Mi Evans (James Potter Y Tú)

Capítulo 47

*Narra _______________*
A la mañana siguiente, desperté al darme cuenta que James no estaba a mi lado. Me senté con lentitud en la cama y miré la cama de al lado, dónde estaba Lily con Emma. La pequeña dormía, mientras Lily solo acariciaba su espalda con lentitud.

Me levante con cuidado y me acerque a la cama, sentándome en el borde, Lily me miró y me regalo una pequeña sonrisa triste, así que tome su mano con fuerza.

—¿Qué fue lo que te ocurrió?

Mi hermana suspiro profundamente y empezó a contarme con detalle como la había atrapado y torturado en esas dos semana. Me sentía cada vez peor por pensar un momento en que Lily nos había tracionado. Al final me enseño su brazo, donde Bellatrix le había escrito Sangre Sucia, haciéndome sentir más odio por ella.

—Lo siento, no debí de decirles dónde estaban —me dijo empezando a llorar, haciendo que Emma despertara.

—Tranquila, esta bien —la console mientras limpiaba sus lagrimas—. No tuviste la culpa —abrazo a su Emma, que quería llorar por ver así a su madre—. Descansa un poco más, Lil.

Ella asintió con la cabeza, mientras abrazaba a Emma.
Me levante, para ver cómo la puerta se abría y vi una charola con comida siendo cargada por aquel elfo, haciéndome sonreír.

—La señora Potter no puede estar de pie —me dijo alarmado cuando me vio—. Debe de estar en la cama descansando.

—Tranquilo, lo haré lo sonreí —fui a mi cama, mientras él dejaba la charola en la mesita—. ¿Sabes dónde esta mi esposo?

—El señor Potter esta terminando de hablar con Albus Dumbledore.

Aquello me sorprendió, habíamos intentado mantener a Dumbledore fuera de esto, ¡acaso James le habrá contado todo?

—Gracias, Dobby.

Este me hizo una reverencia y salió de la habitación.
Mire el plato comida, a decir verdad no tenía mucha hambre, solo tome el vaso con jugo y bebí un poco, esperando a que James regresara. Por debajo de la puerta vi unas pequeñas sombras, sonreí al ver que Nymphadora abría la puerta, tomando la mano de James Sirius entraron a la habitación. Dudick, que Dobby fue a salvar por ordenes de Harry también estaba ahí, así que ella se fue aun rincón y se hecho, mientras el pequeño James no tardo en correr a abrazarme y yo a él.

—Dijo que quería estar con su abuela —me dijo Dora mientras subía a James a la cama—, pero tú no estas tan vieja para ser su abuela —reí ante ese comentario.

—¿Cómo te has portado, Dora? —le pregunte—. ¿Ya viste a Remus? —ella se sonrojo de inmediato mientras su cabello cambiaba de color, haciéndome sonreír; aun con 7 años parece que su enamoramiento por mi amigo no se iba.

—Él esta descanso en la sala que el tío Sirius y Regulus —respondió la niña.

—Así que los fuiste a espiar, eh —su cabello volvió a cambiar de color, asombrando a James y a Emma, que estaba sentada en cama mirándonos.

—Ya están despiertas —dijo James entrando con una sonrisa a la habitación—. Nymphadora, tu mamá te busca.

La niña cambio su cabello a rojo y se fue de ahí enojada, haciendo reír a James, era claro que no le gustaba que le dijeran su nombre completo.

James se sentó junto conmigo y el pequeño James, miró a Lily.

—¿Estas bien? —preguntó.

—Lo estaré —sonrió triste y abrazó a Emma.

—¿Por qué vino Dumbledore? —le pregunte.

—Se entero sobre el ataque. Le jure que estábamos bien y claro que se escondieron —dijo al ver mi cara de preocupada por Harry, Ron, Hermione, Ginny y los niños—. Dijo que el mejor lugar para quedarnos por ahora era aquí. Pronto solucionaremos todo, ¿de acuerdo? —asentí con la cabeza.