Capítulo 21

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No era la primera vez que le sucedía. Había habido otras ocasiones en las que su corazón la había traicionado de la misma manera cuando se propuso olvidarlo, sin embargo, pensaba que sus sentimientos estaban superados, pues no se había puesto tan nerviosa en mucho tiempo. Su presencia simplemente dejó de importarle el día que se marchó a la capital y rehízo su vida, encontrárselo en los baños había sido toda una sorpresa, pero, entonces ¿por qué reaccionaba de aquella manera? Su cuerpo estaba tenso, sus manos le hormigueaban y un extraño deseo de querer llevárselo al baño y que la empotrase contra la pared nacía desde muy dentro de ella. Pero ¡no tenía sentido! Lo odiaba y, no obstante, lo deseaba como nunca. No habían dejado de mirarse a los ojos desde que sus miradas se cruzaron, leía en ellos algo que no quería etiquetar o, tal vez, tuviese miedo de hacerlo. Era consciente de que no estaban solos y, sin embargo, no le importaba en absoluto. Cualquiera que los viera podría notar la tensión sexual que anidaba a su alrededor y la cual ninguno quería romper. No sabía cuánto tiempo había pasado desde que sus miradas se habían entrelazado, tenía muchos sentimientos contradictorios y muchos de ellos sin sentido para ella. Tenía la sensación de que lo conocía, de haber pasado tiempo con él, de haber creado recuerdos más allá del trabajo que habían compartido, ¿lo habría soñado? Estaba empezando a pensar, que tal vez, la habían drogado... ¡era prácticamente imposible que todo lo que estaba sucediendo fuese real!

- ¿Te encuentras bien?

Una voz grave se escuchó a su espalda, debía ser el chico con el que estaba hablando. Notó como su mano se posaba sobre su hombro con la intención de llamar su atención, mas no lo consiguió, quería saber si Héctor sentía lo mismo que ella, saber por qué la miraba de aquella forma, saber si para él, también era raro todo aquello. Héctor desvió la mirada hacia la mano que aún permanecía en su hombro reclamándola, al dirigir de nuevo la atención a sus ojos vio una especie de brillo como si esperara que dijese algo, como si le molestara, pero ¿por qué? Tras unos segundos sin respuesta decidió que era el momento de romper la magia que habían creado y se marchó del pub, no pudo evitar mirar aquella ancha espalda alejarse y sentir como si estrujaran su corazón cual esponja mojada.

- Sí - la voz le sonó rara hasta para ella, le costaba respirar y luchaba por no derramar lágrimas que se acumulaban cada vez más en sus ojos. Se sentía abandonada y lo peor de todo traicionada.

- No lo parece - respondió Mia mientras la rodeaba con sus brazos - creo que es mejor que nos vayamos. Lo siento mucho, chicos.

- Nos daréis al menos vuestros números ¿no?

- Mejor te doy el Instagram - intercambiaron perfiles y se marcharon de allí.

En la salida vieron a Héctor, este estaba hablando con uno de sus amigos, aunque no sabía cuál de todos. Las miradas volvieron a cruzarse, pero ninguno de ellos se acercó. ¿Qué quería? ¿Qué era lo que pretendía? Eran preguntas que se hacía a sí misma pues no tenía sentido ninguno para ella los últimos quince minutos de su vida. Se dirigieron al coche y condujeron hasta la casa de los padres de Mia.

Mia era su mejor amiga, habían estado juntas desde que ambas tenían uso de razón. Habían ido al colegio juntas, sus padres prácticamente vivían al lado y siempre se habían apoyado la una a la otra hasta que ella decidió marcharse del país y conoció a su exnovio. No fue hasta que se enteró de lo que le había pasado que no se reconciliaron y volvieron a estar igual de unidas que siempre. A pesar de que el destino había separado sus caminos en varias ocasiones, jugó a su favor cuando encontró trabajo en la capital y acabaron viviendo juntas por casualidades de la vida o ¿sería del destino? Ella no creía mucho en el destino, después de todo no había estado nunca de su lado y siempre que había creído una cosa había resultado ser todo lo contrario, pero por alguna extraña razón que escapaba a su comprensión, esa vez, sí creyó. ¿Qué le estaba pasando?

Enredos del destino (Destino 1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora