VIII: "Mitsuru Fukushige"

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-¿Por qué llegamos tan pronto? Quiero dormir más-Se quejó el menor de los 3 mientras bajaba del auto con unas cuantas pertenencias.

-Ken, dormiste demasiado tarde, tuviste todo el viaje-Replicó el conductor pelinegro cansado mientras veía bajar al de hebras doradas con el mismo cansancio que el.

-Lo mejor del sueño es que se goza mejor estando cerca de la playa, ¿verdad, Setagawa?

-Como digas Oshiba, pasemos a lo que venimos, hay que empezar a buscar a Asaya.

-Ire a la casa de playa a dejar las cosas, vendré por ustedes en la tarde-Dijo el pelinegro causando la atención del rubio quien enterneció su mirada.

-Con cuidado... Kousuke-san.

-Igual tú, Masahiro.

El rubio rodeó el auto hasta llegar a la ventana del piloto, una vez que Kousuke la abrió, el menor besó la mejilla del ojigris y sonrió provocando un bufido en el más bajo y felicidad en el mayor.

-Vámonos, Setagawa, luego te comes a mi hermano si quieres-Se quejó el pelinegro menor mientras iba al lado del ojiverde jalándolo consigo.

-¡Oshiba! ¡No digas cosas tan vergonzosas!

Ambos cómplices se dirigieron a la playa mientras que Kousuke se iba de ahí.

Una vez ahí, los dos engañados caminaron por la orilla de la playa.

Estaban en silencio, disfrutando el sonido de las olas y de la brisa marina hasta que el rubio sacó un tema enmedio de su curiosidad.

-¿Cómo fue?

-¿De que hablas?

-Conocer a Asaya, esta de más decir como yo lo conocí, es obvio que fue por tratos entre nuestras empresas.

-Bueno, desde niños él fue mi primer y único amor, él me confesó que estaba enamorado de mi desde el primer día que nos conocimos cuando salimos de la escuela elemental y, gracias a ello, yo le confesé que sentía lo mismo que el. Fue así que comenzamos a ser novios en la escuela media, de por sí yo estaba enamorado de él, con el inicio de nuestro noviazgo quede totalmente hechizado por el. Fue así que continuamos con nuestra relación hasta que, finalmente, al terminar nuestras carreras, nos casamos.

-Espera, ¿tienes carrera universitaria?

-Por supuesto, soy administrador de empresas.

-Eso es sorprendente Oshiba, entonces, ¿por qué eres solo alguien que cuida de la casa? Podrías ejercer tu carrera y así poder ser más independiente.

-Bueno... Asaya decía que no veía necesidad de que yo también trabajara si él me iba a mantener como un buen esposo-Confesó el más bajo provocando algo de enojo en el de ojos esmeralda.

-Siento que es exagerado, ambos podrían ser un equipo y al contrario, aumentar sus privilegios con sus sueldos juntos.

-Supongo... Que no lo pensé en su momento, mi amor hacia Asaya solo me hacía verlo como lo mejor, fui un estupido, ahora me doy cuenta de ello. Desperdicie gran parte de mi vida sin ejercer lo que tanto amo hacer solo por un amor que al final, me lastimo.

-Nunca es demasiado tarde Oshiba, podrías arriesgarte y buscar un empleo, no lograrás nada sin intentarlo.

-No se que tan buena sea esa opción, nunca pude ejercer mi profesión así que tengo nula experiencia, dudo que me den la oportunidad con ese detalle, además que ya no soy tan joven.

-Oshiba, si de verdad necesitas ayuda... Cuentas conmigo.

Kensuke sonrió ante tal ofrecimiento mientras el rubio le correspondía el gesto de forma sincera.

The other man (HMH)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora