Robin ya había aceptado vivir con Law, ellos aún no habían tenido intimidad y ya viviendo como pareja ese tema sería de mucha importancia, una tarde quería despejar su mente, había pensado que Law era perfecto y con el podía formar la familia que tanto había deseado.
Robin llegó al Thousand Sunny y se sentó en una mesa alejada, pidió una botella de vino, y se sumergió en sus pensamientos, recordó un poema muy conocido de Paulo Coelho "Dos amores"
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Dicen que a lo largo de nuestra vida tenemos dos grandes amores: uno con el que te casas o vives para siempre, puede ser el padre o la madre de tus hijos, esa persona con la que consigues la compenetración máxima para estar el resto de tu vida junto a ella.
Y dicen que hay siempre, un segundo amor una persona que perderás siempre, alguien con quién naciste conectado, tan conectado que las fuerzas de la química escapan de la razón y te impedirán siempre, alcanzar un final feliz.
Hasta que cierto día dejarás de intentarlo...Te rendirás y buscarás a esa otra persona que acabarás encontrando, pero te aseguro que no pasarás ni una sola noche, sin necesitar otro beso suyo o tan siquiera discutir una vez más.
Te librarás de él o de ella, dejarás de sufrir, conseguirás encontrar la paz, pero te aseguro que no pasará ni un solo día en que desearás que este aquí para perturbarte.
Porque a veces se desprende más energía discutiendo, con alguien a quien amas, que haciendo el amor con alguien al que aprecias.
Law era ese primer amor, con el que compartes toda tu vida, tienes hijos y te estableces; Y definitivamente Zoro era el segundo amor, ese que recuerdas en todo momento, y que extrañas a cada instante, pero que siempre perderás, con el que nunca habrá un final feliz porque su destino no era estar juntos.
Estaría toda su vida con Law porque lo quería, pero a Zoro lo amaría el resto de su existencia.
Zoro caminaba sin rumbo fijo, pensó
_Porque soy tan infeliz, a pesar que al dojo cada vez le va mejor y tiene mucho reconocimiento a nivel mundial, mi vida personal es un desastre, la relación con mis amigos sigue siendo la misma con la excepción de que sé que algo me ocultan, y prefiero no preguntar pues se perfectamente que tiene que ver con Robin y evito hablar de ella, Mihawk que siempre ha sido como un padre ya casi no me visita, se excusa diciendo que no tiene mucho tiempo porque Perona esta de visita y quiere compartir con ella, pero sé que no va para evitar verle la cara a Tashigi, a el nunca le ha simpatizado mi novia, por otro lado Perona que debido a su trabajo se había convertido en una excelente detective no dejo pasar oportunidad para sermonearme y decime cuan estúpido era y que no engañaba a nadie pretendiendo querer a esa mujer que llamaba novia.
Por último y mi mayor infierno mi novia, Tashigi se había instalado en mi vivienda, a pesar que le había dejado muy claro que no quería vivir con nadie, ella dijo que ya era el momento de convivir como más que novios pues llevábamos muchos años juntos.
Ese es el motivo por el que estoy caminando, no quiero llegar a mi apartamento y tener que ver a esa mujer, sin darme cuenta llegue al bar que a Robin tanto le gustaba, decidí entrar total el ambiente de ese lugar era excelente.
