantó su mirada dejando pequeños hipidos escapar de sus labios, asintió mientras un pequeño puchero se formaba en sus labios.

—¿Quieres un poco de café? —habló el de pecas en tono bajo.

Asintió levemente mientras salía de la habitación cerrando la puerta tras él.

—Vamos...—le sonrío el más alto.

Los tres omegas salieron nuevamente hacía la sala del chico castaño, Jisung tomo asiento en el mueble más pequeño mientras abrazaba sus piernas, Seungmin se lanzó junto a su amigo mientras el omega faltante traía los cafés con él. El lugar quedó en silencio, nadie se disponía a hablar hasta que un fuerte suspiro por parte del mayor de todos les hizo dar un respingo.

—¿Por qué solo sabe hacerme llorar? —murmuró.

—Porque es un imbécil...—habló Félix—. Siempre lo ha sido y siempre lo será.

JeongIn vio las lágrimas aglomerarse nuevamente en los ojos del mayor y suspiró.

—Jisung hyung...—el mayor lo miró—. ¿Por qué te molesta tanto? Le dijiste a Seungmin que no te molestaría si lo volvías a ver.

Félix frunció su ceño al ver que el chico ocultaba su rostro nuevamente entre sus piernas, Seungmin le dio un golpe al pelirrojo haciendo que este se queje.

—No es lo mismo decirlo que hacerlo.

Su mirada se posó en el menor.

—No puedo evitar decir que por primera vez en años sentí a mi lobo emocionarse por tener a un alfa cerca...—susurró mientras escuchaba a Félix gruñir—. Minho no solo es el papá de mi cachorro, es mi alfa.

𝓡𝓮𝓭𝓮𝓶𝓹𝓽𝓲𝓸𝓷 - 𝓗𝔂𝓾𝓷𝓘𝓷Donde viven las historias. Descúbrelo ahora