𝑫𝑰𝑹𝑬𝑪𝑻𝑶𝑹 ❤︎ 𝙽𝙰𝙼𝙼𝙸𝙽 | 𝕥𝕖𝕣𝕞𝕚𝕟𝕒𝕕𝕒

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A Jimin le gustaba la mirada dura que le era dirigida. A pesar de no saber lo que hacía le gustaba sentir esa mirada llena de hambre.
Para Jimin todo era como una rutina, simplemente hacía lo que le habían dicho, pero al parecer todo iba bastante bien ya que Namjoon tenía su mano sobre su cabello ayudándolo y disfrutando.

Sorprendiéndose a sí mismo, se admitió que le estaba gustando bastante lo que hacía, le gustaba esa sensación extraña de poder, el saber que sus gemidos eran gracias a él y estar seguro de que estaba dando su máximo para que Namjoon lo disfrutara por completo.

Además que ayudaba bastante el hecho de ser tan deseado, que Namjoon pasaría por alto sus errores ya que no le importaba que fueran mínimos con tal de tener como había querido por tanto tiempo a su alumno favorito.

Namjoon sabía que Jimin no tenía experiencia, y eso le encantaba ya que se estaba sorprendiendo con todas las acciones que llevaba a cabo. Realmente nunca creyó que podría pasar a algo más que algunos besos con él.

Pero le encantaba el pequeño juego que tenían, el cómo Jimin se hacía el inocente cada que él quería llegar más allá. Namjoon aún no era perfectamente consciente de la verdadera inocencia de Jimin, aún creía que simplemente era su faceta fuera de la cama, pensaba que en el sexo sería distinto.
Pero al parecer era igual de tierno e inexperto que en todo lo demás.

Le tomó la barbilla alejándolo de su pene en cuanto sintió los dientes rozarle con algo de fuerza lastimándolo.

-Mierda bebé, espera, no debes meter los dientes amor

Jimin bajó la cabeza con vergüenza, fue una de las primeras cosas que sus amigos le habían dicho, pero no pudo controlarlo.

-Perdóname Nammie, no quería lastimarte

Namjoon pudo mirar la culpa en su rostro angelical, lo tomó de las axilas levantándolo sin esfuerzo y sentándolo de nuevo en su regazo.

-Tranquilo amor, no pasa nada, sólo fue un pequeño error

-Pero Jiminnie te hizo sentir mal -comenzó a acariciarle la espalda intentando evitar que sintiera más culpa

-No bebé, tranquilo, estoy bien... no es necesario que lo hagas ahora, no te sientas obligado

-Pero Jiminnie quiere demostrarte que puede -el puchero en sus labios se pronunciaba mientras jugaba con los botones de su camisa

-Yo sé que puedes bebé -se acercó a besar esos esponjosos y rojos labios -Pero puedes ayudarme sólo con tu mano por ahora

Jimin sonrió sintiendo cómo sus nalgas eran amasadas y aceptando lo último volvió a tomar la dureza de Namjoon comenzando un masaje de arriba hacia abajo y pasando el dedo por el glande.
Se inclinó hasta quedar oculto en el cuello de su novio y comenzó a repartir besos por la zona.

Namjoon estaba disfrutando de las cálidas manos sobre su hombría, realmente se sentía muy bien, los deditos de Jimin sabían cuándo y dónde tocar, y por un momento sintió celos al imaginar a otra persona tocando a su chico y enseñándole todo lo que le estaba demostrando.

Los celos hicieron que presionara aún su cintura sin medir la fuerza.

-Nammie... me lastimas

Esas palabras le cayeron como un balde de agua fría, ambos deteniendo sus acciones.

-Perdóname bebé no era mi intención hacerte daño, es sólo que... lo hablaremos después

Jimin volvió a tomarlo haciendo sus movimientos cada vez más rápidos y sintiendo el líquido preseminal. Lo tomó esparciéndolo mientras con una mano le acariciaba las bolas.