Tan Profundo Como El Mar - YiZhan

🏴‍☠️ PRÓLOGO 🏴‍☠️

Cuenta la leyenda que hace cientos de años, durante la “Edad Dorada de los Piratas”, existían en el Sureste de China, 4 Grandes Reinos que dominaban las aguas de Océano Pacífico.

Desde las verdes montañas hasta las profundidades del mar, no había un solo grano de arena que los 4 Grandes Reinos no pudieran controlar. Los imponentes barcos llenos de mercancías zarpaban de sus costas y viajaban por todo el Océano Pacífico para vender sus productos y regresar a sus reinos colmados de riquezas. Las filas de sus ejércitos estaban plagadas de soldados astutos y tenaces que habían logrado conquistar tierras por montones. Sus historias de grandeza iban de boca en boca por todo el Oriente y un poco más.

El primero y más poderoso era el Reino Wang. Tenían todo lo que un reino necesitaba para ser influyente y próspero: Enormes extensiones de tierra, los más fuertes guerreros y las más hermosas doncellas, las mejores cosechas, los barcos más veloces y resistentes, los más destacados armeros... El Reino Wang era conocido por ser abundante en todos los sentidos y prácticamente invencible, nadie se atrevía a levantar la espada en contra de su gente y eso los hacía sentirse orgullosos.

El segundo reino era el Reino Xie, más conocidos por ser los principales productores y comerciantes del Sureste. Se dedicaban a la agricultura, pesca y comercio de sus productos. Tenían muchas riquezas gracias a sus negocios y todos sabían que ese reino era sumamente importante ya que era la base del comercio y de los productos alimenticios que se consumían en la mayor parte de Asia. Podían poseer un ejército de menor poder y una menor extensión de territorio, pero sus conocimientos en agricultura y pesca, así como su astusia para el comercio, los habían hecho grandes y sumamente ricos.

El tercer reino era el Reino Qian. Ellos eran conocidos por su alta costura y artesanías. Su gente se dedicaba a la producción de finas telas y piezas artísticas de altos precios. De sus territorios salían hermosos vestidos de seda y ostentosos juegos de té hechos de oro y jade. Tenían un muy refinado gusto y sus hermosos diseños dominaban el mundo de la moda en todo el Oriente.

El último reino era el Reino Bai. Ellos no tenían grandes riquezas ni grandes extensiones de tierra, tampoco poseían un ejército muy numeroso o poderoso, sin embargo tenían algo que era solamente suyo: la magia. Todos en el Sureste de China sabían que en sus tierras podías encontrar las mejores armas mágicas y a los mejores hechiceros. Podían no ser tan poderosos como los otros 3 reinos pero eran extremadamente respetados y temidos debido a que su gente poseía antiguos conocimientos de magia y hechicería. Nadie quería meterse con ellos por temor a ser convertidos en pequeños insectos o alguna superstición similar. Sin embargo, contrario a lo que el resto de gente pensaba, las personas del reino Bai eran gente maravillosa y muy pacífica, poseían un hermoso corazón y un profundo respeto por las enseñanzas de sus ancestros.

Sin duda alguna, fueron los años más hermosos y brillantes que su gente pudo presenciar. La paz y la prosperidad reinaban de Norte a Sur y de Este a Oeste, cualquier disturbio o guerra parecía ser lejano e imposible...

Sin embargo, el corazón humano puede ser fácilmente consumido por la avaricia.

Los sobrevivientes nombraron a esa trágica noche: “La Noche Sin Estrellas”, pues todas las hermosas estrellas que solían admirar por las noches habían sido reemplazadas por el humo de los cañones y los gritos desgarradores de las personas que perdían la vida durante la batalla. Aquella noche el cielo se llenó de humo y la tierra de sangre.

Y entonces, lo que se creía imposible se hizo realidad. Durante 5 largos y trágicos meses, la guerrera consumió cada rincón del Sureste de China. Día y noche se escuchaban los estallidos de los cañones, los disparos y el crujir de los hogares que eran destruidos. Los ciudadanos trataban de esconderse y escapar mientras que los soldados se enfrentaban en la guerra y perdían la vida en batalla.

Hasta que un día, la guerrera terminó. Los sobrevivientes salieron de sus escondites y presenciaron con dolor los restos de lo que alguna vez llamaron su hogar. Miles de vidas se habían perdido y cientos de construcciones quedaron reducidas al polvo.

Durante las próximas semanas la gente se dedicó a reconstruir sus viviendas y honrar la memoria de los que habían muerto en batalla.

No fue hasta varios meses después, cuando la tormenta se había calmado un poco, que todos recibieron la trágica noticia: el Reino Bai había desaparecido.

Según la historia, el Reino Bai no solo perdió la guerrera, también perdió a todos y cada uno de sus ciudadanos, quienes murieron orgullosamente en la batalla defendiendo sus territorios y a sus familias.

Nadie podía creerlo, a pesar de las fuertes bajas que tuvo cada reino, ninguno había perdido más del 20% de su gente. ¿Por qué los 3 reinos se ensañaron tanto con el Reino Bai a tal punto de asesinarlos a todos?

Hubo reacciones variadas entre los habitantes de cada reino. Algunos se lamentaron por la muerte de tantos inocentes mientras que otros se justificaron con mentiras y chismes, diciendo que el Reino Bai merecía caer.

Las personas eran incapaces de asimilar semejante atrocidad, así que el miedo y el reencor comenzaron a invadir cada corazón. La gente de los 3 reinos restantes empezó a crear barreras en los límites de sus territorios y nadie quería acercarse si quiera a estos. La tensión se hizo sumamente grande y la competencia por ver quién era el más fuerte comenzó.

Todos estaban temerosos pues la primera parte de una vieja profecía se había cumplido:

“La venganza cegara los ojos del dinero y los corazones de los vivos serán destruidos por la codicia...”

Sin embargo, mantenían en sus corazones la esperanza en el resto de la profecía:

“A la luz de las estrellas, la tierra y el mar se harán uno. Los Reyes del Bosque vencerán en la batalla y los desaparecidos podrán regresar a sus hogares. La justicia caerá sobre la cabeza de los deudores y la paz regresará a todos los reinos."

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🎧 Runaway – AURORA