Al ser el mayor, Binghe tenía el honor de iniciar con el plan: "hacer que ellos los inviten a salir."
Binghe había optado por vestirse de manera más casual, una polera de cuello alto negra, unos jeans oscuros y unas zapatillas. Detrás de él caminaban Hua Cheng y Wei Ying, quienes acompañaban al mayor para darle ánimos.
Los tres observaron por la vidriera dentro de la tienda, esta se encontraba casi vacía, por lo que era una buena oportunidad para hacer su acercamiento. Y frente al mostrador estaba sentado Shen Yuan ojeando una revista, con un rostro que demostraba aburrimiento.
—Estamos con vos, suerte. — exclamó Hua Cheng para luego empujar a Binghe hacia dentro del lugar.
El mayor ocultó cualquier señal de nerviosismo, y aprovechó que Shen Yuan no lo había notado ingresar, para caminar por los pasillos disimulando estar buscando otros libros.
Tomó el primero que llamó su atención, y luego leyó el cartel donde indicaba qué género de libros se encontraban en ese pasillo: "ciencia ficción/aventuras". Al verlo soltó un fuerte suspiro, y con el libro en mano, caminó lentamente hacia el mostrador.
Y antes de llegar a su objetivo, miró hacia afuera, donde Hua Cheng y Wei Ying lo observaban. Estos asintieron con la cabeza y Binghe continuo.
—Buenas tardes.—saludo mientras dejaba el libro sobre la superficie.
Shen Yuan levantó la cabeza al oírlo y con un rostro serio dijo —Buenas tardes.
Binghe sonrió aún más. —¿Cómo estuvo tu mañana?
—tranquilo.—respondió Shen Yuan mientras pasaba el libro por el escáner.
Binghe aún continuaba sonriendo mientras buscaba que el otro lo mirara.
—Sabes, yo sé que no es de mi incumbencia, pero veo que te paso algo bueno, ¿no te duele la cara?
Entre dientes, aún sonriendo, Binghe contestó —no pasó nada en especifico, solo es un lindo dia.
Shen Yuan lo observó algo extrañado y también un poco asustado. —¿vas a seguir sonriendo?
Binghe comenzó a reír de la nada—Por supuesto.
Shen Yuan lo miró aún más extrañado, ya que no había ningún motivo por el cual Binghe podría reírse.
—Son cincuenta yuanes.
Binghe pagó el libro y con el objeto entregado, aún seguía parado frente al mostrador.
—¿se te ofrece algo más?—preguntó Shen Yuan un poco, muy, indiferente mientras regresaba su vista a la revista.
La sonrisa de Binghe se esfumó —No, eso era todo, que termines bien tu día.
El mayor salió de la tienda, pasó por al lado de sus amigos como si fueran desconocidos hasta que se alejó un poco de la tienda.
Sintió a sus amigos viniendo detrás de él y se giró inmediatamente — ¡No funcionó! ¡Ni siquiera hablamos como solemos hacerlo, parecía de mal humor!
—Y, a mi me dio un poco de miedo tu cara—comentó Hua Cheng
—¡Pero si ahí decía que sonriera!
—¡No tan exagerado!—respondió el menor.
Wei Ying sacó una libreta de su mochila junto a una lapicera —entonces esto no sirve, pasemos a la siguiente fase—dijo mientras tachaba "sonríe con frecuencia" de su libreta.
Hua Cheng golpeó a Wei Ying por la cabeza —¿por qué lo tachas? Es tu turno de intentarlo.
Wei Ying negó con ambas manos—en absoluto, sino le funcionó a Binghe ge a mi menos, haré el segundo punto.
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Tres cabezas NO piensan mejor que una.
Fiksi PenggemarLuo Binghe todas las semanas regresa a casa con libros que jamás leerá, pero eso no importa si puede ver al dueño de la tienda sonreír. Wei Ying ya no sabe qué excusa usar para ir a la florería, y ahora el departamento parece un jardín, pero no se...