Capitulo 5

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-¡Corre, corre, corre!- grite mientras veía a Luz competir. Ella se movía ágilmente, como si no le costara para nada.- ¡Eso es Martínez! ¡Lo tienes, vas a conseguirlo!- aplaudí esperándola en la meta.

Se notaba la concentración en su rostro.

-Es muy buena.- dijo Jack, él era el sargento de la otra unidad. Nos conocimos bajo las mismas circunstancias que ahora, en una competencia entre cuarteles, solo que cuando lo hicimos éramos reclutas.

-Es tan buena que nos quedaremos con los puntos.- afirme.

-Pues no estés tan seguro.- ví como un recluta de la otra unidad alcanzaba a mi soldado. La sonrisa se borró de mi rostro.

-¡Vamos Martínez!- grite para darle aliento.

Observé cómo corrían a la par, la competencia se había vuelto una locura. Luz avanzaba pero el chico la alcanzaba con facilidad.

Los gritos de las dos unidades se escuchaban, todos alentaban a sus compañeros.

Vi como el chico se posicionaba detrás de ella, demasiado cerca como para confiar. Tuvo una oportunidad y la tomó, pateo los pies de Martinez haciéndola caer al suelo.

-Hijo de puta.- se me escapó por la boca. Jack me miro serio pero poco me importo. El recluta siguió avanzando y logró llegar a la meta sin dificultades.

Me acerqué corriendo a donde estaba Martinez, ella se quejaba y de seguro era por alguna dolencia.

-Se me ha jodido un tobillo.- dijo agarrándose la zona.- te he dicho que no estoy acostumbrada al éxito y he tenido razón, debí renunciar a esto.

Unas lagrimas aparecieron en sus ojos y mi pecho reaccionó extrañamente, como si me faltara el aire.

-Ven aquí.- la ayude a levantarse.- has estado bien, más que excelente.

-Ha hecho trampa.

-Lo se, me haré cargo de eso en cuanto verifique que tu tobillo está bien.

-El cuartel cuarenta y dos ha ganado diez puntos.- Indicó el cabo que estaba controlando el puntaje.

-Eso es mentira y lo sabes, ha hecho trampa y lo mínimo que espero es la descalificación de ese recluta.- dije enojado mientras ayudaba a Martinez a avanzar.

-Se ha tropezado y ha hecho caer a tu soldado sin querer, deja de quejarte.- habló Jack y la sangre me hirvió.

-¿Sin querer? Pero es que por poco no me arranca el pie, ¿que clase de estupidez te estás inventando?- hablo Luz enojada.

-Soldado no me falte el respeto.

-Calla Martínez, que empeorarás las cosas.- le dije al oído y seguimos avanzando mientras ella se quejaba. Le dolía, era más que obvio.

Fuimos juntos hasta la enfermería y allí la dejé.  Quise quedarme, camine de un lado a otro deliberando si debía hacerlo o no. Era mi recluta, tenía que verificar que esté bien pero al mismo tiempo lo que restaba de la unidad estaba afuera. Se que Mario los podía controlar perfectamente pero debía ir a reclamar esos puntos.

Camine decidido hacia la pista de obstáculos, Martinez iba a estar bien, ya estaba en la enfermería y yo no podía hacer más nada por ella.

-Cabo Davis, los puntos que le han dado al cuartel cuarenta y dos no son válidos. Todos hemos visto como el recluta ha hecho trampa. Haz las cosas bien.- dije tranquilo.

¡La amo, Martinez!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora